Sábado, 16 de septiembre
CAFÉ SPORT
Entré en Chaves por
primera vez hace cuarenta años. Recuerdo un día oscuro; las columnas miliarias
que bordean el puente de Trajano, sobre el Támega, como fantasmas en la niebla.
Sobre el caserío, al final del puente, parecía cernerse la sombra de don
Sebastián, rey del misterio. No olvidaría ya nunca la torre solitaria, los
cañones que apuntaban hacia España, calles en cuesta y casas con escudo, gente
pausada saludándote como si te conociera de toda la vida.
Viajaba solo, a pie, y el primer lugar en que entré fue el
café Sport, con sus vidrieras a la gran plaza que tiene al fondo la biblioteca.
Pedí un café, me puse a hojear el periódico y al poco rato ya no era el viajero
de paso, sino un provinciano más preparado para envejecer sin prisa y sin
moverme de mi rincón.
Luego he vuelto a Chaves en más de una ocasión, pero
siempre de camino a otros lugares. Solo una vez dormí en el Forte de San
Francisco. Quizá por eso la ciudad no ha perdido el encanto inicial, sigue
teniendo algo de llave que abre la puerta a un reino desconocido.
Cruzo de nuevo el puente de Trajano en este día luminoso,
con la ciudad y el parque mirándose en el río, vuelvo a recorrer sus calles, a
sentarme en el café Sport, a hojear un fatigado periódico local que podría ser
el mismo de entonces si no fuera porque la fecha es de cuarenta años después.
Seguro que el milenario Chaves, la romana Aqua Flaviae,
ha cambiado mucho en ese tiempo, seguro que yo también he cambiado. Pero tengo
la impresión de que seguimos siendo los mismos. Y que como siempre, quizá
porque nos vemos poco, nos llena de alegría el reencuentro.
Domingo, 17 de septiembre
FEDERACIÓN IBÉRICA
En Ovar, al comienzo de
la ría de Aveiro, participo en una mesa redonda sobre las relaciones entre
cultura y poder. Se celebra al aire libre, en un parquecillo atravesado por el
manso río Cáster, y clausura el festival literario con el que esta localidad
quieren competir con el de Póvoa de Varzím (inspirado, por cierto, en la Semana
Negra).
A mí se me dan muy mal las generalidades. La cultura
puede ser un antipoder o el sustento del poder. No hay dictadura, ni democracia
autoritaria, que no cuente con literatos y pensadores que le sirvan de
coartada. Y que a veces no son peores que los de la oposición. Stalin fue
adulado por muchos literatos mediocres, pero también por Neruda. Y la poesía de
Leopoldo Panero resiste bastante mejor que la de tantos poetas antifranquistas.
Por eso preferí hablar de por qué yo me siento en casa
cuando estoy en Portugal. El amor es sin porqué, como la rosa de Angelus
Silesius, pero para mi amor por Portugal encuentro dos razones. El 25 de abril
tenía yo veintitrés años. Estaba a punto de tomar un tren para ir al trabajo
cuando escuché las primeras noticias del golpe militar. Al principio no lo
tenía muy claro y temía otra militarada como la de Chile, en este caso para
endurecer la dictadura. Pocos meses después me detuvieron y, en el registro de mi
casa, una de las cosas que se llevaron los policías fueron los pocos libros que
tenía en portugués y las cartas de un poeta de Braga. Luego, durante los
interrogatorios, me pareció adivinar el miedo de los funcionarios de la
dictadura a acabar teniendo que escapar en paños menores como los sicarios de
la PIDE. Desde entonces, Portugal y libertad van
asociados en mi subconsciente. Cruzo la frontera, la ya inexistente frontera, y
me basta oír las primeras palabras portuguesas para sentir que respiro mejor.
Pero hay otro motivo para mi amor a Portugal. En el 76 o
en el 77, llegó a mis manos un libro de un autor que desconocía: eran las
poesías de Álvaro de Campos en la blanca edición de Ática con su caballo alado
en la cubierta. Comencé a hojearlo y enseguida su poesía me cogió del cuello
para no soltarme ya nunca: “No soy nada. / Nunca seré nada. / No puedo querer
ser nada. / Aparte de esto, tengo en mí todos los sueños del mundo”. Así
descubría a Pessoa, su enigmática y múltiple personalidad; en la biblioteca de
la Universidad de Coimbra, leí sus libros y todo los estudios sobre él y
comencé a escribir una biografía –la publicó Júcar en 1983– que tenía
mucho de autorretrato.
Sin Portugal me sentiría mutilado, como dicen ahora
muchos a propósito de Cataluña. Me gusta Portugal libre y cercano, amigo y
aliado, nunca sometido al Estado español. Soy iberista, creo en la unidad cultural
de la Hispania romana, pero eso nada tiene que ver con la añoranza de “un
monarca, un imperio y una espada”.
“¿Cómo ve el futuro político de la península?”, me
preguntan. Soy muy malo haciendo profecías. Por eso me refiero solo a cómo me
gustaría que fuera dentro de cincuenta años o de diez. Una Federación Ibérica
formada por la República de Portugal, el Reino de España y la República de
Cataluña, con los territorios asociados de Andorra y Gibraltar. La presidencia
de la Federación sería rotatoria: un año el presidente de Portugal, otro el rey
de España, otro el presidente de Cataluña. También la capital: un año en
Lisboa, otro en Madrid y otro en Barcelona. Por supuesto, se trataría de una
unión entre Estados libres y soberanos.
“No me gusta del todo esa utopía tuya”, me dice Carlos
Quiroga, mi compañero de mesa, galleguista y lusista (cree que el gallego debe
abandonar la ortografía castellana y utilizar la portuguesa). “¿Dónde dejas a
Galicia? ¿Y por qué el reino de España y no la república española?”
“A Galicia la dejo donde los gallegos, elección tras
elección, quieren dejarla: en el reino de España. ¿Y por qué reino? Porque ese
es el régimen que quieren los españoles. Si algún día los partidos republicanos,
por decisión de los electores, son mayoría en el congreso, no te preocupes que
el cambio llega en una legislatura”.
“Yo prefiero un régimen en que al jefe del Estado, si no
cumple, podamos cambiarlo en la siguiente elección”.
“No te preocupes que si a un rey lo rechaza la mayoría
también tiene que irse. Para echar a Alfonso XIII bastaron unas elecciones
municipales y si Juan Carlos I no se llevó consigo la monarquía, al contrario
que su antecesor, fue porque tenía un heredero que cuenta, al menos por ahora, con el aprecio mayoritario”.
Lunes, 18 de septiembre
LA PESCA EN ESPINHO
Muy cerca de Ovar está
Espinho. Paseo al atardecer por sus inmensas playas de arena dorada y no puedo
por menos de recordar el capítulo que le dedica Unamuno en Por tierras de Portugal y de España. Mi memoria está hecha de
literatura. Tengo mucho del protagonista de El
príncipe que todo lo aprendió en los libros, la olvidada obra de Benavente.
Llego al ponerse el sol y me parece verlo iluminando a
los rubios bueyes, con sus adornados yugos, tirando de las cuerdas que traen a
tierra las sobrecargadas redes. Ahora ya solo podemos contemplar ese
espectáculo en los azulejos, en las postales antiguas y en la prosa de Unamuno,
que yo vuelvo a leer, al llegar al hotel, rebuscándola en la red (esa
inagotable biblioteca portátil): “Esto de sacar las redes con parejas de bueyes
es lo que más carácter da a la pesca de Espinho, asemejándola a una labor
agrícola y prestando asidero a la imaginación para cotejar con la labor de los
campos en esta región en que, como digo, el mar parece que se ruraliza”.
Antes esa labor la hacían hombres y era tan penosa que
quedaban exentos del servicio militar. Cita Unamuno una frase: “Bendigamos al
que domó al caballo; pues, si no, la mitad del género humano estaría llevando a
cuestas a la otra mitad”. Y algo así sucede a pesar del caballo, añade Unamuno.
Era muy optimista. Son bastante más de la mitad los que siguen llevando a hombros
a unos pocos.
Martes, 19 de septiembre
LO IMPOSIBLE
Unamuno encontraba de una
triste monotonía la costa portuguesa del distrito de Aveiro, “una larga playa
baja, de fina arena, y cadenas de dunas coronadas a veces por los pinos, que
llegan a mirarse en las aguas”. Yo la recorro entera, desde Ovar hasta Mira, en
un día gris en que el cielo parece confundirse con las aguas, y no la encuentro
monótona ni triste, sino de una embriagadora melancolía. Dan ganas de parar el
coche, olvidarse de obligaciones y compromisos, e imitar a esos pescadores que
dejan pasar el tiempo sin pensar en nada. Pero seguimos por la carretera
solitaria hasta que la interrumpe el canal que permite a los barcos llegar
hasta el puerto de Aveiro. Hay que cruzarlo en el ferry. El trayecto, aunque
corto, lleva su tiempo, un hermoso tiempo que parece fuera del tiempo,
contemplando las dos orillas, las dunas, los bosquecillos de pinos, las grúas, el
faro. Yo trato de no pensar en nada, de dejar que mis ojos se llenen con la
hermosura cotidiana del mundo, pero a la memoria me vienen, como siempre, unos
versos. El espectáculo de la realidad lo veo siempre subtitulado por la
literatura: “Marinería. Viento. Canción antigua y vaga / de un puerto de otro
tiempo. Nostalgia indefinible. / Torna un olor a brea. Un sol rosa se apaga. /
En la playa un proscrito sueña con lo imposible”.
