Domingo, 29 de septiembre
UNA TRAGEDIA ESPAÑOLA
Hay escritores que son como de la familia. Uno de ellos,
Antonio Machado; el otro, Miguel de Unamuno. Trece o catorce años tenía cuando
compré, en la Austral, las Poesías
completas del primero de ellos. En la misma colección, poco tiempo después, Andanzas y visiones españolas, del segundo. Desde entonces, los leo, los releo,
me los sé de memoria.
No puedo
ver por eso Mientras dure la guerra,
la película de Amenábar, como una película más. Es como si contara una historia
de mi familia.
Temía que
no me la fuera a creer, que dándomelas de listillo –me conozco– me dedicara a
buscar pequeños detalles inexactos. Veo algunos, pero no me importan. No puedo
evitar que, en más de un momento, se me llenen los ojos de lágrimas.
Tardó
Unamuno en darse cuenta de lo que estaba verdaderamente pasando, pero de su
cobardía y ceguera le salvó el gesto final.
¿Podría
pasar hoy algo semejante? Podría. No tengo ninguna duda de que, si las cosas siguen
por mal camino, buena parte de la sociedad española aplaudiría fervorosa una
intervención del ejército en Cataluña. Y que no faltarían voluntarios para
hacer el trabajo que entonces hicieron los falangistas: arrasar y arrancar la
mala yerba.
También
algunos españoles “traidores” lo pasaríamos mal. Se revisarían mis artículos y,
sobre todo, los comentarios subidos a la Red, donde digo lo que pienso sin
restricción ninguna, como si la imperfecta democracia que tenemos –pero la más
perfecta que hemos tenido nunca– fuera para siempre.
Y lo más
terrible de la película de Amenábar, lo que más me acongoja a mí, es que si
aquella no fue una lucha entre la bestia y el ángel, como en el poema de Pemán,
si bestias había en los dos lados y buenos españoles en ambas partes, también
ahora, entre los que apoyarían cualquier barbaridad, si se diera el caso,
habría padres de familia, gente bien intencionada, incluso algún amigo o amiga
mío.
Cuando
Franco, astutamente, cambia la bandera republicana por la monárquica (sin
intención ninguna de traer la monarquía, por supuesto), se produce uno de los
momentos más incómodamente emocionantes de la película. Un soldado comienza a
cantar el himno de España con letra de Eduardo Marquina y luego se van sumando
más y más, soldados y civiles, hasta llenar la calle. La escena me recordó
aquel pasaje de Cabaret en que un
coro de niños angelicales entona un himno que finalmente reconocemos como nazi.
La bandera
de España, la bicolor, como dice Franco en la película de Amenábar para evitar
la referencia monárquica, es un símbolo dual, representa a todos o a una parte
de los españoles según el contexto.
Estaba
claro que en aquella Salamanca representaba solo a una facción de los
españoles, y no a aquella con la que yo más me identifico, pero no cabe ninguna
duda que no todos ellos eran villanos fascistas. El himno de España, con letra
de Marquina, también lo sentí como mío.
El
patriotismo no es cosa de derechas. Los que fusilaron a Rizal en Filipinas –a
él se refirió Unamuno en su intervención, aunque no aparezca en la película– no
eran patriotas, sino asesinos con uniforme y cobertura legal. El patriota
defiende su patria, pero no le dice a nadie cuál debe ser la suya. Ni la impone
a sangre y fuego a quienes se sienten ajenos a ella, aunque por azares de la
historia puedan estar integrados –como Filipinas o Cuba entonces– en la misma
organización estatal.
Lunes, 30 de septiembre
CARA Y CRUZ
Lo pasé muy bien esta mañana hablando de Walt Witman, junto
a otros poetas y profesores, en la biblioteca del Milán. Lo pasé muy mal esta
tarde presentando el libro premiado el año pasado con el premio Emilio Alarcos
en el palacio del conde de Toreno, a cuyo “corazón de cieno” se refirió
Espronceda en su Diablo mundo.
El libro,
que no voté, como tantos otros olvidados y olvidables que obtuvieron el
galardón, me pareció borroso y sin interés. Pero allí estaba el autor con su
mujer, y luego cené con ellos y con Josefina Martínez, Carlos Marzal y Aurora
Luque. Salí como pude del paso cuando tuve que cumplir el engorroso encargo de
presentar la obra, pero la diplomacia no es mi fuerte y creo que se notó mi
falta de entusiasmo, por decirlo de manera amable.
Durante la
cena, en casa Amparo, para paliar mi mala conciencia (el poeta me cayó muy
bien, y más cuando hablamos de sus hijos, de cinco y un año), me dediqué a
pinchar a Josefina –otro de mis deportes favoritos– para que nos expusiera sus
ideas sobre el asturiano (Berta Piñán fue la estrella invitada) y otras
cuestiones conexas, como el feminismo o el populismo. Yo de vez en cuando la
contradecía un poco para que disparatara más. Creo que formamos un buen dúo
cómico. Sospecho que los invitados valencianos se divirtieron bastante.
Martes, 1 de octubre
UN SUPERHÉROE
Hay conflictos que solo puede resolver un superhéroe. Yo
conozco a uno que vive al lado de mi casa. Es el protagonista de Las aventuras de Martín, un libro que no
podría haber escrito sin su colaboración. Martín pertenece a una nueva
generación de superhéroes, los superhéroes cuánticos, aún no descubiertos por
la Marvel.
