sábado, 13 de octubre de 2018

Revelación de secretos: No debería decirlo



Sábado, 6 de octubre
EL ÚLTIMO DEL ESCALAFÓN

––Estoy harto de oírte hablar bien de ti mismo. ¿Pero es que no tienes ningún defecto?
            ––Tengo por lo menos uno, y bastante grave: no soy ambicioso. Me conformo con poder vivir sin jefe, con trabajar cuando me dé la gana, con ganar solo un poco más de lo que necesito, con poder decir lo que pienso y tratar de vivir conforme a lo que pienso… Con eso me conformo y no me importa nada jubilarme siendo el último del escalafón.


Domingo, 7 de octubre
UN CUENTO DE TERROR

No sé bien si es que no tengo nunca vacaciones ni fiestas de guardar o es que no trabajo nunca y todo el año es vacación. Como a los niños, me interesa todo; como los niños, me canso pronto de cualquier ocupación. ¿Y qué hago cuando me canso de una cosa? Pues me pongo con otra. Y cuando cambio de ocupación, me gusta cambiar de lugar. Mis oficinas son abundantes: la cafetería de la mañana, la de la tarde, la de media tarde, aparte de mi casa y el despacho en el Milán.
            Los sábados y los domingos, incluso en verano, suelo pasar un rato por el despacho del Milán. La tarjeta magnética nos permite entrar a cualquier hora y ese es uno de los lujos que más me agradan en mi trabajo de profesor universitario. ¿Trabajo? ¿Puede considerarse trabajo uno en el que pasamos por la oficina cuando nos da la gana? Bueno, también están las clases, eso que las autoridades académicas valoran tan poco, pero para mí son lo mejor de ser profesor; un regalo, el regalo de poder hablar de lo que te apasiona a quien quizá consigas apasionar también, no una carga, la famosa “carga docente”, que te disminuyen si un comité evaluador, que no lee tus investigaciones, las da por válidas según burocráticos criterios.
            Como me aburro en casa y no me apetece ir al cine, se me ocurre pasar por el despacho a corregir trabajos de alumnos que tengo pendientes. Cuando me canse de la corrección, me pasaré por el Titanic a leer la poesía reunida de Pedro Sevilla, que me acaba de llegar. Los libros de poesía son los más exigentes. Requieren atención plena, tempo lento, y que no haya otros libros a la espera sobre la mesa (son muy celosos).
            Pero hoy no funcionaba la puerta de las tarjetas. Llamé a seguridad y vino el guarda a abrirme.
            –-Tiene que llamarme cuando quiera salir. Tampoco se puede abrir desde dentro.
            Subo al despacho, contesto  correos, corrijo unos pocos trabajos, ordeno algún fichero y cuando voy a llamar a seguridad para que me abran la puerta descubro –no me había ocurrido nunca– que mi teléfono se ha quedado bloqueado, que no soy capaz de encenderlo. Y me entra el pánico. Estoy encerrado en un edificio inmenso y medio a oscuras: hay luz en el despacho, pero en los pasillos y escaleras solo unas lucecitas de seguridad.
            ¿Tendré que pasar aquí la noche? Y si se declara un incendio, ¿cómo voy a salir? Y si, aparte de mí, hay encerrado un psicópata, algún asesino en serie. Me imagino historias que he visto en las series de televisión. Un sudor frío. Casi me dan ganas de abrir la ventana y ponerme a gritar.
            Bajo hasta la puerta. En ese mismo momento, pasa el guarda haciendo su ronda entre los diversos edificios del campus, toco en los cristales, me abre, respiro aliviado.


