Viernes, 9 de enero
CRIMEN Y RESPETO
Abro al azar Les pensées, el libro de George Wolinski, uno de los periodistas y
dibujantes franceses asesinados el pasado martes, que mi amigo Erland ha traído
hoy a la tertulia: “Las noches de
amor suelen durar un cuarto de hora”. Sonrío. Otras de sus ocurrencias
(“Pensées sexistes”, “Pensées natioanalistes”, “Pensées xénophobes” se titulan
algunos de los capítulos) me hacen sentir, en cambio, algo incómodo: “Cuando
uno sabe que el comunismo es una invención de los judíos, no puede dejar de ser
antisemita”.
Le
gustaba, como a sus compañeros, poner el dedo en la llaga, tocar las narices,
burlarse en la cara de quienes no tienen ningún sentido del humor, caminar por
el borde del precipicio.
–-¡Parece
que intentas encontrar razones para el asesinato!
–-No,
no lo intento. Pero recuerdo aquella vez que en Cuadernos del Norte apareció una frase de Camilo José Cela (que no
decía él sino un personaje) referida a la virgen de Covadonga. Recuerdo bien
los feroces ataques de los periódicos. Las cartas al director amenazadoras. Los
ayuntamientos que le declararon persona non grata. Estuvo años sin poder volver
a Asturias; no se garantizaba su seguridad. ¿Pasaría ahora lo mismo si alguien
se burlara públicamente de la virgen de Covadonga? En cualquier caso, mejor no
probarlo, y no ya por el posible riesgo, sino por no ofender gratuitamente a la
mayoría de los asturianos.
–-No
sé si te das cuenta de que estás tratando de justificar el crimen.
–-Pues
me explico muy mal si parece eso. Lo que quiero decir, y es algo que quizá no
parece conveniente repetir ahora, es que la libertad de expresión, así en
abstracto, abarca también las burlas ofensivas a Mahoma o a la virgen de Covadonga,
pero que yo estoy en contra de ellas por respeto, no a los terroristas ni a los
fanáticos, sino a las buenas gentes que veneran a uno o a otra.
Sábado, 10 de enero
MENOS SOLO
Domingo, 11 de enero
LA ILUSIÓN DE SUPERIORIDAD
“No sería tan listo como me creo si no supiera
que no soy tan listo como me creo” me gusta repetir, es una de mis paradojas
favoritas. En un suplemento dominical comenta hoy Eduardo Punset las
investigaciones de Tali Sharot sobre las “tres ilusiones” en que vivimos
inmersos los humanos: la ilusión de superioridad, la ilusión introspectiva y
una tercera a la que denomina “sesgo optimista”.
La
primera es la que hace, por ejemplo, que en todas las encuestas cerca del
noventa por ciento de los conductores declaren conducir mejor que el promedio,
cosa evidentemente imposible; la segunda nos hace encontrar razones para
nuestros motivos, aunque sean irracionales; la tercera nos lleva a recordar lo
positivo de la experiencia y a olvidar o poner en segundo lugar lo negativo.
Me
considero un tipo raro y resulta que coincido en todo con el hombre común. O
sea que, como la mayoría de la gente, me creo más listo que los demás. Pero a
mí no me gusta engañarme, aunque sea por mi propio bien. Y por eso he hecho mis
cálculos y gracias a diversos algoritmos he descubierto que soy exactamente un
17’5 % menos listo de lo que me creo, y un 8,4 % peor escritor. No me puedo
quejar. Me temía unos resultados aún menos favorables.
Lunes, 12 de enero
EL ENEMIGO EN CASA
La presentación de la revista Maremagnum se convierte en un homenaje a
Ángel González, de cuyo fallecimiento se cumplen hoy siete años. Nadie lo ha
recordado, salvo estos jóvenes poetas que no le conocieron personalmente, que
tenían poco más de diez años cuando él murió.
“No
le temo a lo que hay después de la muerte, sino a lo que hay antes”, solía
repetir. Si supiera lo que le esperaba, algo habría temido.
Pero
hay cosas de las que es mejor no hablar. El absurdo enfrentamiento entre su
viuda y los amigos que él más quería le llenaría de tristeza, como nos llena
cuantos le conocimos. Todo lo que él dispuso se ha ido al garete por decisión
personal de su única heredera. Pero de estas cosas, ya lo dije, es mejor no
hablar.
Afortunadamente,
los jóvenes poetas de Maremagnum –Rocío
Acebal, Mario Vega, Lorenzo Roal– no saben de los feos cruces de acusaciones
entre Susana Rivera y Luis García Montero, por citar solo un ejemplo. Ellos
solo conocen al poeta por su poesía. Otros, en cambio, todavía tenemos que
hacer un esfuerzo para leer sus versos sin imaginarnos la tristeza de Ángel
González ante el deplorable espectáculo que vino después.