Esta tarde
presentamos sus quince primeras aventuras en la librería Cervantes. Martín
intervino solo un momento y luego pretextó que tenía que madrugar para ir a la
escuela y me dejó solo. Sabe que me gusta ser el protagonista y que, si está
él, eso es imposible.
Solo un
superhéroe podría resolver un conflicto que me quita el sueño y en el que tantos
compiten por encender la mecha que lo haga definitivamente estallar y nos
traiga décadas de sangre, sudor y lágrimas. Pero Martín ha tomado la decisión,
con muy buen criterio, de no meterse en política.
Prefiere
aceptar otros encargos. Me cuenta que Rosa Navarro Durán, harta de que los
filólogos no tomen en serio sus investigaciones, le ha encargado que busque en
Venecia un ejemplar de la desconocida primera edición del Lazarillo para taparle la boca a Francisco Rico. No sé si la
encontrará, pero estoy seguro que sus andanzas por los palacios y zaquizamís
venecianos han de resultar de lo más apasionantes.
Miércoles, 2 de octubre
ESCRIBO Y CALLO
Cuando no sabemos por dónde empezar, lo mejor es empezar por
el principio.
Saber
fingir que no se tiene razón cuando se tiene ayuda a conservar amigos.
La mejor
receta para pasarlo bien es no empeñarse a toda costa en pasarlo bien.
Quien nos
odia nunca nos minusvalora.
La mentira
tiene mala prensa, pero es peor la ofensiva verdad.
Hay
secretos que son de dominio público.
Me gustaría
saberlo todo de todos y que nadie supiera nada de mí.
La modestia
es la vanidad que ha encontrado el modo de volverse invisible.
A la larga,
el amor que menos daña es siempre el no correspondido.
La belleza
no siempre lo parece.
La lógica
bien entendida olvida las reglas de la lógica.
Ningún
hombre es de verdad un hombre si no es a la vez hombre, mujer y niño.
No hay
amistad que no se funde en un malentendido, y eso es lo que tiene en común con
el amor.
Sin un poco
de veneno, la conversación y la vida carecen de sabor.
Jueves, 3 de octubre
EN LA FRUTERÍA
Soy una persona que se aburre mucho. Todos los días me
sobran dos o tres horas en que no sé qué hacer y que se alargan hasta el
infinito y en las que acabo siendo picoteado, como en el poema de Góngora, por
“infame turba de nocturnas aves”.
Yo sé por
qué me aburro a pesar de tener dos o tres trabajos, rutinas varias, libros que
leer, amigos con los que discutir.
Mi problema
es que no me interesa el fútbol (qué maravilla, enciendes el televisor o bajas
al bar, una cervecita, el partido del año –que se celebra dos o tres veces a la
semana– , gritos, indignación y entusiasmo y ya tienes resuelta la tarde) ni
tampoco especialmente la música: no la soporto como fondo, mientras hago otra
cosa, y como plato fuerte me cansa a los diez o quince minutos.
Claro que
esos problemas no lo serían si practicara la vida lenta que ahora tanto se
predica. Yo lo hago todo en la mitad de tiempo que cualquier otro. La compra,
por ejemplo. Siempre he envidiado a quienes en la frutería, cuando les
preguntan si desean algo más, lo miran todo con parsimonia y luego “¿Qué tal
están las peras?”, “ Muy sabrosas”, “Pues póngame media docena”. Al rato, “¿Desea
algo más?”. Larga pausa para pensar y después “¿Qué tal están las ciruelas?”, “Muy
ricas”, “Pues póngame cuatro”. Y así sucesivamente hasta que llega la hora de
pagar. “Son cinco euros con cuarenta”. Búsqueda del monedero, perdido en el
bolso, búsqueda entre los bolsillos del monedero hasta encontrar un billete.
Cuando la vendedora ya tiene la vuelta en la mano, pregunta “¿Quiere los
cuarenta céntimos?”, “Si los tiene…”, “Pues
creo que los tengo”. Otra búsqueda y al final los encuentra o no y cuando se
marcha y llega mi turno pienso con envidia: “¡Seguro que no le pasa como a mí,
seguro que no se aburre! Salen a comprar algo y ya está la mañana resuelta.”
Envidio a
quienes no tienen tiempo para nada. Yo lo tengo de sobra. He probado a hacer
las cosas más despacio, pero me estreso y no me salen mejor.
Viernes, 4 de octubre
INSOMNIO
“La nave del Estado navega sobre un volcán”, afirmaba
Castelar. Sonrío. Ya no hablamos así. Pero a mi me cuesta dormir temiendo el
inminente estallido.
Con esa reflexión apocalíptica sobre la agresión salvaje que está en peligro de sufrir Cataluña, Martin incurre en la misma histeria que esta, semana se ha criticado con razón a la simplona Isabel Ayuso. Parece mentira, pero los desquiciamientos confluyen, como los extremos.
ResponderEliminarEn cuanto a la película de Amenábar, usted, que conoce el episodio unsmuniano porque lo vivió en persona, evita entrar en la crítica de inexactitudes que detecta en el film. Ahora magnanimidad.
En fin, señor mío, cualquier día le vemos subir al cielo en otro carro de fuego, cual Elías redivivo.
"El patriota defiende su patria, pero no le dice a nadie cuál debe ser la suya. Ni la impone a sangre y fuego a quienes se sienten ajenos a ella, aunque por azares de la historia puedan estar integrados –como Filipinas o Cuba entonces– en la misma organización estatal."
ResponderEliminarPara JLGM el patriotismo consiste, pues, en defender a su patria dejando a una minoría de fanáticos supremacistas de una región que nunca ha sido independiente que la descuarticen, a pesar de que exista desde hace más de quinientos años.