Lunes, 8 de octubre
MUÑOZ MOLINA HACE AUTOCRÍTICA

Sonrío al leer a Antonio Muñoz Molina en su habitual artículo de Babelia. Arremete contra lo que yo siempre he detestado “la vana morralla narrativa” (el pretexto son los miles de páginas de Mi vida, el bla bla bla de no sé qué famoso sueco o noruego) y añade: “No es que yo esté libre de culpa. Miro de soslayo y con remordimiento el grosor de unos cuantos de los libros que he escrito. A veces estoy haciendo una de esas lecturas públicas que son frecuentes fuera de España y me salto sobre la marcha frases enteras para terminar antes”.
            Exactamente, lo que hice yo con La noche de los tiempos y aún así no fui capaz de terminarla, a pesar de lo mucho que me interesa la época evocada y lo que me seduce, desde que lo leí por primera vez en El robinsón urbano, el estilo envolvente del escritor.
            Los lectores, los lectores de literatura culta, son un poco masoquistas, me temo. Si no les cuesta terminar un libro, tienen la impresión de que lo que leen no es literatura seria sino simple entretenimiento.



Martes, 9 de octubre
AMISTAD RECOBRADA

Estoy acostumbrado a perder amigos (azares de la vida literaria); no estoy tan acostumbrado a recuperarlos. Por eso –después de un áspero intercambio de palabras en la realidad real y en la virtual– me alegra tanto recibir, generosamente dedicado, el libro de Andrés Trapiello sobre El Rastro, el libro de una vida.
            ¿Durará mucho esta recobrada amistad? Si algo he aprendido de mi relación con los escritores, es que durará hasta la próxima reseña en que los reparos abulten más que los elogios. Ni un minuto menos, pero también ni un minuto más.


Miércoles, 10 de octubre
SOLEDAD SIN SOLEDAD

Recuerdo a menudo, aunque no sé si en su literalidad, aquella cita apócrifa de Santa Teresa que Truman Capote coloca al frente de Plegarias atendidas: “Hay que tener cuidado con lo que se desea porque a veces los deseos acaban realizándose”.
            Pero algunos de mis sueños se han hecho realidad y no me han defraudado: siguen siendo tan hermosos como cuando eran solo un sueño.
            Sigo viviendo solo, que es como me gusta vivir, pero ya no vivo solo, que es lo que siempre he deseado.
            ¿He sido el arquitecto de mi propio destino, como en el poema de Amado Nervo? Digamos que he tratado de jugar de la mejor manera posible con las cartas –unas buenas y otras menos buenas– que el destino me puso en las manos. Y que he ganado alguna que otra partida. Hoy sonrío feliz.