Miércoles, 20 de septiembre
LA FUNESTA MANÍA DE VOTAR
Mientras tomo un café en
Vetusta, me llegan los ecos de una concentración en la plaza del Ayuntamiento.
Me acerco a ver qué pasa y en seguida me sumo a ella. Un joven barbudo con micro
invita a debatir sobre lo que está ocurriendo en Cataluña. Protesta un
espontáneo porque, tras defender durante largo rato la intervención de la
guardia civil para secuestrar papeletas, oye gritar “¡Urnas, urnas!”. El
replica: “¿Ven ustedes? Son unos fascistas. No dejan opinar a los que opinamos
de distinta manera”. Lo repite varias veces y yo, sin pensarlo dos veces, me
acerco, tomo el micrófono y digo: “Ya hemos oído sus razones y si alguien no las ha oído no tiene más que
escuchar hoy todas las noticias, o comprar mañana cualquier periódico, para
enterarse de ellas. Aquí estamos para escuchar otras opiniones”.
Afortunadamente me contengo antes de exponer las mías. Solo faltaría, a mi
edad, comenzar a dar mítines, micrófono en mano, en la plaza pública.
Recuerdo que en Ovar, Pedro Guilherme-Moreira, otro de
los participantes en la mesa sobre cultura y poder, dijo, tras elogiarme
generosamente: “No tenemos un García Martín en Portugal”.
Que no lo repita mucho porque al paso que vamos (el
españolísimo “lejos de nosotros la
funesta manía de pensar” ha sido
sustituido por “lejos de nosotros la funesta manía de votar”) es posible que pronto
acaben teniéndolo.
Poco le ha durado a JLGM su propósito de guardar silencio respecto al tema catalán. Hay cosas que son más fuertes que uno, ya se ve.
ResponderEliminarNo es así, Anónimo. Si mira las fechas, verá que estas anotaciones del diario son anteriores a mi propósito de abandonar el tema, cansado de lidiar con el rancio nacionalismo español de la mayoría de mis comentaristas (y temeroso de la peligrosa deriva que está tomando el asunto para quienes no podemos prescindir de "la funesta manía de pensar").
EliminarTotalmente de acuerdo con José Luis García Martín.
Eliminar¡Sé fuerte, Anónimo!
Eliminarhttp://historiasdelahistoria.com/2012/05/03/el-dia-que-cartagena-murcia-solicito-integrarse-en-los-eeuu
ResponderEliminarhttp://elpaissemanal.elpais.com/documentos/el-autismo/
EliminarMuy interesante, No me. Ya está bien de silenciar a este colectivo. Ellos no están de prestado en este mundo, aunque, una vez conocido el mal, deban organizar su vida en base a otros presupuestos.
EliminarMartín, el máximo exponente del rancio nacionalismo español es el tel Felipe, a quien usted halaga con profusión exagerada. Vaya contradicción, el caso es desmarcarse de la humanidad para acercarse al Olimpo, tierra ajena a esos otros muchísimos rancios, como Marse, Matías, Cercas, Fusi, y hasta su admirado Trapiello.
ResponderEliminarMe parece que no estoy yo muy dotado para el halago. Sí para elogiar a quien desempeña bien su función, sea panadero, jardinero o jefe del Estado.
EliminarQué poca sinceridad, Martín, en cuanto puedes te derrites con el monarca esperando rentas futuras, igual que hace la pelotillera Elvira Lindo con doña Leti. Lo que no entiendo es cómo Muñoz Molina no le reprocha tan rastrera actitud. Ayer debió cobrar también bastante de la casa de discos de Serrat, con su pegajoso halago en el BOE.
EliminarHa contestado usted con muy poca convicción. La respuesta es vacua. Y que me dice de estos acreditados pensadores?
EliminarQué ganas de perder el tiempo tienen algunos. Mi comportamiento (como mis palabras) están a la vista de todos. Si piensas que me derrito por algún monarca, pues allá ellos (pero deberían aprender a leer).
EliminarMartín, te digo con interés desde hace tiempo y don incontables las ocasiones en que has dedicado panegíricos a Felipe. Por eso me pregunto cómo se compatibiliza esa admiración con el hecho de descalificar a quienes, como él, tienen más afección a España que alergia soberbia.
EliminarNo entiendo nada. Mi admiración está siempre condicionada al comportamiento político presente y pasado. Del futuro no opino, no soy profeta.
EliminarBien dicho camarada, ya esta bien de mPrPcPnPdPs
ResponderEliminarpO_,
Dado lo bruto que es (mayoritariamente) el producto interior, creo que la última esperanza que nos queda de neutralizar el ciclón totalitario arrojado sobre Catalunya es la intervención de otros países de Europa que sí estén civilizados, a través de advertencias de sanción o amenazas de expulsión de España fuera de la Unión Europea, por violación de libertades fundamentales, represión violenta de masas pacíficas de ciudadanos, persecución de la libre expresión, apropiación indebida de documentos y caudales privados, etc. No es que tenga uno gran confianza en que llegue este rescate, pero creo que tendría mucha fuerza en la situación presente.
ResponderEliminarSi falla, habrá que considerar la adopción de la nacionalidad portuguesa, a estas alturas de la vida -qué pereza-, después de otras huidas antiguas, otros nomadismos y éxodos desde la extendida miseria humana.
Lo primero no va a ocurrir, hay muchos intereses en juego y a ningún gobierno le interesa hacer el Quijote y ponerse al lado del más débil.
EliminarPara lo segundo, no hay que cambiar de nacionalidad. Solo cambiar de lugar de residencia (yo escogería Oporto) si el aire por este lado se vuelve irrespirable. Esperemos que no y que la izquierda reaccione. Debo reconocer que a mí, a pesar de todo, el país que más me gusta para pasar la vida es España y, más en concreto, Asturias.
Desde luego, qué poco respeto. JLGM había anunciado ya claramente su intención de observar voto de silencio en el tema catalán, pero no hay manera, la "extendida miseria humana" no le deja. Yo sí. Y, lo que es más, me parece una actitud muy razonable.
EliminarVaya cagalera, Miguel, comprende papel higiénico e introduzcamos por boca, oídos y nariz para secarse el cerebro. Solo le falta informarnos, de buena tinta, que en las comisarías se tortura a decenas de jóvenes esposados y que desde El Talar se ve bajar tanques en dirección a Lérida, mientras la Legión penetra por el cabo de Rosas para aplastar la insurrección democrática. Hombre, la verdad es que la Colau se parece tanto a Agustina de Aragón como a la portera de mi casa. De ahí su personalidad indomable.
EliminarNo juegues con ciertas cosas, Anónimo. Iniciada la cuesta abajo, no sabemos hasta dónde llegaremos. Pero mucho me temo que lo iremos viendo en los próximos días. Y todo no dejar que los ciudadanos de Cataluña hagan algo tan respetuoso y tan democrático como depositar una papeleta en una urna.
EliminarA un Anónimo: Callo sobre el tema, todo lo que puedo. Y cuando hablo, como en tiempos que creíamos pasados para siempre, procuro autocensurarme para que la democracia turco-española, cada vez más cuesta abajo (y con el aplauso de Banderas, Serrat y otros intelectuales), no me coja bajo sus zarpas como a tantos catalanes.
ResponderEliminarPues menos mal que calla todo lo que puede, gracias a lo cual sólo insiste en que la democracia española es una ficción o directamente una falacia, enteramente equiparable a la Turquía de Erdogan. Lo de las "zarpas" no sé si se referirá a las detenciones (exactamente 14, que yo sepa, todos ya en libertad; lo de "tantos", en ese caso, es una licencia poética, imagino), o bien a que impedir la celebración de un referéndum tan ilegal como ilegítimo es "coger bajo sus zarpas" a todos los que preferirían votar. Por supuesto, imponer esa ilegitimidad e ilegalidad, si fuera el caso, no es "coger bajo ninguna zarpa" a nadie de los que no estén, razonablemente, de acuerdo con ellas. Que los papeles de Bueno y Malo ya están adjudicados de entrada, y no cabe (ni se tolera, faltaría más) confusión alguna. Ya digo, es una suerte, puesto que si callando todo lo posible dice lo que dice, si se expresara sin trabas la cosa se pondría extremadamente interesante. Puesto que, a pesar de mi anonimato, JLGM ha demostrado conocerme, envíeme si lo desea privadamente los comentarios que desearía hacer y no se atreve, y yo prometo hacerlos públicos aquí, o donde él desee, con mi nombre, que a mí las "zarpas" no me dan miedo.
EliminarEl martes "subí" a Porto y en Vía Catarina aprecié una cola de tamaño regular frente al FNAC del admonitor doble carrillón colgado en la fachada. Pensé que aquello era para estar orgulloso: la afición por la lectura en este país crecía de manera exponencial. Pero no; al acercarme pude comprobar que aquel gentío hacía turno para entrar en el café Majestic (!). Adentro, los camareros rubicundos de delantal hasta los tobillos hacían filigranas para sortear -bandeja en ristre- la plétora guiri..., en buena parte compuesta de grey carpetovetónica. Hube de tomar el café en un aguaducho de Rua Sá da Bandeira, camino de Lello e Irmao (dispénseseme de poner la virgulilla). Y en la vereda sombreada por la Torre de los Clérigos, otra cola de proporciones aún más considerables trepaba Carmelitas arriba hasta la puerta de la mítica livraria, vulgo High School de Harry Potter. La novedad es que para defenderse de tanto miranda de tócame y no me compres, ahora cobran cuatro euros por la entrada, con derecho a descontarlos de la hipotética compra. Un país razonable procura soluciones tan razonable como esta. Pero la masificación turística es un hecho preocupante.