Me había prometido no volver a intervenir aquí para cuestiones políticas, comprobado como tengo que es inútil. Sólo lo haré para precisar que ni yo mismo, ni mucha gente que conozco, y que consideramos inaceptable el quebrantamiento de la ley (y de la convivencia) que el independentismo ha promovido y sigue promoviendo en Cataluña (y que no sólo yo, sino también Amnistía Internacional, el Consejo de Europa, la Comisión Europea, y muchos otros organismos internacionales, han condenado), NO APOYARÍAMOS EN NINGÚN CASO UNA INTERVENCIÓN ARMADA. Personalmente, me opondría a ella con todas mis fuerzas. Es mediante la ley y la democracia, y SÓLO MEDIANTE LA LEY Y LA DEMOCRACIA, como debe resolverse este asunto.
ResponderEliminarPero no la temo, una intervención armada, porque no la creo posible. Lo que sí temo es que JLGM se esté dejando llevar por sus prejuicios y sus imaginaciones mucho más allá de lo que es siquiera aceptable: hasta el punto en que es capaz de insinuar, como aquí lo hace, que cualquiera que no apoye sus puntos de vista es alguien dispuesto a "arrancar la mala yerba" (entiéndase, a arrasarlo a sangre y fuego) respecto al independentismo catalán, o al menos a "aplaudir" que se haga.
Lo que, sencillamente, me parece un disparate, por calificarlo en los términos más suaves que se me ocurren.
Estoy seguro de que Jose no apoyaría una intervención armada. ¿Duda él de que hay gente que la apoyaría, incluso políticos que están en el Congreso? ¿Y duda de que, si esta se produjera, el que él la apoyara o no carecería de importancia?
EliminarPensar en la peor de las situaciones es la mejor manera de evitarlas. En enero de 1936 había muchos en España que ni se imaginaban la posibilidad de una guerra civil (incluso en julio del 36 había quienes creía que aquello se iba a solucionar en cuatro días).
El problema no es ése, sino que JLGM no parece distinguir con claridad entre políticos (y acaso votantes) de Vox o del ala más obtusa del PP, y el resto de políticos y votantes democráticos, pero contrarios no a la independencia (que es una posibilidad legítima, y de ahí que partidos que la defienden sean legales, y hasta gobiernen cuando tienen el suficiente apoyo), sino al independentismo ajeno a la legalidad democrática. Y la diferencia es abismal: como de la noche al día.
EliminarPor lo demás, pienso que el tiempo, y seguramente sin tardar mucho, dejará meridianamente claro la ninguna razón que sus temores tienen.
¡Vivir para ver! Ahora resulta que Jose (y los políticos "democráticos" españoles) no son contrarios a la independencia, sino al independentismo "ajeno a la legalidad democrática". ¿Y qué independentismo es ese? De momento lo único que el independentismo quiere es votar para poder conseguir la independencia. Y se lo impiden a palos. Y los encarcelan "preventivamente" por votar y porque quizá, a lo mejor, quién sabe, están preparando para el futuro acciones violentas.
EliminarQué terrible es defender una opción injusta. La de retorcimientos conceptuales que hay que hacer.
No, Jose, no lo que se niega es la posibilidad de que Cataluña sera independiente. Sería ilegal aunque lo quisiera el cien por cien de los catalanes. Y en ese caso, ya me dirás, cómo se consigue que Cataluña siga siendo parte de España sino por la acción del ejército. Como en Argelia, como en Cuba, como en cualquier parte en que un territorio forma parte de un Estado contra la voluntad de sus habitantes.
"Sangre, sudor y lágrimas": es muy probable que eso sea lo que se avecina. Pero yo soy muy mal profeta. Ojalá me equivoque.
Más abajo acabo de contestar a otro igual de demagogo. Ya dije que mi deseo es dejar todo esto; tengo muy claro que es imposible que JLGM y yo nos entendamos. Máxime con los modos que prefiere utilizar. Yo, que he discutido aquí muchas veces con él, y aunque le creo equivocado, JAMÁS he dicho, ni diré, que él defienda una "opción injusta", y que eso sea "terrible", y que le obligue a mil "retorcimientos conceptuales". Para él, esos términos son admisibles en una discusión civilizada (y tantos otros que ya le he reprochado). Para mí no lo son, por eso no los empleo.
EliminarNo volveré a ocuparme, aquí, de temas políticos, ni para contestarle a él ni a nadie. Basta.
Un saludo.
A meditar:
ResponderEliminar"Petulante vanidad de un pueblo que se cree oprimido."
(Unamuno sobre el nacionalismo catalán).
[A propósito de los nacionalismos y separatismos vasco y catalán] "Yo no he sido nunca lo que llaman españolista ni patriotero. Pero ante estas cosas me indigno. Y si esas gentes van a descuartizar a España, prefiero a Franco."
(Manuel Azaña. Memorias).
"El nacionalismo es la chifladura de exaltados echados a perder por indigestiones de mala historia."
(Unamuno).
La lucidez de Gregorio Morán, un intelectual de izquierdas que conoce bien Cataluña y su "proceso":
ResponderEliminar"Las manifestaciones de extrema derecha en Cataluña tienen la curiosa, por aberrante, aprobación de la extrema izquierda. Se levantan los antiguos puños proletarios, ahora funcionariales, para jalear a un tipo salido de las sacristías y los cánones, Joaquín Torra, de misa y comunión diaria, nombrado por divino advenimiento de otro que se fugó de la Justicia y reside en Waterloo, aquel lugar que fue sumidero de los últimos rescoldos del ensueño napoleónico.