Jueves, 11 de octubre
UN HOMENAJE

En el XL Semanal del pasado domingo, leo un reportaje de Juan Manuel de Prada sobre los “negros” de los escritores, un tema con cierto morbo. Muchos libros se escriben en colaboración y quien firma es solo quien más ayuda a vender. A veces, el protagonista, como en las memorias de José María Aznar, Belén Esteban o James Costos. Resulta algo admitido socialmente, como que los discursos de los políticos no los escriban los políticos.
            En literatura, se admite menos, aunque está claro que el autor de bien documentadas novelas históricas no hubiera podido haberlas escrito sin un equipo que le ayuda en la investigación. ¿Y qué tiene de extraño que Cela contara con la ayuda de lexicógrafos para su Diccionario secreto? Pero en la portada debe figurar solo su nombre, que es el que vende.
            Juan Manuel de Prada, a propósito de la relación entre Gregorio Martínez Sierra y su mujer María Lejárraga, escribe: “La historia, sin duda, es turbia, con sus dosis de sacrificio heroico, sórdida morbosidad, resignación callada y monstruosa avaricia”. El bueno de Prada, siempre tan desaforado. Fue solo un acuerdo voluntario de colaboración: a María Lejárraga le gustaba escribir teatro, pero odiaba el mundo del teatro; su marido era un director teatral con talento de empresario. La colaboración beneficiaba a los dos: él era agente, relaciones públicas, quien se ocupaba de que las obras se estrenaran y fueran un éxito. Sin Gregorio Martínez Sierra, su esposa María es muy probable que no hubiera podido vivir de la literatura. El caso es extraño, ciertamente, pero la colaboración funcionaba tan bien que a ninguno le interesó romperla cuando el matrimonio dejó de funcionar.
            Los problemas de plagio tienen también mucho morbo, sobre todo cuando se convierten en armas arrojadizas para desacreditar a alguien. Pero la gran literatura siempre ha utilizado materiales ajenos, no sería verdaderamente grande si no se alimentara de la literatura anterior. Los ladrillos con los que se construye una obra propia no siempre son propios. En arte, apropiarse de lo ajeno para hacer algo distinto es muy habitual. Otra cosa es que, si la obra produce dinero, esté debe repartirse equitativamente entre todos los que han colaborado, aunque sea involuntaria y mínimamente, en ella.
            A mí siempre me ha gustado incluir en lo que escribo fragmentos de otros autores, unas veces indicándolo y otras no, unas veces dándoles la vuelta y otras copiándolos tal cual. Siempre recuerdo que José Camón Aznar, acusando recibo de mi primer libro, Marineros perdidos en los puertos, lo elogiaba y decía que en él había versos dignos del mejor Góngora. El verso que citaba para ejemplificarlo era, efectivamente, de Góngora. Yo lo había incluido entre los míos sin subrayarlo, como era bastante frecuente en aquellos años novísimos.
            Si yo fuera ministro, cómo iba a disfrutar el periodismo cavernario encontrándome plagios, material ajeno reciclado con y sin comillas. Pero nunca seré ministro y nunca interesarán a nadie mis triquiñuelas literarias. La intertextualidad en la obra literaria de José Luis García Martín podría ser el título de una tesis doctoral de más de mil páginas. Hasta mis confesiones más íntimas a veces están copiadas de un poeta chino o de François Mauriac.
            Si yo entremezclo en mis textos tantos textos ajenos es para dar trabajo a los eruditos del futuro, pero me temo que ellos tendrán otras cosas en qué ocuparse. Una frustración más que añadir a mi currículum. Como la de que a nadie se le ocurra plagiarme, ahora que la actividad está tan de modo. En cuarenta años que llevo publicando, solo una vez lo hicieron y encima tuvieron la amabilidad de pedirme antes permiso. Allá por 1977 o 78. me llamó Fernando Ortiz, a quien había enviado mi tesina de licenciatura, y me dijo: “Me acaban de pedir de La Estafeta Literaria un artículo de conjunto sobre la poesía de Caballero Bonald; lo piden con cierta urgencia y ahora no tengo tiempo de hacerlo. ¿Te importa que arregle un poco las páginas que tú le dedicas? Es más o menos lo que yo pienso”.  “Encantado. Un honor”, respondí de inmediato, aunque la tesina, que sirvió de base para mi tesis doctoral, estaba inédita. Un homenaje semejante no se ha vuelto a repetir.


Viernes, 12 de octubre
DESDÉN

No debería decirlo, pero ya se sabe que me paso la vida diciendo cosas que no debería decir. Yo siempre he despreciado un poco a los escritores profesionales, a los que se presentan a premios o becas, a los que publican un libro y han de ir vendiéndolo, como los charlatanes de feria, de librería en librería o de centro comercial en centro comercial.
            ¿De dónde le viene al niño menesteroso que fui ese aristocrático desdén? Para mí, la literatura es un regalo que la humanidad se hace a sí misma a través de los escritores, no tiene precio, no puede ser un medio de vida. Ya sé que eso vale sobre todo para la poesía; no para la novela, que cuando es de género –Falcós, Templarios o Catedrales del Mar– puede ser un oficio como otro cualquiera.
            También yo, involuntariamente, he ganado un poco de dinero con la literatura, pero siempre he creído que mi obligación era devolvérselo de inmediato.



50 comentarios:

  1. "Yo siempre he despreciado un poco a los escritores profesionales, a los que se presentan a premios o becas, a los que publican un libro y han de ir vendiéndolo, como los charlatanes de feria, de librería en librería o de centro comercial en centro comercial".
    Aparte de que "desprecio" es palabra un poco fuerte, ése, desde luego, no es mi caso. Para mí, básicamente, sólo existen dos especies de escritores: los buenos y los malos, los que escriben bien y los que no. Lo otro me parece muchísimo menos importante, y creo que tiene más que ver con la persona que con lo que escribe. Son dos cosas distintas.
    Hay estimabilísimas personas que escriben muy mal, y personas nada estimables que, en cambio, lo hacen muy bien. Cuando eso ocurre, pienso que lo sensato es estimar lo que tienen de estimable: a la persona, cuando es ella lo que de veras vale, y a su escritura, cuando eso es lo que hacen bien. Y a ambas, cuando en raros casos las dos valen la pena. Lo demás..., bueno, todos somos humanos.
    (También, claro, supone esto no festejar como gran persona a quien no lo es, por muy encumbrado que sea, ni como gran escritor a quien es todo lo contrario, aunque se lo exalte públicamente mucho. Para eso hace falta cierto valor, desde luego. Y no es fácil a veces. Pero así debiera ser).