ResponderEliminarPor cierto, este blog -de un tiempo a esta parte- parece presa de las artimañas de ciertos troles derechistas. No me extrañaría, puesto que está claro que existe la consigna de embarrar cualquier espacio que opte por preservar las libertades: ejemplo claro, los periódicos digitales progresista, en donde el apartado de comentarios viene sufriendo -de un tiempo a esta parte- la agresión dialéctica de los derechosos prepotentes. Lo único, que no sé si el buen Martín les preocupa lo suficiente como para tomarse la molestia.
Es algo fuerte decir la "democracia turco-española", creo que sería más real hablar de la política del gobierno del PP y su deriva autoritaria y su falta total de empatía con una población que quiere y tiene derecho a votar por su futuro. Ya habrás visto y oído al Lehendakari Urkullu que ellos, los vascos, quieren también un referendum para decidir por su futuro, pero un referendum pactado y con garantías, ese es el camino para pacificar la política española, tener esa visión de futuro y ponerse a construirlo entre todos, a ser posible en paz, con consenso y aceptando "todos" las reglas del juego que se pacten. Lo que está pasando en Cataluña no es mas que una expresión de una política pobre y miserable para tapar la enorme corrupción de los gobiernos nacionalistas de Pujol y Artur Mas, así como un consuelo para intentar tapar la enorme y miserable corrupción del partido del gobierno, el PP. Tendremos que esperar que la sensatez se aloje en el coco de los votantes españoles, incluidos los catalanes, y esperar unas nuevas elecciones que posibiliten un Congreso de los Diputados dispuesto a elaborar unos cambios imprescidibles en la Constitución que permitan votar a los catalanes, vascos, etc. en referendums sobre permanencia o independencia y que este consenso sea respetado por todos.
ResponderEliminarQué frivolidad. Debería usted transcribir está patochada en el foro de su admirado Trapiello, pero seguro que no se atreve, de pura vergüenza.
EliminarINFELICES SIN TRATO
ResponderEliminar-De nuestra nación quieres salir corriendo.
Piensa, Puigdemont, donde te estás metiendo.
Tienes nombre de moto pero no hablo de eso.
Tú quieres marcharte
y yo no te dejo.
-Sabes más que de sobre
que el procéç no parará.
-No me hables de sobres
que la vamos a liar.
-Qué simpatic, Mariano,
cuando marche, llorarás.
-No me importa un c*****
porque sé que volverás.
[-Puedes quedarte esperando un rato.
No pienso seguir
siendo un infeliç
bajo tu mandato.
Contigo no hay trato.
-Escúchame, no seas insensato.
Eso es ilegal, no puedes votar,
pagarás el pato
por tus arrebatos.
¡Que por España yo mato!
-Que pague Rodrigo Rato!]
-Nosaltres nos sentim un gran país.
-Populismo barato
-Y sin vosaltres podemos vivir.
-No se lo cree ni el gato.
-Pasamos de vostra España cañí.
-Tú te lo pierdes, chato.
-¡Independencia ya!
-Muy pronto volverás
-Con lo del referéndum
hay debate y crispación.
-Pero así por lo menos
no hablan de la corrupción.
-Sabes ya que muy pronto
nos verás a tots marchar.
-Con los jueces que tengo
volveréis tots para atrás.
-Ahí te quedas, Marianet,
quel Puigdemont se va
¡y se fuet!
Juan F. Arza
ResponderEliminarReferéndum de autodestrucción
El referéndum no es una solución ni una salida razonable para el “conflicto catalán”. Puede que sea un método democrático aceptable para otro tipo de decisiones, pero no para cuestionar la existencia misma de la comunidad política.
http://www.vozpopuli.com/el_blog_de_juan_f-_arza/Referendum-autodestruccion_7_1066163375.html
El referéndum es el mejor método para conocer lo que piensan los catalanes en torno a una cuestión (si desean seguir o no formando parte del Estado español) sobre la que que se lleva años debatiendo y haciendo encuestas (ayer o anteayer se publicaba la última en El País).
EliminarPara saber lo que alguien piensa sobre una cuestión no hay otro medio que preguntárselo. ¿Y si no se hunde el mundo porque se lo preguntemos a una muestra (es lo que hacen las encuestas), por qué va a hundirse si se lo preguntamos a todo el censo electoral?
Esa es la cuestión. Lo que ocurre es que algunos tienen miedo de preguntar porque no les gusta lo que se imaginan que van a encontrar. Esto es todo. No le demos más vueltas ni busquemos más autorizados sofismas.
Si gana el sí, aunque sea por un solo voto, nos apresuramos a aceptar inmediatamente la aritmética con gesto de demócratas satisfechos. Pero si gana el no, también por margen insignificante, le restamos legitimidad, por ser victoria pirrica, y acto seguido asumimos la imperiosa necesidad de celebrar un nuevo referéndum, a lo más tardar dentro de dos años. Seamos serios Martín, esto es una astracanada promovida por la chusma y los panolis que creen que independientes saldrán ganando. Dónde está el idealismo del pueblo que reivindica regir su destino? De verdad es una cuestión de "sentimiento', como pregonan los bocazas para dar coartada a los papanatas? Es simple y llanamente una cuestión de dinero, como llevamos comprobando constantemente desde el inicio de la democracia. La pela es la pela y desde entonces han puesto de rodillas a todos los gobiernos para desatascar el entuerto electoral. Se trata de un chantaje aldeano que es capaz de modificar su bandera para incluir un euro gigante.
EliminarAcabo de darme cuenta de por qué es totalmente inútil discutir con usted: usted no lee los argumentos que contradicen sus ideas, sencillamente. En lugar de leer (y rebatir) el artículo de Juan F. Arza prefiere repetir sus propias ideas.
EliminarY un hecho como éste:
"400 profesores de Derecho Internacional desmontan los fundamentos del referéndum catalán."
https://politica.elpais.com/politica/2017/09/26/actualidad/1506424550_261561.html
le dejan a usted frío. ¿Qué es la opinión de 400 profesionales del Derecho Internacional al lado de la suya?
Don José Luis, no siempre pero con cierta frecuencia, encuentro una puerta abierta para comentar. Hoy es su mención a Alvaro de Campos y la cita de "Tabaquería", que junto a "Poema en línea recta" son mis favoritos.
ResponderEliminarPessoa era de Géminis, y Géminis está casi siempre ante una encrucijada. Detenido ante dos caminos que se abren se pregunta cuál de los dos lo lleva adonde quiere ir. Los gemelos Cástor y Pólux es su mito.
Pessoa tenía conocimientos de astrologia y a cada heterónimo le da una fecha de nacimiento, una vida, una personalidad…
Hay algunos estudiosos de astrología que han hecho un análisis entre lo que muestra cada Carta astral y la “biografía” de cada uno de ellos. Interesante el resultado.
“Si en cierto momento
Me hubiera vuelto hacia la izquierda en lugar de hacia la derecha,
Si en cierto momento
Hubiese dicho sí en lugar de no, o no en lugar de sí;
Si en cierta plática
Hubiera tenido las frases que sólo ahora elaboro en la duermevela—
Si todo ello hubiese sido así,
Hoy sería otro, y tal vez el universo entero
Sería insensiblemente llevado a ser otro también.”
Así se lo plantea como Álvaro de campos, el heterónimo más cercano a Pessoa por su carácter dicotómico.
No sé si tan enigmática pero sí múltiple personalidad la de Pessoa.
Saludos cariñosos
Yo me sentí muy identificado con la personalidad de Pessoa. Recuerdo que, una de las primeras veces que fui a Portugal, hojeaba distraído unos libros y en uno de ellos, dedicado a los signos del horóscopo (para mí solo un divertimento), leí lo siguiente dedicado al mío, Géminis: "Eterno adolescente en una encrucijada de caminos". Me pareció que nunca me habrían podido definir mejor.
EliminarDon José Luis, a quien lleva dentro de sí un adolescente nunca le faltarán los sueños. Cae y se levanta y sus ojos suelen reír hasta con lágrimas. Cuando lo que duele, aprieta, sale del bolsillo del corazón, le hablará al oído y le dirá que todo pasa, que no hay mal que dure cien años y que todo comienza nuevamente.
Eliminar¿Qué mayor refugio para las decepciones, los malos tragos, la sinrazón, que un adolescente?
Saludos cariñosos
Gracias, Martín, por hacer voto de silencio con respecto a este tema. ¡Qué aburrimiento! ¿Seguro que si se independizan van a contentarse con ser un próspero y discreto país europeo? ¿Tan, tan europeos son? ¿No tendrán síndrome de abstinencia tras tanta lucha libertadora? Ojalá sea así y dejen de llamar la atención con sus rabietas.
ResponderEliminarMiranda, ¿dónde ves tu rabietas? Yo veo otra cosa muy distinta, y admirable.
EliminarLa democracia turco-española... Comparar a España con la Turquía de Erdogan ya no es demagogia, sino lo siguiente. Serrat como parte de la "democracia turco-española"... Flipo. El primero que cantó en catalán, siempre a la vanguardia de las libertades. ¿Es otro facha, no? ¿Un españolista recalcitrante, no? ¿Pero esto qué es? ¿No se te está yendo un poco la pinza? Seriamente.