No es difícil imaginar el clamor, justificadísimo, de la ciudadanía española ante una mamarrachada de Vox con antorchas. Sería lo suyo, y más que adhesiones suscitaría carcajadas. Pero aquí no. Los medios de comunicación vinculados a la Generalidad lo reflejarán como manifestación popular y los estatales apenas si moverán una ceja en esas páginas especiales que usted no leerá si vive en Zaragoza, Santander o Madrid, porque están pensadas para complacer a la parroquia.
Suele ser costumbre enseñorearse en los errores del Estado y de Mariano Rajoy que estaban, o hacían que estaban, en la inopia respecto a Cataluña, pero de la responsabilidad de la izquierda galvanizando el cadáver del catalanismo que dejó Pujol, de eso, hablamos poco. Sin la nada abnegada colaboración de la izquierda, catalana y estatal, el monstruo en el que se ha convertido la situación en Cataluña no sería el mismo. Los puñitos levantados jaleando el independentismo es una imagen que no sacará a la izquierda de la inanidad por más que encuentre abrevaderos para necesidades personales.
[...]
El doble poder en Cataluña se sufre cuando te gritan “¡vete de aquí!” y ni siquiera la izquierda fricandó dice otra cosa que “se deben encontrar soluciones políticas, dialogando”. Los que te obligan al silencio te recomiendan el diálogo. No son responsables de nada: ni de sus emolumentos."
https://www.vozpopuli.com/opinion/doble-poder-cataluna-independentismo_0_1288072467.html
Manuel Alcantara decia que la independencia de Cataluña le sentaria como un tiro, pero seria preferible a que hubiese tiros de verdad. Yo la verdad a dia de hoy no preveo una situacion asi. La constitucion impone la unidad de España, pero tambien que todo uso de la fuerza publica con restriccion de derechos requiere idoneidad, necesidad y proporcionalidad. Tambien impone que todas las resoluciones judiciales, aunque prohiban un referendum, se hagan cumplir si o si. Como en todos los estados democraticos de derecho.
ResponderEliminarVicente Garcia
Vicente, un referéndum no autorizado carece de validez legal, da igual que se haya celebrado o no. Será un encuesta más o menos fiable, pero no un referéndum. Basta con eso, no hace falta meter en la cárcel a nadie, como no se metió a Boris Johnson por cerrar ilegalmente el Parlamento británico.
ResponderEliminarDebería comprender el señor Jose que no es buena política tomarnos a los lectores por imbéciles. Durante meses ha defendido aquí este señor que el valor más elevado y absoluto para él es el cumplimiento estricto de la ley, por mucho que dicha ley diste de los deseos ciudadanos o atropelle voluntades mayoritarias (las cuales, por cierto, se rechaza conocer). Ahora nos quiere convencer de que es un buen chico que nunca apoyaría (con mayúsculas) una intervención armada en/contra Cataluña. Si cumplir la ley a ciegas y a rajatabla, por lesiva que sea, es el mandato supremo para Jose, es una indecente mandanga que ahora nos venga con que "no apoyaría" la intervención armada. Por supuesto que la apoyaría. Y tomaría parte con fruición en la represión si fuese necesario, de acuerdo a su valor "supremo". No creo que le quede la menor duda a nadie que haya leído los encendidos mensajes unionistas-por-cojones de este sujeto. ¿Por quién nos ha tomado?
ResponderEliminar¿O acaso cuando viese ponerse las cosas feas cambiaría su mantra cañí y propondría negociación y pacto? Pues valiente majadería. Si lo hubiese hecho desde el principio, no estaríamos ahora donde estamos.
Lo típico de quien no tiene argumentos: fabricarse un maniqueo estúpido para poder refutarlo fácilmente.
ResponderEliminarLos países democráticos suelen llamarse también ESTADOS DE DERECHO. Eso no ocurre porque haga bonito; ocurre porque eso, la ley democrática y el respeto a ella, es la base de dichos Estados. (De hecho, la Comisión de Venecia, a la que Puigdemont se dirigió en su día, no se llama realmente así, ése es sólo el nombre popular, por el sitio donde se reúnen; el oficial es Comisión Europea para la Democracia por el Derecho).
¿Significa esto que una ley democrática haya de ser intocable? No; significa simplemente que, en democracia, hay unos mecanismos legales previstos para poder cambiarla, que requieren unas mayorías y unos trámites claramente previstos también por la ley.
(De hecho, en España puede legalmente cambiarse cualquier aspecto de la Constitución, incluso la INDIVISIBIBILIDAD del territorio que explícitamente proclama el artículo 2, y así lo ha declarado, también explícitamente, el propio TC. Cosa que por ejemplo no puede hacerse en Italia, donde la Constitución declara expresamente, por ejemplo, que NO ES POSIBLE modificar determinados aspectos de la Constitución, entre ellos la indivisibilidad del territorio).
Respecto a la "negociación", aparte de que puse en la entrada anterior a ésta las declaraciones de Jordi Sànchez, entonces presidente de la ANC, diciendo textualmente "os pedimos que no negociéis", a lo que el Govern en pleno, allí presente, aplaudió, hasta ahora el independentismo no ha ofrecido más "negociación" que la afirmación de que un referéndum secesionista (contrario a la Constitución, y explícitamente rechazado en Alemania o los USA, además de Italia; en Alemania, con precisión por parte de su TC de que "la soberanía recae en EL CONJUNTO de los alemanes) es INNEGOCIABLE, porque según ellos cuentan con un "mandato popular", y sólo es negociable el cuándo y cómo.