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  2. Ese sentimiento de desdén es inexplicable, incluso para mí y lo digo como un hecho, no como algo de lo que vanagloriarse.

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  3. Felipe Benítez Reyes14 de octubre de 2018, 16:07

    "La literatura no puede ser un medio de vida". ¿Seguro? ¿Un profesor de literatura no vive de la literatura? (A no ser que se considere, como parece ser el caso, que resulta digno vivir de la literatura ajena y que resulta indigno vivir de la propia.)

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  4. No te sientas por aludido, amigo Felipe. Lo mío no es un juicio, sino un prejuicio que no sé de dónde me viene. Yo lo primero que pienso al encontrarme con un poeta lleno de premios es que se trata de un mal poeta. Pero de inmediato pienso en ti y sé que se puede ser un buen poeta (un gran poeta) y estar lleno de premios. Lo mismo me pasa con los poetas que son muy buenos intérpretes de sus versos en el escenario, que de primera me parecen unos farsantes. Luego veo que en eso pasa como con todo, que hay poetas que casi pueden considerarse figuras del espectáculo y son buenos poetas. Y que otros, como Cernuda o yo, leen espectacularmente mal y eso no quiere decir que sean buenos poetas (lo digo por mí, claro, no por Cernuda).

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  5. "Si yo entremezclo en mis textos tantos textos ajenos es para dar trabajo a los eruditos del futuro".
    Joyce dijo en una conversación con Augustus John que sus libros, especialmente "Ulysses" y Finnegans Wake", los había escrito para tener ocupados a los críticos durante los próximos trescientos años.
    Supongo que bromeaba pero muy en serio.

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  6. Él los tiene ocupados, yo me imagino que me quedaré con las ganas.

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  7. La cita de Capote es más bien algo como "Se derraman más lágrimas por las plegarias atendidas que por las que no son atendidas".

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  8. ¿Con las ganas? Hasta ahora no parece que tengas muchas ganas de estar trecientos años ocupado con "Ulysses". Pedírtelo sería como pedirte que hagas una crítica de... Bueno, nada. En cuanto a escritores que escriben para vender y son buenos, hay, y muy buenos, en la historia de la literatura.

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  9. Yo me quedaré con las ganas de que los eruditos estén trescientos años ocupándose de mí. Ese el sentido de mi comentario, Jesús.

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  10. Los eruditos no sé, a lo mejor te cogen rabia. Pero aquí se está hablando de los críticos. Cosa diferente. Pero no creo yo que tú vayas a ser poeta olvidado (los críticos hablarán de ti y de Roger Wolfe), ni crítico no criticado, ni narrador pasajero. Me temo.

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  11. Pues la verdad, amigo Jesús, por una vez, y sin que sirva de precedente, me gustaría que quien tuviera razón fueras tú y no yo.

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    1. Como mínimo un par de generaciones. Quiero decir, hasta la de los que serían tus nietos, si tuvieras, que hoy tienen tres o cuatro años o que están a punto de nacer. Es lo habitual en un poeta de cierto alcance. Después, supongo que depende no sólo de cómo envejece la poesía, sino también un poco de la suerte. Quién sabe, a lo mejor te ayuda un futuro erudito independentista catalán al verte tan a favor de su derecho a decidir.

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    2. Para entonces, no será mérito. A nadie le cabrá en la cabeza que, en la España de 2018, hubiera gente capaz de aceptar que se pudiera meter a alguien en la cárcel por consultar a los ciudadanos de Cataluña cuál desearían que fuera su organización política.