ResponderEliminarPues no, no se me está yendo la pinza. Te recuerdo que la justicia española colabora con la turca en la detención de sus opositores (tras una alarma de Interpol, que se activa a partir de la petición de un Estado y que no es obligatoria). Y que en Turquía hubo un intento de golpe de Estado que provocó el retroceso de las libertades y aquí solo un intento de ir a votar algo decidido legítimamente por el legítimo parlamento autonómico. Todavía resulta que, a este paso, en la comparación va a acabar ganando Turquía.
EliminarPara Serrat, todos mis respetos. Borges hizo algo peor (dijo que el gobierno de Videla era el gobierno de unos caballeros) y siguió siendo Borges (claro que luego se arrepintió).
Me temo que JLGM no distinga bien entre "legal" ("conforme a la ley") y "legítimo".
EliminarSegún la Comisión de Venecia, cuyo Código de Buenas Prácticas sobre referendos ha sido repetidamente citado como autoridad por los propios independentistas, para que un referéndum sea válido, ocurre que "el principio de soberanía del pueblo permite tomar las decisiones solo de acuerdo con la ley. El uso de referéndums debe ser permitido solo donde está previsto por la Constitución o una ley en conformidad con ella, y las reglas procesales aplicables al referéndum deben ser seguidas". Lo que nuestra Constitución, a su vez, dice al respecto (artículo 149) es que "El Gobierno tiene competencia EXCLUSIVA sobre... Autorización para la convocatoria de consultas populares por vía de referéndum". Y, respecto a las "reglas procesales", se exige que "las autoridades suministren información objetiva", "la neutralidad de los medios públicos de comunicación y la garantía de un acceso equilibrado para los defensores de ambas posiciones; y que la organización del referéndum corresponda a comisiones electorales imparciales". Todo ello queda resumido en las siguientes declaraciones de un miembro de la propia Comisión: "En relación, sobre todo, con los referendos constitucionales y los de independencia se exigen dos grandes bloques de requisitos que se pueden sintetizar en, primero, el respeto al ordenamiento constitucional del Estado en cuestión: debe convocarse cuando el ordenamiento lo prevé y observar las reglas y procedimientos establecidos en la constitución o la ley. Y segundo, una serie de garantías que aseguren su legitimidad política: conseguir un amplio acuerdo entre fuerzas políticas, inclusive de la oposición, sobre su organización. Que se convoque en tiempo razonable, la pregunta sea clara y el resultado lo avale una mayoría CUALIFICADA, que las autoridades mantengan una cierta objetividad y los medios públicos de comunicación no den una información sesgada y desequilibrada de las posiciones en juego, y que todo el proceso lo supervisen órganos electorales independientes". Otra exigencia básica es que "los aspectos fundamentales de la ley del referéndum no deben poder ser reformados durante el año anterior al referéndum” (Código, punto II, 2).
Como se ve, TODAS esas exigencias básicas, sin faltar una, las incumple el referéndum de que hablamos.
Imnagine JLGM, si su obcecación se lo permite, que aprovechando su mayoría absoluta el PP hubiese durante la pasada legislatura decidido abolir las competencias que le pareciese del propio Parlamento catalán. Ello podría acaso haber sido LEGAL, pero NUNCA "legítimo". Y aquí se trata de algo muchísimo más grave: abolir simultáneamente la legislación entera catalana, empezando por el Estatut, y la española, con la Constitución a la cabeza. Y todo ello con una mayoría simple parlamentaria (nada de mayorías cualificadas, para qué). Eso, por más que JLGM juegue con las palabras, nada tiene de "legítimo": es un abuso declarado de la legalidad, se mire por donde se mire. Y ejercido en primer lugar contra los propios catalanes, que mayoritariamente NO apoyaron a los partidos independentistas, aunque la ley, y sólo ella, le otorgue la mayoría que hoy tiene.
En resumen: quienes se aferran a la ley, a la letra de la ley, obviando cualquier apelación a la legitimidad, son precisamente los defensores del 1-O. No lo contrario, como JLGM pretende.
He olvidado incluir, como me proponía, enlace a un artículo sobre el tema firmado por un miembro de la propia Comisión de Venecia, a la que, vuelvo a recordarlo, los propios independentistas han citado repetidamente como fuente de autoridad. Aquí está: https://elpais.com/elpais/2017/05/16/opinion/1494956189_937598.html
EliminarSueño en el día en el que lo más noticioso sea haber recogido un gatito moribundo del contenedor... Afortunadamente, yo soy de una de las ciudades con menos catetismo banderil del mundo. El pueblo de Madrid siempre aguanta con humildad los desprecios del prójimo que en cada época le toca.
EliminarMe alegran el doble comentario del anónimo anterior. Estoy de acuerdo con todo lo que dice, con una precisión: los incumplimientos del referéndum catalán a las condiciones que debe cumplir un referéndum se debe, única y exclusivamente al gobierno central y a la oposición catalana, que han tratado de boicotearlo desde el principio y ahora hacen todo lo posible para que no se lleve a cabo. La Generalitat ha puesto el máximo empeño para que se celebre y se celebre con todas las garantías.
Eliminar¿De veras cree JLGM, o alguien, que el incumplimiento descarado de todas y cada una de las siguientes (y enteramente razonables) condiciones, o sea, la "serie de garantías que aseguren su legitimidad política: conseguir un amplio acuerdo entre fuerzas políticas, inclusive de la oposición, sobre su organización. Que se convoque en tiempo razonable, la pregunta sea clara y el resultado lo avale una mayoría CUALIFICADA, que las autoridades mantengan una cierta objetividad y los medios públicos de comunicación no den una información sesgada y desequilibrada de las posiciones en juego, y que todo el proceso lo supervisen órganos electorales independientes" (además de lo de la modificación de la ley no menos de un año antes, por ejemplo), de veras cree alguien que la NO EXIGENCIA de una mayoría cualificada, el descarado posicionamiento de los medios públicos de comunicación en favor de una de las posiciones (y de no pocos privados, a la fuerza ahorcan; véase: https://elpais.com/ccaa/2017/06/29/catalunya/1498748877_075025.html), es culpa no de quienes se han negado a cumplirlas, sino de quienes no quieren apoyar su incumplimiento? En fin, no hay mayor ciego que el que se niega a ver, ya es sabido.
EliminarDe verás lo creo, Anónimo. A nadie le interesa más que a la Generalitat que el referéndum tenga todas las garantías para que no se pueda dudar de su resultado. Y a nadie le interesa más desacreditarlo (porque teme el resultado) que al gobierno central.
EliminarObserve un poco la realidad. ¿Ha estado usted alguna vez en Barcelona? Si todos los periódicos que uno puede comprar en los quioscos de allí apoyan una opción no es precisamente la independentista. ¿No había caído en la cuenta de que El País, El Mundo, ABC, La Razón son también periódicos de Cataluña? Y que allí se ve televisión española, Telecinco, etc, etc, no solo la cadena autonómica.
En fin, relea la Constitución y verá que ningún apartado se prohíbe que un referéndum pregunte a los catalanes si quieren ser independientes o no. ¿Cómo iba a prohibirlo si los partidos independentistas son plenamente constitucionales? Este referéndum es ilegal porque el gobierno ha decidido que lo sea, al no aprobarlo, solo por eso. Su ilegalidad es una decisión equivocada del gobierno que nos va a costar cara a todos.
Lea la Constitución, por favor, y no me venga con autoridades de El País o con lo que dice la constitución alemana. Ojo: hablo del referéndum, no de la ley de desconexión, esa sí plena y deliberadamente anticonstitucional (pero solo entrará en funcionamiento si, después de no haber acuerdo con el gobierno central para un referéndum pactado, gana el sí).
En la Constitución, puede usted comprobarlo si lo desea, no se prohíbe el canibalismo. Sin embargo, una lectura sin prejuicios de su texto permite llegar a la conclusión inequívoca de que no está autorizado. No todo lo que no se regula específicamente queda por eso tácitamente permitido.
EliminarEso aparte, si la Constitución dice concretamente (artículo 2) que la propia Constitución "se fundamenta en la indisoluble unidad de la Nación española, patria común e indivisible de todos los españoles", no parece muy difícil de comprender que un referéndum secesionista (que es exactamente lo que se pretende convocar el domingo, aunque se intente disimular ese carácter mediante mil subterfugios) choca frontalmente con lo que ella dispone. Así lo han reconocido en sus respectivos casos, como ya lo dije, los tribunales constitucionales de Alemania o Italia, o la Casa Blanca de Obama, apelando a las respectivas Constituciones. No es pues, al menos en los dos primeros casos, una decisión "del gobierno".
En el caso español, ya he explicado también antes de ahora que nuestro TC ha dicho concretamente que la declaración aprobada en su día por el Parlament catalán en en sentido de que Cataluña es un "sujeto jurídico y político soberano" es igualmente anticonstitucional, puesto que en el Título preliminar de la Constitución se dice que "La soberanía nacional reside en EL PUEBLO ESPAÑOL, del que emanan los poderes del Estado". Como verá (si quiere, que me temo que no) es exactamente lo mismo que ha dicho el TC alemán, al explicar que "la soberanía recae en el conjunto de los alemanes". Por eso, sigue el TC español, Cataluña "no puede unilateralmente convocar un referéndum de autodeterminación para decidir sobre su integración en España". Aquella declaración del Parlamento catalán "vulnera los artículos 1.2 (que indica que la soberanía reside en el pueblo español) y 2 (que establece la unidad de la nación española) de la Constitución, así como los artículos 1 y 2.4 del Estatuto de Autonomía de Cataluña, que señalan que Cataluña ejerce su autogobierno y la Generalidad sus poderes de acuerdo a la propia Constitución".