No, mire: como, en un diálogo mantenido en 2015 en Londres por Puigdemont y Salmond, el independentista escocés, le dijo éste, cito, "democracia significa, en primer lugar, respeto a la ley".
Que usted, y algunos otros, no quieran comprender o aceptar algo tan obvio, no es problema mío, sino suyo.
Igual de plomo y adicto a este foro que el precipitado F.
EliminarSobran los dos, busquense un psicólogo.
Yo no creo que Jose nos trate a los lectores como imbéciles. Creo que, como Unamuno, tarda en darse cuenta de lo que está verdaderamente pasando. Veremos si también en su caso de su cobardía y su ceguera le salva algún gesto final.
ResponderEliminarContinúa el señor Jose empantanado en el cenagal de sus idealizaciones ordenancistas, atollado en el cieno de su charlatanería (más o menos) jurídica, encorsetado en una impresentable mentalidad imperial a la que quiere revestir de una imposible dignidad, encadenado a una salmodia huera, vieja y repetida, siempre una y la misma.
ResponderEliminarPseudo-didáctico, más bien pedante según es norma, informa de que "en democracia.. hay unos mecanismos legales previstos para poder cambiarla [la ley]". ¡Pues saque usted consecuencias, señor lumbrera, si es que tiene usted "mecanismos mentales previstos" para tal actividad! Porque aquí no se ha aplicado ni se aplica ningún mecanismo legal previsto; se ha negado acordar un referéndum, incluso meramente consultivo, se viene negando desde hace décadas; siguen sosteniendo las instituciones estatales que ni ahora ni nunca los catalanes podrán expresar su voluntad política; e incluso la pamema de que voten sobre el asunto todos los ciudadanos del Estado al completo es una farsa infumable que nadie cree ni en broma y que nunca se han tomado en serio: mera táctica dilatoria. De modo que si "en democracia hay unos mecanismos legales" y ve usted que aquí no los hay, ¡saque consecuencias y DEDUZCA QUE NO VIVE USTED EN DEMOCRACIA! (yo tb sé gritar, ya ve qué fácil). Y deje de creerse los tebeos para zangolotinos con que le llevan engañando durante meses... muy a su gusto, todo hay que decirlo.
Incluso no siendo especialmente despejado, no le costará sacar la consecuencia aludida simplemente con que se deje guiar por las decenas de señales e indicios que en este mismo foro le van regalando. Hay un abrumador carro de ellos, buenos indicadores de que la "democracia" española es muy parecida a la "democracia" de Turquía, para que el Mediterráneo quede simétrico al Este y al Oeste.
¡Y me dice que carezco de argumentos! Es usted muy gracioso; a usted le sobra cháchara y verborrea. La faltan básicamente LUCES y common sense.
Pellistrandi: “La máscara del nacionalismo catalán ha caído en su ambición totalitaria”
ResponderEliminarEl historiador francés, autor de 'El laberinto catalán', señala que ahora en Europa “la anomalía es Cataluña” con un discurso "supremacista y etnicista"
https://cronicaglobal.elespanol.com/pensamiento/conversaciones-sobre-cataluna/pellistrandi-mascara-nacionalismo-catalan-ambicion-totalitaria_280221_102.html
El Votante se ha hecho la picha un lío. Todo lo que balbucea se aplica, evidentemente, al nacionalismo ESPAÑOL. Al invasivo, intolerante nacionalismo ESPAÑOL.
ResponderEliminarJosé, acércanos algo de esos tus frutos de este otoño y aparca el politiqueo.
ResponderEliminarSaludo cordial. Pepe.
Aparca el politiqueo, Pepe, que conmigo nos basta para aburriros a todos.
EliminarSuyo afmo.
Gracias. El politiqueo ya está aparcado; dije que no volvería a hablar aquí de política, al menos del tema catalán, y así pienso hacerlo.
EliminarRespecto a los "frutos", he escrito efectivamente un nuevo libro de poemas, todavía no publicado, pero prefiero no dar a conocer de momento nada de él, porque aún podría cambiar alguna cosa. Horacio aconsejaba guardar por nueve años lo que uno escribiera; yo tardaré mucho menos. Pero gracias.
Ya de Cataluña, Jose, no dices nada nuevo, ni Martín tampoco. En cierto modo yo te veo como a Socrates, cumpliendo la ley porque es la ley. Y eso es una poderosa razón. Más me inquieta lo de Unamuno. No he visto la película, pero, por culpa de Martín, indagué en la biografía de don Miguel (me falta su estancia en Fuerteventura) y lo que contó Franco quiero creer que es mentira. Que Unamuno le pidió que no bombardeara Bilbao porque tenía allí dos casas.
ResponderEliminarNo conocía ese dato, que supongo que es una falsedad completa. Aparte de contradecir lo que siempre fue Unamuno (que sabía perfectamente que se jugaba la vida con su actitud el célebre 12 de octubre, vida que es de suponer le importara más que las casas), trató de intervenir cuando supo de las atrocidades que estaban cometiendo los "nacionales" sin que sirviera absolutamente de nada.
EliminarY no me imagino a Franco dejando de bombardear un objetivo militar de importancia por una razón como ésa. Ni soy capaz de pensar que Unamuno (que, repito, no era tonto) pudiera pensarlo.
En resumen: estoy convencido de que eso es falso.
Ve la película y lee una biografía fiable, Jesús Castellano.