Martes, 13 de enero
JUGAR CON FUEGO
En el catálogo de una librería de viejo
encuentro uno de los números de la revista Jugar
con fuego, que yo comencé a editar allá por 1975, hace ahora exactamente
cuarenta años. A veces me da por pensar que no he cambiado nada, que no he
aprendido nada en todo ese tiempo. Vivía entonces en Avilés, ahora lo hago en
Oviedo: en cuarenta años me he movido menos de cuarenta kilómetros. Ya entonces
me ganaba la vida dando clases, como ahora, y la literatura no era para mí más
que un juego, aunque con fuego. No sé si salí chamuscado. El número que anuncian
en el catálogo incluye supuestamente poemas de Francisco Brines, de Ángel
González, de Luis Antonio de Villena y de no sé cuántos poetas más. Todos
apócrifos, todos escritos por mí. Tenía entonces la mala costumbre de la
parodia y el pastiche, aparte del pessoano (aunque aún no conocía a Pessoa)
juego de los heterónimos. Me temo que no he abandonado esa costumbre. Soy muy
fiel a mis costumbres. Sobre todo si son malas.
Miércoles, 14 de enero
ESCRIBO VERSOS
Anda uno siempre deseando tener tiempo para
todo y cuando lo tiene, como estos días en que ya se ha terminado el ajetreo de
las vacaciones pero aún no han comenzado las clases (es tiempo de exámenes), lo
único que hace es no hacer nada y dejarse asaltar por la melancolía.
Hojeo
unos libros, recién comprados, en el café Vetusta. Tan deseables en la librería
y ahora aquí, no sé por qué, han dejado de interesarme. Como hago siempre que
no tengo nada que hacer, escribo versos.
Detente un poco más, día perdido
como todos los días de mi vida,
donde cualquier llegada fue partida
y en no ser se convierte el haber sido.
Si lo que tuve nunca lo he tenido,
si vida y muerte son la misma herida,
si amar y estar son formas de la huida
y el recuerdo otra forma del olvido,
¿a qué ponerse triste en esta hora
en que todo sonríe y se demora
como un niño feliz sobre la arena?
Tú que me sueñas eres solo un sueño
de este esclavo que es también tu dueño
Jueves, 15 de enero
MEJOR NO
“¿Cómo ves la situación política, amigo Martín? ¿Tan
deprimente como la vemos todos?”, me pregunta un amigo.
––Ah, no,
yo la veo apasionante. La impunidad del anterior jefe del Estado comienza a
resquebrajarse, los catalanes siguen con la cabeza alta dispuestos a decidir su
destino (como español, me siento orgulloso de ellos), en Grecia puede comenzar
a cambiar la historia de Europa…
––No te
imaginaba tan radical.
––¿Tan
radical? Vivimos en un momento crucial de la historia del mundo (quizá todos lo
son) y lo único que lamento es tener que limitarme a ser solo espectador.
––Entra en
política. Aún estás a tiempo.
Bien, Martín, me gusta tu análisis de la situación política, pero sobre todo que hayas percibido la encrucijada en que se halla el mundo. Y que ese mundo es un artefacto calado por infinitos vasos comunicantes: la mariposa bate alas en la oreja de un mandarín y se desploma la bolsa de New York.
ResponderEliminarPara entretener esta singladura apasionanate, para entreverar la sana melancolía con algún que otro apicillo del caletre, te recomiendo que veas el film "Whiplash": una de las mejores pelis que he visto últimamente.
Salud y libros.
Tendré en cuenta tu consejo, amigo F.
EliminarJLGM
En vista de que esto no se anima, Martín, no creo que robe tiempo o atención si te pregunto: ¿te ha tentado alguna vez la idea de irte de la Universidad de Oviedo? Te lo pregunto después de leer algo que traen los papeles de un colega tuyo, un tal Garrote (otros lo llamarán Girón pero a mí me apetece llamarlo Garrote y creo que estoy en mi derecho si lo hago). El fino análisis que hace este hombre talentoso en relación a los atentados yihadistas (el diría "sarracenos") contra la revista francesa "Charlie Hebdo", con su reguero de muertos, me ha puesto los pelos de punta. No por la maldad de estos actos criminales, sino porque la Universidad de Oviedo, su departamento de Historia, cuente con catedráticos de la mentalidad del tal Garrote. Y que además que se atrevan a amenazar con él desde las columnas de los periódicos.
ResponderEliminarYo que tú, Martín, fichaba por Catania, que está buscando dómine.
PD.- Si no contestas estás disculpado de antemano, buen Kurtz.
También a mí me espantó ese análisis, pero José Girón no representa a la Universidad de Oviedo, donde cada palo aguanta su vela.
EliminarJLGM
Y tienes razón, esto solo se anima cuando sale a relucir Cataluña y la sacrosanta unidad de los hombres y las tierras de España.