(Por cierto, e incidentalmente, la ponente de aquella sentencia fue la vicepresidenta del TC, Adela Asúa, que se incorporó a la institución en enero de 2011 tras ser elegida por el Senado a propuesta del Parlamento autonómico del País Vasco, con el visto bueno del PNV, y es considerada como una nacionalista moderada).
Ya sé que a usted nada de esto le sirve, tal es su obcecación: el TC español no es otra cosa que un instrumento en manos del Gobierno, por lo que todas sus decisiones de importancia han de ser consideradas como decisiones de éste, y que los TC de otros países europeos hayan decidido exactamente lo mismo y por idénticas razones para usted no cuenta (aunque no tengo ninguna duda de que si hubieran decidido lo contrario, esto es, que un referéndum secesionista sí era compatible con sus respectivas Constituciones sí contaría, y mucho).
EliminarTermino repitiendo lo que ya he dicho antes: no hay mayor ciego que el que se niega a ver. La simple lectura de la Constitución deja claro que 1) la soberanía reside en EL PUEBLO ESPAÑOL, no en una parte de él; de donde las decisiones que afecten a la soberanía no pueden ser tomadas (sin modificación previa de la propia Constitución) más que por dicho pueblo español. La situación es exactamente comparable a la de una familia que pretendiese, sin contar para nada con las demás del inmueble, modificar LOS FUNDAMENTOS de éste; si la Constitución SE FUNDAMENTA (relea, si quiere, el 2º párrafo) en la "unidad de la Nación española", no cabe que una sola parte de los habitantes, con exclusión de los demás, decida sobre ello. 2) La unidad de la nación es definida como indisoluble, y su territorio, como indivisible. Todo ello puede modificarse; lo que no cabe es decir, como usted hace, que un referéndum secesionista no se enfrenta abiertamente con esas disposiciones. Claro que lo hace. Y por eso los TC alemán e italiano, en el desempeño exacto de su misión de velar por el cumplimiento de las respectivas Constituciones, lo han prohibido en sus territorios.
Así es que lo de "lea la Constitución, por favor", está de más. Yo no me permito suponer que usted no la haya leído, aunque de acuerdo con las explicaciones (no con lo que diga El País o ningún otro medio, aunque le recuerdo que sin medios de información que nos contasen lo que sucede no estaríamos discutiendo sobre esto) que acabo de dar, podría sostener que, en efecto, no parece conocerla mucho. Está seguro, sin embargo, de conocerla mejor que el TC, que yo mismo o que cualquiera que no coincida con su punto de vista; seguridad, cuando menos, muy discutible, según temo.
Si la Constitución dijera lo que usted dice que dice, el tribunal constitucional habría prevaricado al permitir que partidos independentistas se presentaran una y otra vez a las elecciones y al aceptar que presenten en su programa un referéndum sobre la independencia.
EliminarLo del canibalismo, es una solemne majadería. Dicho sea con todos los respetos.
El referéndum es ilegal solo y únicamente porque el gobierno ha decidido no autorizarlo. De los problemas que cause esa decisión (de lo problemas que está causando), únicamente el gobierno es responsable (y los que lo apoyan). La constitución no prohibe votar a los censados en Cataluña en referéndum (no insultemos a la constitución), quien se lo prohíbe es el gobierno; el tribunal constitucional lo hace a petición del gobierno y porque no le queda otro remedio ya que al referéndum le falta un requisito que solo depende del gobierno.
Ya veremos que pasa el domingo. Pase lo que pase, el problema va a continuar.
Lo inconstitucional no es decir que quieren la independencia (muchos ciudadanos lo han dicho elección tras elección votando a partidos independentista), sino declararla sin una reforma previa de la constitución.
Que es lo que se verán obligados a hacer los catalanes por el cerrilismo de buena parte de los españoles. Esos españoles que a mí me avergüenzan, que nos avergüenzan ante el mundo.
Ya lo dije: es inútil. Sólo haré una precisión: lo que el TC expresamente ha prohibido (como, cansadamente repito, lo han hecho los de Alemania o Italia) es un referéndum secesionista.
EliminarRespecto a la existencia y actividad de los partidos independentistas, el TC, en la misma sentencia a que he venido refiriéndome, considera completamente ajustada a derecho su actividad. Copio:
"El TC sí considera constitucionales, en cambio, las referencias de la declaración respecto al "derecho a decidir de los ciudadanos de Cataluña", siempre que este se interprete de acuerdo a lo que establece la Carta Magna, y no en el sentido del derecho a la autodeterminación externa de Cataluña.
La sentencia advierte de que estas referencias al derecho a decidir suponen una aspiración política a la que solo pude llegarse mediante un proceso ajustado a la legalidad constitucional con respeto a los principios de "legitimidad democrática, pluralismo y legalidad" expresamente proclamados en la declaración en estrecha relación con el "derecho a decidir".
Se puede cambiar "el fundamento mismo del orden constitucional", añade el TC, siempre que no se haga "a través de una actividad que vulnere los principios democráticos, los derechos fundamentales o el resto de los mandatos constitucionales", sino en "en el marco de los procedimientos de reforma de la Constitución".
Que a usted todo ello le parezca una tontería es una opinión exclusivamente suya. En lo que sí le doy la razón (es obvio) es en lo de que pase lo que pase el domingo (mi opinión personal es que si la votación se lleva a cabo, no tendrá mayor participación, ni relevancia, que la "consulta" del 9-N), el problema va a continuar.
Podría agravarse si, en esas condiciones, el Gobierno catalán, más obcecado todavía que usted, intentase proclamar a continuación unilateralmente la independencia. En circunstancias normales, le diría que no lo creo, que no espero que su grado de disparatada desconexión con la realidad pueda llegar a tanto. Pero han dado ya sobradas pruebas de que el sentido común no figura entre sus virtudes, de modo que no me atrevería a asegurarlo. En todo caso, lo vamos a ver muy pronto.
Sea lo que sea de ello, le deseo lo mejor, tanto a usted personalmente como a Cataluña y los catalanes.
¿En serio no te avergüenza también el cerrilismo de buena parte de los catalanes y no te avergüenzan también ante el mundo? No te conozco.
EliminarRespondo a Anónimo. Me alegra que se tome la molestia de citar textualmente las sentencias del constitucional para darme la razón (me la da, aunque no lo crea). El único motivo para que el constitucional se vea obligado a declarar ilegal este referéndum no es el contenido (que de lo que usted cita se deduce que es perfectamente constitucional: los catalanes se limitan a expresar su deseo de seguir o no formando parte del Estado español), sino el no haber sido autorizado por el gobierno. Lo inconstitucional es que tras el resultado, si es afirmativo, se declare unilateralmente la independencia en lugar de iniciar negociaciones para cambiar la constitución.
EliminarTambién estamos de acuerdo en que el domingo, hagan lo que hagan las fuerzas policiales, no se va a solucionar nada.
Con las personas sensatas, uno siempre acaba estando de acuerdo.
Respondo a José Luis Piquero. Pues no, no me avergüenza. Me siento orgulloso del comportamiento de los catalanes (hay excepciones, pero son eso, excepciones). Como español, estoy orgulloso de su capacidad de organización y resistencia civil a la hora de defender sus derechos. Creo que son un ejemplo para el mundo y que están teniendo un comportamiento ejemplar y haciendo historia.
EliminarEsta al menos es mi opinión, que es lo que me has pedido.
Me alegro de que podamos entendernos. Sólo quisiera recordar una cosa: más arriba cité (nota del 28 de Setiembre, a las 16.45) al propio TC diciendo literalmente que, vuelvo a copiar, "La soberanía nacional reside en EL PUEBLO ESPAÑOL, del que emanan los poderes del Estado". Por eso, sigue el TC español, Cataluña "no puede unilateralmente convocar un referéndum de autodeterminación para decidir sobre su integración en España". Aquella declaración del Parlamento catalán "vulnera los artículos 1.2 (que indica que la soberanía reside en el pueblo español) y 2 (que establece la unidad de la nación española) de la Constitución, así como los artículos 1 y 2.4 del Estatuto de Autonomía de Cataluña, que señalan que Cataluña ejerce su autogobierno y la Generalidad sus poderes de acuerdo a la propia Constitución".
EliminarRepito: CATALUÑA NO PUEDE UNILATERALMENTE CONVOCAR UN REFERÉNDUM de independencia, ya que la sobreanía reside en EL PUEBLO ESPAÑOL, no en una parte de él. (Que, como también señalé, es lo mismo que por ejemplo dice el TC alemán). Insisto, ya sé que en vano: NO PUEDE UNILIATERALMENTE CONVOCAR; esto es, que lo ilegal según el TC es la convocatoria misma, no lo que se haga después de su celebración. Que JLGM simplemente, de nuevo insisto, no quiera ver lo que una y otra vez he puesto aquí, y prefiera hacer ver que ve sólo lo que le conviene es, una vez más, problema suyo. No sé a quién, finalmente, darán la razón los hechos; la insistente afirmación de JLGM de que sólo el Gobierno impide la celebración del 1-O es FALSA, y lo seguirá siendo por mucho que la repita. Es el TC, como intérprete autorizado de la Constitución, quien ha dejado completamente claro que la convocatoria unilateral de un referéndum secesionista es contraria a la Constitución.