EliminarLa veré, amigo Martín. Lo que dijo Franco no está en ninguna biografía que he visto, sino en un libro en que lo entrevista un sobrino. Seguramente al entonces jefe de Estado se le alargó la lengua hablando de una persona que, de algún modo, necesitaba desprestigiar.
EliminarO dones, ya lo sé.
ResponderEliminarEspaña, una, grande y madrileña.
ResponderEliminar¿Intervención armada? ¿Voluntarios dando paseos? Te has equivocado de década, de siglo y de país.
ResponderEliminarUf! No sabes el peso que me quitas de encima. Ya puedo dormir más tranquilo.
ResponderEliminarLas palabras de Martin recuerdan a las de la progresía de la transición: persecuciones, detenciones, torturas, cárcel. Todo en busca de un cargado cv que, ciertamente, permitió alcanzar años después cómodos sillones y rentas varias. Martin, como digo, es el abanderado español del independentismo, el escritor que siempre defendió la causa catalana. En fin, Histeria de España puede ser un buen título para su cv.
EliminarNo entiendo nada. ¿No hubo persecuciones, detenciones, torturas, cárcel?
EliminarY nada de abanderado del independentismo. Yo sería el primero en brindar si los catalanes votan mayoritariamente en un referéndum seguir formando parte del Estado español.
Espero que sí. Añado que me parece irresponsable ese lenguaje guerracivilista tan fuera de lugar.
ResponderEliminarPercibir la ironía no parece ser lo tuyo, amigo Piquero. Ni la lectura literaria. ¿No te has dado cuenta de que mis palabras no fueron pronunciadas en un mitin ni forman parte de un ensayo, sino que reflejan lo que sentía al ver una emocionante película? Imaginarse lo peor para tratar de evitar que ocurra es una estrategia que suele dar mejores frutos que el encogerse de hombros mientras las cosas van de mal en peor.
ResponderEliminarSí, tengo activo el chip de la ironía, tranquilo. Pero no es el caso. Tus palabras no las has dicho en una conversación entre amigos ni de un modo casual, sino redactadas como texto y en un espacio público que lee mucha gente. En un artículo, vaya.
ResponderEliminarEste tío ¿seguirá pagando cuota en IU?
Eliminar¿Cómo un personaje tan hosco y desabrido puede hacer algún poema que valga la pena? Ya sé que está última es una pregunta retórica y poco fundada, pero me pide el cuerpo hacerla.
Otro mini-Savater (guardando las astronómicas diferencias de intelecto), patriotero y arribajpaña.
Siempre me cayó fatal, pero no le perdono que se rasgue la guayabera por las cosas de Martín (las llama guerracivilistas) y seguro que le parece de perlas que haya presos políticos en su jodida satrapía. Otro que se cree progre y...
.
El de la ironía, quizá. El de la lectura, no. Las he dicho en un diario público porque reflejan mis terrores y temblores mientras veía la película sobre Unamuno y recordada mis experiencias con el franquismo y temía que todo volviera a repetirse. Lo sigo temiendo. Esas palabras quedan ahí (luego aparecerán en libro) y alguien las leerá dentro de diez o quince años y para entonces o Cataluña será independiente o... Pero a lo mejor todo se ha arreglado con tres o cuatro, o media docena de 155s, otros tantos discursitos del rey y varias condenas a cadena perpetua revisable.
ResponderEliminarAy, esos " discursitos de rey"... Esta reticencia ¿significará que Copérnico habrá sembrado dudas entre las berroqueñas convicciones pro-filipinas (provisionales) del buen Martin?
EliminarAunque le escueza a más de un patriotero, "abanderados españoles del independentismo" catalán los hay a patadas en España, seguramente varios millones, a saber, los millones de republicanos que están por las libertades y el derecho a decidir de todos aquellos colectivos que lo reivindican.
ResponderEliminar"Cree el cerril que todos circulan por su mismo carril". Algún día, poner banderas republicanas, o catalanas, en balcones de Madrid ya no será una conducta de riesgo. Y entonces el cerrilismo se va a quedar a cuadros.
Por cierto, me perplejiza que todo un poeta, Piquero, encuentre "guerracivilista" el lenguaje (PALABRAS) de JLGM, pero no encuentre guerracivilista tener encarcelada (HECHOS) a una decena de personas honestas SIN CARGOS durante más de un año. Está claro que ser poeta no implica NADA respecto a la inteligencia.
Otro afiliado a Histeria de España, nido de demócratas de salón.
EliminarMartín, si eres tan amable, avísame, por favor, cuando dejes de hablar de política en tu entrega semanal. Prefiero leer las actualizaciones y giros de guión de tu culebrón con Trapiello. Mientras tanto, muchas gracias de parte de un lector a punto de ser llamado a filas (prietas, recias, marciales).
ResponderEliminarSerá sin sentencia (por ahora), porque con cargos están desde que los detuvieron. Se llama prisión preventiva y existe en todos los países democráticos cuando, por ejemplo, hay riesgo de fuga. Su honestidad no sé hasta dónde llega. De momento, parece que han incumplido reiteradamente varias leyes. Los jueces lo dirán.
ResponderEliminarPiquero, lo que digan los jueces tampoco valdrá porque la justicia española "ya se sabe" por donde respira.
EliminarEs bastante pueril este debate: uno dice que de noche luce el sol y otros perdemos el tiempo en rebatirle la absurdez.