Le queda, eso sí, el recurso de volver a lo de antes: el TC está manipulado por el Gobierno, y sus decisiones son las de él. Cierto que es extraño que sólo le parezcan manipuladas y criticables las decisiones que no coinciden con su propio punto de vista, y admirables las otras; pero son cosas que pasan. Qué le vamos a hacer, así es la vida.
Lee, Anónimo, más abajo lo que dice Demetrio. Coincido exactamente. El Partido Popular ha puesto a su servicio al tribunal constitucional, cargándoselo de facto. Espero que no haga lo mismo con la corona. Pues claro que el parlamento de Cataluña no puede convocar unilateralmente un referéndum de secesión, ni de secesión ni de nada: debe tener la aprobación del gobierno central. Si el gobierno central le da su aprobación (como tenía la obligación norAL de haber hecho), el tribunal constitucional ni lo habría declarado inconstitucional ni habría tenido siquiera probablemente que pronunciarse porque nadie lo habría recurrido (y si lo recurre un partido no podría hacer sido suspendido automáticamente, como ocurre con las leyes de un parlamento autonómico cuando las recurre el gobierno, y eso aunque luego, tras su estudio, se declaren constitucionales.
EliminarEn fin, que ya la partida se juega en otro ámbito, no en el de las argucias legales. Que haya suerte para bien de Cataluña y de España.
He contestado a Demetrio antes de leer esta nota. No tengo mucho más que añadir, salvo lo que ya dije: el razonamiento por el que el TC español ha prohibido un referéndum secesionista en Cataluña es exactamente el mismo por el que el TC alemán lo prohibió en Baviera. O sea, que una de dos: o el TC alemán también ha sido "puesto a su servicio" por el partido allí gobernante, o ese argumento es tan inválido allí como aquí. La única diferencia es que allí, el independentismo bávaro se dirigió al TC preguntando sobre la constitucionalidad de la iniciativa; el independentismo catalán ha preferido prescindir de ese trámite, porque (a lo que se ve) la constitucionalidad de las suyas no le importa absolutamente nada.
EliminarConsiderando que en Cataluña esa Constitución que así desprecian fue aporbada en su día por más del 90% de los votantes, parece obvio que su apelación a la "voluntad popular" (que, en cambio, les dio A ELLOS un apoyo inferior al 50%. perdiendo por tanto el "plebiscito" en que pretendían convertir las últimas elecciones) es una broma sarcástica.
Y parece igualmente obvio que el que la presunta república catalana pretenda dotarse a su vez de una Constitución es una formalidad inútil, ya que cualquiera que tenga circunstancialmente una mínima mayoría podrá pasársela por allí mismo en cuanto lo desee, autorizado para ello por su propio ejemplo.
Los demócratas se conforman con hacer política, los fascistas quieren hacer Historia, así con mayúscula. Habría que tener cuidado con eso. La Historia se hace con pasado, la política con futuro. Eso hay que tenerlo en cuenta.
ResponderEliminarUna frase, sin más, José M. Haciendo política se hace historia. Los hechos memorables del presente son los que se convierten en historia.
EliminarLos indepes son los "hooligans" de la política española.
EliminarAparte de Anónimo es usted sordo y ciego, estimado comentarista. Los "hooligans" abundan más en el otro bando.
EliminarLa Federación Ibérica que plantea José Luis para dentro de diez o cincuenta años me parece una maravilla.
ResponderEliminarRespecto al problema catalán, cada vez da más miedo cómo lo afronta el nacionalismo español. Al menos a mí.
A mi también me da miedo, Josep.
EliminarA mí toda esta gresca me parece genuinamente española.
EliminarA mí estos canguelos, producto de mentes inmaculadamente democráticas, me resultan ñoños y ridículos. La propuesta de la Federación Ibérica, donde se integren las reprimidas naciones catalana, vasca y gallega, no es menos absurda, por no decir fruto de la histeria provinciana.
EliminarTenga usted miedo de la tontuna de nacionalistas anacrónicos y de izquierdistas codiciosos que encuentran pretexto en casi todo para imponer su demagogia chiclosa. Un ejemplito patético es la arenga constante que la mujer de Sánchez le soltará cada noche a su marido para alojarse en La Moncloa, objetivo de señoritas arribistas y acomplejadas como ella.
Creo yo, como diría el admirado por Martín, Javier Marías.
Tal vez le guste a Martin leer la última, breve e irónica entrada de su otro admirado, Trapiello, en Hemeroflexia. Estoy totalmente e acuerdo con Andrés, aunque a lado de Merichel incluiría a Gabilondo y su "voz", que pasó de ser locutor a insigne comentarista, como algunos camareros se convierten en propietarios de bares y fubolistas listos en entrenadores.
EliminarA quien se oculte tras "El noveno pasajero": queda claro que tenemos distintos conceptos de lo que es España y de lo que es el arte de razonar.
EliminarPor lo demás, allá cada un con sus cadaunadas.
El señorito Juan Méndez (¿será de los que ve natural tirarse a la mucama pero no que la chusma salga a la calle a pedir lo que entiende que es suyo?), entre las causas de la apetencia de tantos catalanes por la problemática secesión, no dice ni mu del hartazgo que tienen por tener que convivir con gente que piensa como él. Será norteño pero tiene los estigmas del rancio nacionalismo cazurro de secano, que tanta desgracia trajo a este solar que tiene la quijada del burro de Caín en uno de sus heráldicos cuarteles más visibles (también en uno de la Guardia Civil que yo conozco).
ResponderEliminarNunca he conseguido comprender la presunta estrategia de aparecer en un blog con diferentes seudónimos, joven Higgins, se delata usted con la sintaxis y los calificativos y resulta ridículo. Usted sabrá si el juego le divierte.
Eliminar¿Pero tirarme yo a una mucama?, ¿cómo se atreve a dirigirme tan baja insinuación?, en todo caso me tiraría a un mucamo cubano, como haría más de un insigne de este espacio.
Incurre nuevamente, joven, en la simplificación de atribuir ideología derechista a quienes, como yo y miles como yo de mi edad, reniegan de la izquierda casposa actual, por acomodaticia, hipócrita, aburguesada y demagoga. Yo, joven, cuando usted tal vez no había nacido, militaba en un partido socialista que hoy no hubiera tenido cabida en este presente fangoso. En buen momento desapareció, cuando la marabuntaba aplastaba con la tripa llenada desde Alemania.
En cuanto al culebrón catalán, la historia juzgará con dureza tanta frivolidad, generada, como he dicho, por el impulso de los antisistema y los sedientos de dinero a toda costa. Fíjese si serán idealistas, que se acaba de confirmar su aceptación del protectorado ruso a través de sus incordiantes hackers. Por favor, no hable de idealismo catalán ni de "sentimiento", la trayectoria política de esa región ha sido un constante avituallamiento de pelas para facilitar a cambio la gobernabilidad de España. Eso se llama chantaje.
¿También cree el joven Higgins que si los partidos constitucionalistas citaran mañana mismo al mucamo Puchdemón en Madrid para hacerle una suculenta oferta económica si desactiva la mascarada, no iban a convencerlo en cuestión de segundos?, ¿de verdad lo cree, joven? Fíjese en la entrevista a Serrat (por cierto, integrante del bando bueno, a medias pero echándole la culpa al PP de todo el problema) que se leyó el otro día en El País. Después de perderse el conspicuo en reproches contra la falta de transparencia del proceso, le sale de las entrañas asomar descaradamente su preocupación hacia el modo en que Cataluña abordará el futuro. "¿De dónde cobrarán los subsidios de salud, como se mantendrá el sistema sanitario, con qué dinero se pagará"? (sic). Puro idealismo del poeta músico.
Pero, señor don Juan de Méndez (observe que le apeo el tratamiento de señorito, lo que dadas mis procaces y compulsivas maneras tiene cierto valor estimativo), lo de los motes diferentes sería ridículo si no estuviese asumido por mi parte que iba a ser perfectamente identificable. Una niñería, solo eso.
EliminarNo acaba de entender, señor, que Puchdemoni no representa más que una pequeña parte de la coca catalana (encuestas recientes y fiables dan a su partido -que representa a la burguesía indígena pero democrática, no como otras que sabemos- un escaso 9% en las expectativas de voto. Porque el argumento blandido por algunos, entre los que estaba no hace tanto el insigne J.C. Monedero, de que todo es una argucia montada entre las derechas catalana y del resto del Estado, para relegar a segundo plano sus respectivas y escandalosas corruptelas..., aceptando que en un principio ello pudiera estar en la intención de ambos, no vale como argumento para definir lo que está pasando en Cataluña a día de hoy.
Puigdemoni es el president de la Generalitat solo porque su antiguo partido había sido el mayoritario antes de concurrir a las pasadas elecciones autonómicas en el coral Junts pel sí. Como el porcentaje atribuible a cada facción quedaba en el anonimato, se consideró oportuno tomar como referente los resultados de las Generales previas. Pero Puigdemoni no representa más que a un sector muy minoritario de la sociedad catalana (puede que por debajo de las CUP) y no está en condiciones de ir por libre. De modo que, contradiciendo lo que sostienen algunos (creo que el ilustre J.C. Monedero entre ellos) de que tras una hipotética proclamación unilateral de la República Catalana las desigualdades sociales y económicas iban a permanecer inamovibles..., opino que eso es tener escasa confianza en la democracia; porque, de producirse la problemática declaración unilateral y de ser esta sostenible en el tiempo, se abriría un proceso constituyente, y la Constitución resultante sería reflejo fehaciente del sentir mayoritario de los catalanes, pudiendo darse el caso de que resultara muy sesgada hacia la izquierda. Las subsiguientes Legislativas podrían reforzar la deriva progresista si concedieran una nueva mayoría a los partidos de la izquierda. De modo que no vale eso de que todo es una maniobra de distracción de nuestros derechosos nacionalistas de signo adverso.