Piquero, la ley que obliga coercitivamente a veces no obliga moralmente, sino que la obligación moral puede ser no cumplirla. En Roma Città Aperta, una película de Rossellini, aparecen muchas personas qie incumplen la ley y lo hacen con toda ejemplaridad moral. Claro que en la Italia de la época no imperaba la democracia. Como no lo hace en la España de hoy, donde el dictador recibe honores, sus herederos retienen lo expoliado, se detiene a cómicos por expresarse, la Iglesia se incauta de edificios, etc, etc. La obligación moral puede ser incumplir la ley, no lo olvides.
EliminarEstá muy bien resuelta esa disquisiciones filosófica ejemplarizandola en una película. A usted solo le falta aportar que "Yo tengo un amigo que... "
EliminarEn cuanto al penúltimo párrafo, un nuevo espasmo de Histeria de España.
Si comparamos la España actual con la Italia ocupada por los nazis entonces ya es inútil seguir hablando.
EliminarCuántos sofismas, amigo Piquero, para defender lo indefendible. En la España actual, se impiden muchos desahucios en contra de la resolución judicial. ¿Van los que lo hacen a la cárcel? ¿Se juzga por rebeldía a quienes participan y a los partidos que los apoyan? No, se cambia la ley.
EliminarEn el caso de Cataluña, se cambia para castigar conductas legítimamente democráticas que no estaban en el código penal. Si una resolución no es constitucional, carece de validez, no tiene efectos o deja de tenerlos en el momento en que el tribunal lo declara así. Pero nadie va a la cárcel por ello. Véase lo que pasó con el cierre del parlamento británico por parte de Boris Johson. La declaró ilegal el Tribunal Supremo, pero el autor de esa ilegalidad ni está en la cárcel ni exiliado en Bélgica.
Aquí el tribunal supremo creará nuevos tipos delictivos (o interpretará de manera novedosa los antiguos) para mantener en la cárcel a los que ya tiene encarcelados.
De lo que se trata es de impedir por todos los medios la independencia de Cataluña, tan legítima (para un demócrata) como el que forme parte del Estado español. Todo depende de la decisión libre y democráticamente expresada de los ciudadanos de Cataluña.
Cómo me alegra que me den pretexto para escribir esto una y otra vez. No me gustaría que, en el futuro, me confundieran con la mayoría de mis patrióticos compatriotas.
Las leyes se pueden cambiar, si hay mayorías y consensos suficientes. Mientras no se cambien, las leyes están para respetarlas, incluso discutiéndolas. Luego no es lo mismo una infracción de la ley que otra. No es lo mismo desobedecer una señal en un paso de peatones o desobedecer un desaucio que otras cosas que tú ya sabes. Si por un momento dejaras de hacer tu papel que te enorgullece tanto y te dedicaras a pensar no perderías tanto el tiempo en cuestiones de detalle.
EliminarVotar en un referéndum "ilegal" (yo lo hice en Venecia) es menos grave que cruzar en rojo un paso de peatones (pones en riesgo tu vida y la de otros) y lo cierto es que nadie está en la cárcel por impedir un desahucio injusto, aunque legal.
EliminarUn referéndum ilegal carece de validez legal (se convierte en una especie de encuesta), eso es todo.
Y buscar la independencia de Cataluña, por medios pacíficos, votando y dialogando, no es ningún delito. Es un derecho en una sociedad democrática. Piénsalo, Piquero, no te dejes llevar por tu irracional nacionalismo.
Pues quita el semáforo. El argumento es que no todos los incumplimientos de la ley acarrean cárcel sino según la gravedad. Y un referéndum ilegal no es una encuesta, no cuando se gasta dinero público y no cuando se utilizan los dudosos resultados para subvertir el orden constitucional, incumplir la ley sin cambiarla. Procurar la independencia no es un delito; sólo lo es según los métodos que se empleen. Por último, deja ya esa [censored] idea de que a los que estamos en contra del secesionismo nos mueve un "irracional nacionalismo" de signo contrario. Puede que a algunos, puede que a muchos, pero no a todos. Menos trazo grueso, please.
EliminarLa independencia, en Cataluña, se está buscando por medios rigurosamente democráticos y se está tratando de impedir por medios dudosamente democráticos.
EliminarLa capacidad sancionadora del Tribunal Constitucional fue creada ad hoc, cuando el PP tenía mayoría absoluta, para castigar a los independentista. Lo propio del tribunal constitucional es decir si una ley es o no constitucional y, si no lo es, dejarla sin efecto. Son los inclumplientos del código penal los que llevan a la gente a la cárcel.
Compara a Boris Jonhson con Oriol Junqueras. Uno cerró ilegalmente el parlamento y ahí sigue, presidiendo el gobierno británico, el otro consultó a los ciudadanos una trascendental cuestión política y ahí se pudre en la cárcel.
Tú, amigo Piquero, seguro que tienes una excelente opinión de ti mismo, pero lo hechos son los dechos. No defiendes la ley ni la democracía, sino una interpretación de la ley dudosamente democrática. Cargarás con eso toda tu vida, acompañado por cierto por buena parte de tus compatriotas.
¿Un pueblo este, pues, maldito, buen Martín? Si los no analfabetos piensan de aquella manera..., ¿cómo extrañarse de que la enorme grey ( buena parte, dice usia) que sí lo es, resulte como resulta ser?
EliminarAlguien dijo que España era un accidente en Europa: yo lo creo firmemente. No se concibe que tal cúmulo de ignominiosa basura fuese asumida impunemente, sin apenas rechistar, en otros países bien cercanos al nuestro.