Y, don Juan, lo que nos estamos jugando no es si Cataluña independiente sí o no: nos jugamos vivir en democracia o en tiranía.
La democracia es incompatible con violar la legalidad vigente. No se puede entrar a robar en un banco y cuando a la salida nos detiene la policía rebelarnos, insultarlos e invocar que el hambre es la verdadera culpable del atraco. Si admitimos interpretaciones subjetivas de la ley sobreviene la genuina tiranía, la del caos. Y esto es lo que se está haciendo en Cataluña, donde, por cierto, entre otros sorprendentes descubrimientos se ha conocido que el 54 por ciento de los que alcanzan unos ingresos superiores a los cuatro mil euros son independentistas. Lo cual confirma, una vez más, que explicar el esperpento porque la pela es la pela es un razonamiento irrebatible.
EliminarUn saludo, don Higgins.
Que el referéndum es ilegal nadie lo discute; ni siquiera quiero entran en el espinoso asunto de la necesidad histórica de contravenir la ley que se ha dado tantas veces... Me basta con decir que cerrar espacios de debate previos a los acontecimientos, suspender charlas y conferencias, amenazar por mera suposición de males futuros es, simple y llanamente, dictatorial. Y no lo digo yo: lo acaban de decir en la ONU y los recelos ya afectan a instancias de la UE.
EliminarEn una democracia se hubiese permitido el debate, la propaganda y hasta la concurrencia a las urnas. Lo único que, al día siguiente, no iba a darse por válido el experimento. Pero los ciudadanos habrían hablado.
Saludos, Méndez.
La democracia es el arte de saber aguantarse.
ResponderEliminarEscucho a Rodríguez Ibarra en La Sexta y me pregunto: ¿Cómo Martín, pensando como piensa, puede sostener que sigue siendo un, aunque modestísimo, peón del Partido Socialista Obrero Español? ¿Cómo? Salvaría la cara si en el plazo de veinticuatro horas don Pedro Sánchez saliese diciendo en ese mismo canal televisivo que desautoriza lo que dice el llamado "bellotari" (nada menos que recomienda una coalición con el PP), porque no represente la línea político-ideológica del atribulado partido que dice en sus mítines "Somos la izquierda". Solo veinticuatro horas, teniendo manga ancha.
ResponderEliminarPorque aquel bárbaro (nunca logró engañarme; aun gobernando en Extremadura supe detectar lo que de falaz, demagógico y oportunista había en él y lo caracterizaba). Y hoy proponía nada menos que un gobierno de coalición de su partido con el PP. Y luego algunas decepcionantes lumbreras del "nuevo" PSOE, como es el caso de Margarita Robles, tendrán la caradura de proclamar donde quiera que les pongan un micrófono delante que si hay un gobierno del PP es porque PODEMOS así lo quiso... Qué vergüenza, si así argumentan los presuntos cerebros rectores de la época sanchista.
Lo dicho, Martín: si don Pedro no sale a la palestra a desmarcarse de esa bazofia parlante y hace en paralelo un desmarque de la sombra ominosa de Rajoy..., habrá quemado en unos meses el crédito que supo suscitar entre la gente de bien de este país. Ante lo que está pasando con Cataluña (que viene a ser en TODA España), no valen los disimulos, las componendas, las apelaciones hipócritas a la Constitución y a la Ley,..., para ponerse del lado de quienes más las incumplen y las prostituyen.
Has defendido con decoro posturas que otros no tienen el cuajo de defender. Solo te falta una revisión del análisis que habrás hecho tiempo atrás, cuando las circunstancias no eran tan aberrantes como lo son hoy: de la monarquía y del papelón del PSOE en esta coyuntura.
Lo dicho: si Pedro no reacciona rápido y lúcido, al basural con él, con Ibarra y con Susana. Y con sus aguerridas huestes.
La paciencia de los justos tiene sus límites.
Hay un gobierno del PP primero porque lo quiso Podemos y después porque lo quiso el "secuestrado" PSOE. La verdad es que el comportamiento de mi partido en determinados asuntos no me despierta demasiado entusiasmo. Esperemos a ver qué pasa. Ciertos "líderes" ya están en el desván de la historia, aunque algunos parezcan no enterarse.
ResponderEliminarMartín, no tiene usted razón si cree que jugando en el campeonato de los iconoclastas va a ser reconocido como un intelectual. Desmarcarse de la mayoría, buscar el reducto, discutirlo todo y rectificar con pedantería, estar contracorriente de la humanidad ignorante, no va a mejorar un ápice la valoración de su persona. Hágame caso y renuncie a la soberbia, seguro que es muchísimo más simpático de lo que usted mismo se niega a admitir. Además, nadie que pretende alta consideración intelectual puede sentirse tan cerca de PS, personaje prosaico e insustancial donde los haya.
EliminarAnónimo pasajero, yo lo único que pretendo es pensar con verdad y decir alto y claro lo que pienso (mientras me dejen). Lo de consideraciones y escalafones queda para otros.
EliminarLa petición que Alien, el noveno pasajero, dirige a Martín, yo la parafraseo de un modo mucho más breve:
Eliminar"Quién se ha creído usted que es, Martín? Adocénese como los demás y regrese al rebaño en el que todos pastamos y balamos al unísono".
Silvia, no se chivee, ya me preocupé de nominarme el noveno pasajero porque Alien era solo el octavo. Yo no dedico hostilidad absoluta al ser humano, como presentaban en la película a la feroz criatura, solo censuro, a mi modesto entender, excesos filosóficos y verbales cuando sospecho que además persiguen protagonismo y notoriedad. Solo así se puede comprender mi crítica a Martín, tan proclive, como resulta indiscutible, a discutirlo todo, descalificar con soberbia y desdén a su discrepante y sentar cátedra con desesperación. Pero igual que digo esto, me adhiero a las palabras de reconocimiento de Méndez porque encuentro justicia en ellas. Cómo ve, nada que ver yo con el implacable octavo pasajero, lo supero en un grado.
EliminarUn abrazo, Cancio.
Eliminar¡Hola, don José!
Eliminar¿Qué sabrá el alienígena emboscado en la sala de turbinas sobre lo que piensa o deja de pensar la mayoría, para acusar a Martín de que se aparta de su dicurso? Ya se ve las ganas que tienen los aliens rompepechos de saber lo que piensa la gente, con la que han armado en Cataluña. Amordazar a la ciudadanía y amenazarla con la cárcel o el expolio es su receta preferida.
ResponderEliminarLas bestias dentonas y viscosas creen que el mundo se reduce a una pecera con pirañas, en la que viven, muerden y babean con extraordinaria placidez. Se les ve la oreja (mayor).
Y ahora el reconocimiento, deporte que tanto nos cuesta practicar a los españoles porque interpretamos que significa hacernos de menos.
ResponderEliminarY quiero dedicarlo a Martín, cuyas respuestas son a veces destempladas y no por ello deben rebajarle el mérito de devolver las ajenas desde el fondo de la pista. Buen restador, pues, al que de paso le agradezco que cada semana nos regale mesa y mantel para discutir.
Lo dicho.
Por lo visto (o mejor, por lo no visto), no he acertado con el comentario, pese a que en cierto modo pretendía incorporarse oportunamente a la "Acción de gracias" con que se titula la entrada. Tampoco importa demasiado, la verdad es que de vez en cuando uno hace examen de conciencia y se impone una penitencia por los muchos pecados veniales cometidos, entre los cuales descubre su extraño afán por adentrarse en canchas hostiles donde no hay ojo de halcón.
EliminarTemo por el talle de las palmeras de la Plaza Real de Barcelona; que el mosaico de Miró que la vesania terrorista dejó indemne, sufra las orugas de los carros de combate. Que la botella vacía de un blanc del Penedés sea proyectil que rompa en la frente de un hijo de Mayorga; o que -y es un decir- la Rambla sea cauce de algo más que de aguas pluviales, o del vino que la plétora guiri derrama en los alcorques de las altas plataneras.
ResponderEliminarApocalipsis now?
EliminarVolverá Tejero? No os perdáis el próximo episodio titulado "Billetes y birretinas"
En realidad, Tejero nunca ha dejado de estar entre nosotros; pistola en ristre o enfundada, pero vigilándonos. Siempre.
ResponderEliminarEncuentro el acogedor Café Arcadia masivamente parasitado por leguleyos. Decenas o cientos de líneas de texto, mucho rodeo y mucha casuística, pero poca originalidad. Me dirán simplista, pero yo no veo más que una repetición mareante del siguiente esquema:
ResponderEliminar- Es ilegal.
(Porque no les ha dado la gana hacerlo legal).
- Otros países también lo prohiben
(Ninguno en el que sea demandado por cuatro o cinco millones de ciudadanos).
- No reúne condiciones democráticas que le confieran validez.
(Las condiciones que buenamente les han dejado).
- Si es ilegal no puede ser democrático.
(Falso; bajo Franco, Stalin o Hitler lo ilegal era lo democrático.)
Mis disculpas por tener limitadas entendederas, pero creo que no hay mucho más que esto. ¿Hacía falta tanta verborrea?
Coincido plenamente contigo, Demetrio. Yo no podría haberlo dicho mejor.