Mientras, los gaiteros templan gaitas con vistas a la farsa del Campoamor. Y el espigado Pedro Sánchez saca pecho en las televisiones porque haya tenido el coraje indescriptible de sacar los restos del dictador genocida de su pirámide del homenaje... a los cuarenta y cuatro años (!) de su muerte, y con más de veinte de ellos bajo gobiernos "socialistas".
Somos sin duda un pueblo maldito, Por eso los más inteligentes quieren escapar. A donde sea, pero lejos.
Esa actitud de "yo tengo la verdad absoluta y tú lamentarás amargamente haber nacido por no tenerla" queda como muy digna y "oh, yo y la auténtica libertad", pero ni es un argumento ni sirve para nada, salvo para enardecer a tus palmeros. En fin, discutir contigo es como querer dialogar con una piedra.
EliminarEse soniquete se lo tengo " escuchado" a don José. Pero este es mejor poeta y se me hace más llevadero perdonarlo.
EliminarSi no hay sentencia no hay cargo, hay imputación. A veces, muy gratuita.
ResponderEliminar¿Quién será este "Chano Bas" a quien un día se le ocurrió el manido juego de palabras historia/histeria (se le ha ocurrido antes a otros) y a partir de entonces lo utiliza como una especie de mantra con la que cree descalificar al interlocutor? El mundo está, ciertamente, lleno de gente pintoresca.
ResponderEliminarNo descalifico a nadie, solo critico la ñoñeria de lo que se sienten perseguidos por la injusticia española, en vez de nacionalizarse ugandeses.
EliminarY sí, la personalidad de un pintor duele resultar pintoresca.
Dios mío, qué lectores tiene uno. ¿Qué tendrá que ver no la "ñoñería" sentirse perseguidos por la justicia española? ¿Y a qué viene eso de hacer ugandeses? Renuncio a entender. Inescrutables misterios de la mente humana.
EliminarLos defensores rabiosos del independentismo reaccionan con tanta histeria como ñoñeria a la persecución institucional española. Por eso les sugiero abjurar de su país y nacionalizarse en cualquier otro de lustrosas democracia. No merece la pena sufrir por ser español.
EliminarAcuérdense del conde Ciano, que se lee Chano. Ministro de exteriores de Mussolini.
ResponderEliminarAhí andamos.
Dámaso, Dámaso, señor Dámaso, mal asunto las obsesiones, le deseo mucho ánimo y optimismo para el 10n, los va a necesitar, se los juro.
EliminarInterior ha enviado 2.000 policías extra a Catalunya. Dos mil policías para defender una sentencia. No entiendo cómo a la gente no le da que pensar.
ResponderEliminarLa policía no va para defender una sentencia sino a paliar previsibles disturbios que el propio Govern ha anunciado y alentado. Si yo anuncio en televisión que voy a atracar un banco seguro que me están esperando.
EliminarSu alegato está muy bien razonado. Yo he seguido su consejo y he pensado, meditado y reflexionado durante largas horas sobre el asunto para terminar recordando que Francia fue mucho más democrática y comprensiva con los corsos, y que los escoceses son mucho más violentos que los catalanes. Por eso no entiendo que a una región de reconocido pacifismo se envíe a los temibles cuerpos represores, cuyos métodos de tortura son de todos conocidos.
EliminarCualquier día descubrimos que Drácula nació en el pueblo de Martín, que no es Manzaneda de Torío (1953).
Pepe, no sufras, hombre, que tus ideales son pura histeria provinciana.
Naturalmente, le replico al señor Grau, no al señor Piquero, que también es Pepe.
EliminarYo, en general, coincido con las apreciaciones de este señor, la histeria y la ñoñeria las dejo para los que pretenden monopolizar la condición de demócrata oteando la realidad desde una saetera miserable.
Esta entrada -y ateniéndose a buena parte de las opiniones dadas- pone de manifiesto la vigencia del llamado " franquismo sociológico", que se traduce en la impronta que ese régimen tiránico ha dejado en la psiquis de millones de ciudadanos españoles, incapacitándolos para asumir como cosa natural ciertos valores democráticos.
ResponderEliminarNo espero felicitaciones por largar este aserto, solo me interesa que conste que no todos hemos sufrido esa lobotomía incruenta que afecta a los millones susodichos. Por suerte para nuestra -cada vez más- amenazada integridad, lo que no deja de ser una suerte discutible.
Salud, democracia y solidaridad con el pueblo catalán.
PS.- Un celular de teclado diminuto hace que algunos de palique largo nos hayamos de moderar en la extensión de los correos. Una suerte (para ustedes) no buscada.
Cómo que no espera felicitaciones? Yo se las doy, y además entono con usted:"No a la guerra de Irak" y "Bases fuera, OTAN no"
EliminarPues ya ves, F, yo creo que el hándicap se remonta bastante más atrás, hacia una "aversión al diferente" y una "pasión de la sumisión" que ya se expresaban claramente bajo Fernando VII (fusilamiento de Torrijos y los suyos), aunque es verdad que encontraron en el franquismo su expresión más cruel. ¿Algún otro pueblo del mundo ha clamado jamás "vivan las cadenas"? Ahora ya la cosa es puro bullying: "Pero cómo, ¿unos que quieren ser diferentes, y organizarse, y vivir a su aire y por su cuenta? De ninguna de las maneras. Aquí todos bajo las mismas caenas."
EliminarEs una mentalidad primaria, una psicología rancia, rudimentaria. Seguramente se puede ya rastrear en las reivindicaciones de pureza de sangre. Ahora acicateada por la inminencia del desastre y la marginalidad en Europa.
Sí, de mucho más atrás que el franquismo.
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