EliminarPues ambos se equivocan. En el ejemplo de Alemania, que he puesto ya varias veces, el TC alemán dijo exactamente (y lamento tener que repetirme tanto) que "la soberanía recae en el conjunto de los alemanes". Eso es un principio independiente de que sea mucha o poca la gente que pida un referéndum secesionista. Si pasara a ser mucha más de la que es ahora, y el TC alemán dictara una nueva resolución autorizando dicho referéndum secesionista, cualquiera podría denunciar esa nueva resolución por contradecir la doctrina del propio TC: no se puede decir hoy blanco y mañana negro. Lo que sí sucede, y nuestro TC lo ha dejado muy claro, es que eso, como cualquier otro aspecto del texto constitucional, puede modificarse, de acuerdo a las condiciones y procedimientos previstos para cualquier cnmbio constitucional.
EliminarComo también he explicado, tan repetida como inútilmente, la expresión "Estado de Derecho" no es un nombre vacío: significa que sólo una convivencia regulada por principios legales claros y estables puede ser democrática. Lo otro sería lo que en el Oeste americano se llamaba "ciudad sin ley", campo abonado para todas las injusticias.
Cierto que en una dictadura lo legal y lo democrático no coinciden, y muy a menudo se oponen. Pero en una democracia sucede lo contrario: lo legal y lo democrático no se oponen, al contrario; y si determinada disposición legal no parece justa, hay cauces para cambiarla pacíficamente, justo lo que no ocurre en una dictadura.
De verdad, pienso que sólo la obcecación puede negarse a comprender algo tan claro.
La Comisión de Venecia, a la que como también he explicado varias veces los propios independentistas han apelado repetidamente como fuente de autoridad, se llama oficialmente "Comisión Europea para la Democracia por el Derecho".
Pero me temo que hay aquí quien no es que no entienda: es que no quiere entender. Y en esas condiciones, naturalmente, todo es mucho más difícil.
Alzo el dedo, Anónimo. Yo soy el que, no es que no quiera, es que no puede entender lo que tiene que ver con este asunto lo que diga la constitución alemana. Aquí solo importa (a la hora de saber que es lo que quieren) lo que digan los catalanes.Si les dejan decirlo... Y si no les dejan, esta democracia se comporta (no ya como la democracia de Venezuela, qué más quisieran), sino como cualquier dictadura. España ha dejado de ser una democracia cabal al dedicar todos sus esfuerzos a perseguir las urnas. Es una democracia a la turca. A mí me avergüenza el comportamiento del gobierno de mi país (un gobierno minoritario y que llegó de una manera no del todo acorde con el resultado de las últimas elecciones), diga lo que diga la constitución de Alemania. Y sospecho que los españoles de dentro de pocos años (tengo esa esperanza) no podrán entender que alguien se opusiera (y fingiendo que tiene a la ley de su parte, y no hay tal, sino una interpretación tendenciosa y torticera de la ley) a que los ciudadanos de una comunidad autónoma fueran a las urnas en una votación organizada por el gobierno de esa comunidad de acuerdo con lo que había propuesto en su programa electoral, votado mayoritariamente.
EliminarLo dejo, es inútil. Sólo una precisión: los partidos que se presentaron como independentistas obtuvieron en conjunto un 47,74% de los votos. NO FUERON, POR TANTO, "VOTADOS MAYORITARIAMENTE", como aquí se dice. Lo que sí ocurre es que la distribución de escaños, producto de la ley electoral allí vigente, les otorgó la mayoría parlamentaria, pero no el voto popular.
EliminarLo que diga la Constitución alemana (o la italiana, o muchas otras) "no importa" porque no favorece a sus tesis, según las cuales esos países son otras tantas "dictaduras" (como los USA de Obama, de paso, que también prohibieron un referéndum secesionista).
Pero ya lo dije: sé que es inútil. Como podrá ver aquí (http://www.lavanguardia.com/politica/20170929/431639549342/lideres-ue-respaldan-a-gobierno-espanol-a-dos-dias-del-referendum-en-cataluna.html), si lo desea, toda una serie de líderes de países de la UE, además del presidente de la Comisión Europea, Juncker, y el del Parlamento Europeo, Tajani, han apoyado explícitamente la postura del gobierno español. Cuánta dictadura hay suelta en este perro mundo, Señor.
En mi unidad de destino opinan que no hay que ser gregario.
ResponderEliminarEl error se debe a que no es una unidad de destino universal falangista. No te preocupes, Fran, las almohadas volverán a su sitio y chistorras y chorizos deberán explicarse ante el juez, la insurgencia no debe salir gratis.
EliminarUn matiz: en un comentario mío anterior, cerraba el rollo afirmando que en una verdadera democracia (no en esta ficción que padecemos desde el 78 a esta parte, con sus diversos grados de achuchón) se hubiese permitido el referéndum, pero que si contraviniese la ley no iba a darse por válido, en el caso concreto de que lo que se pretendiera fuese la secesión. Y eso hay que matizarlo, porque no darlo automáticamente por válido no iba a suponer que no se abordaran una serie de reformas legales y constitucionales, que se hicieran eco de la voluntad popular puesta de manifiesto. Quiero decir que no iba a proclamarse la república (en este caso la catalana) automáticamente si el referéndum no contara con el aval de legalidad, pero que se iba a abrir una nueva perspectiva para acomodar la ley a los deseos de la mayoría (específica, no la general del Estado).
ResponderEliminarLo que pretenden nuestros ultras es, salga lo que salga, cerrar cualquier posibilidad de cambio legal. Pero ni siquiera permiten que "salga".
"Pero en una democracia sucede lo contrario", dictamina el Anónimo, "lo legal y lo democrático no se oponen".
ResponderEliminarY digo yo, un tío con tantas lecturas contitucionales, ¿cómo ha sido tan pipiolo y primerizo para dejarse colar el bulo de que el Régimen español es una democracia? En vez de memorizar constituciones debería leer a Tocqueville y Stuart Mill, a ver si aprende lo que es democracia de una vez.
No se preocupe por mi "pipiolez", que a fin de cuentas la mía es una opinión totalmente privada y sin relevancia pública ninguna. Pero es que la cosa es más grave. Tiene aquí (https://es.wikipedia.org/wiki/%C3%8Dndice_de_democracia) el "índice de democracia" que anualmente viene publicando "The Economist" (y que no es el único que existe, sólo el más conocido). En él verá que España figura entre las "democracias plenas", y por encima de países tan conocidos como los USA, Italia, Francia o Japón.
EliminarClaro que eso no tiene ninguna importancia. ¿Quién es "The Economist" al lado de "Aurelie", sea él o ella quien sea? Nadie, evidentemente.
Tiene güevos el pipiolo: pone a The Economist como ejemplo de imparcialidad. Este hombre no tiene sentido del ridículo.
ResponderEliminarCopio, de la wikipedia: "The Economist ha criticado a personajes públicos por corrupción y deshonestidad. Entre los cargos públicos denunciados se encuentran el expresidente del Banco Mundial, Paul Wolfowitz; el primer ministro italiano Silvio Berlusconi, quien les apodó «The Ecommunist»; el presidente de Zimbabue, Robert Mugabe; la expresidenta de Argentina, Cristina Fernández de Kirchner, el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, y el candidato republicano a la presidencia de los Estados Unidos, Donald Trump. The Economist también defendió el juicio político a Bill Clinton por el escándalo Lewinsky y la dimisión de Donald Rumsfeld tras desvelarse las torturas en Abu Ghraib".
EliminarComo puede ver, los criticados pertenecen a las más distintas orientaciones políticas. Enteramente imparcial, sin duda, es difícil encontrar nada en este bajo mundo; pero esa lista no parece muy "parcial". Por lo demás, lo que yo exactamente dije, como cualquiera puede ver, es que su "Índice de Democracia" no es el único que existe, sólo el más conocido. Lo de la parcialidad o imparcialidad es aportación de sus "güevos", no mía.
¿Cómo puede esté cínico sostener -después de lo visto ayer en Cataluña- que España es una democracia plena?
ResponderEliminarGracias por lo de "cínico"; ya he dicho antes de ahora que quien no tiene argumentos recurre a la descalificación personal, e incluso al insulto, si viene a mano. Puede ver aquí (http://www.eldiario.es/catalunya/puntos-negros-despliegue-Mossos-dEsquadra_0_447955663.html) algunos excesos de la policía catalana en estos 10 años. ¿Concluimos que en Cataluña no existe la democracia? Porque los insultos, desmesurado señor, se los dejo a usted. Como también he dicho alguna vez, es curioso que a quienes van tan sobrados de razón, y de razones, les cueste tan poco arrojarlas por la borda y preferir los excesos verbales. ¿No debiera ser al contrario, que eso pasara precisamente a quienes no tienen razón? (De paso, le recuerdo que no soy yo quien dice lo de la "democracia plena": me limito a citar).
EliminarNo son lo mismo los exceso al detener terroristas que al impedir que quien quiere votar vote.
EliminarEstos comentarios tienen dos problemas: el primero, ya lo he dicho, es el anonimato; el segundo es que los comentarios nuevos y viejos se entremezclan de modo que nadie se toma la molestia de leerlos (salvo aquellos que se enzarzan en una disputa). Yo creo que sería poner ir colocando los comentario siempre al final, indicando a quien se responde (y no tras la intervención a la que se responde).
ResponderEliminarYo, por ejemplo, ahora no soy capaz de localizar un comentario de Juan Méndez que acabo dar de paso en el que indicaba que el discurso del rey coincidía bastante con sus apreciaciones. No se me ocurre descalificación mayor para una intervención tan poco afortunada.