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    3. Las cárceles están llenas de gente inocente que comete un error puntual. Cumplen condena y ya está. Por esos nadie arma tanto jaleo por su encarcelamiento. Pero lo de estos otros, como lo de cualquier politico preso, es muy distinto. No es un grupo de amigotes que hacen una gamberrada sin medir sus consecuencias. Sabían perfectamente lo que hacían y lo que les podía pasar por por ello. A mí no me dan ninguna lástima. Pero, si en el futuro va a ser como dices, ¿por qué no vas comprando ya unos tupper de plástico, a modo de urnas, para ir tanteando si los vecinos de Rivero quieren independizarse del resto de la villa? Porque digo yo que será así, que no sólo Cataluña tendrá ese privilegio. En fin, que igual estoy equivocado, pero prefiero releer tus poemas "lineas escritas hacia el final del verano" o "la mañana", que ahí te veo más fino que como analista de la actualidad. Un abrazo!

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    4. Curiosa la tendencia de JLGM, que siempre (lúcidamente) advierte contra la creencia de que la posteridad "hará justicia" a aquel escritor al que en vida se le hizo poco caso, a no dudar sin embargo de que ese mismo futuro confirmará sin reservas, y sin remedio, sus convicciones políticas.
      No se da cuenta de que no es menos peculiar el escritor que confía a ciegas en la confirmación del futuro que el analista político que hace lo mismo, ni de que, en esto como en todo, la inteligencia crítica comienza por ser inteligencia autocrítica.
      EL FUTURO ME AMA, podría decir en su pancarta (y añadir debajo: "y ay de él si no lo hace"). Pues eso.

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    5. No espero que el futuro confirme mis convicciones políticas, sí mis convicciones de otro tipo: la igualdad de hombres y mujeres, la abolición de la esclavitud, la desaparición del apartheid, la no discriminación racial, el derecho de los ciudadanos de un país democrático a decidir libremente su futuro político... La humanidad camina en este sentido y, aunque pueda haber marcha atrás, confío en que siempre serán puntuales. Yo lucharé porque no las haya.(Por cierto, creo que Amnistía Internacional ya ha dicho algo distinto de lo que citas sobre ciertos presos españoles.)
      Adolfo, no te creas todo lo que te cuentan. Los encarcelados por el 1-O es dudoso que hayan cometido algún delito (todavía no han sido juzgados y condenados por ninguno), pero de lo que no hay duda es de que no han cometido el principal delito del que se los acusa (todos los juristas de fuera de España y muchos de dentro están de acuerdo en ello), el de rebelión. De hecho, el juez Llarena se las ve y se las desea para convencer a alguien (que no no sea él mismo y los jueces patrióticos del Supremo) de que lo han cometido. Veremos qué ocurre en el juicio, cuando por fin se celebre. De momento, solo están en prisión por la decisión personal y dudosamente justificada de un juez, que en lugar de aplicar el dicho clásico de "in dubio, pro reo" prefiere aplicar el de "in dubio, pro patria".

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    6. Martín: el juez es él, no tú ni yo, que parece que cualquiera puede serlo sin necesidad de opositar. Y no, no creo por norma lo que me cuenta nadie. Creo lo que veo y a veces ni eso, porque hay cosas que no son lo que parecen y, tras lo que vemos, hay otras cosas que a menudo no se ven. Lo que yo te comento -y es una observación personal que no oí en ninguna parte- es que, más allá de leyes y delitos concretos, esta gente no es inocente como lo son unos chicos de veinte años que una noche se pelean, por haber bebido más de la cuenta, o por haberse drogado, y dejan a otro cojo o medio ciego. Eso es un delito, en efecto, por el que deben pagar, pero lo cometieron en parte por ser unos inconscientes. Y en cambio son esos, los que cometen un error puntual, los que más posibilidades tienen de reinsertarse. En cambio, los políticos presos y los delincuentes habituales... Pero esto es una interpretación mía del concepto de inocencia, no del ordenamiento jurídico. Y no voy a intentar, en fin, convencerte de nada, que me parece muy bien que te mantengas en tu opinión. Y ojalá la humanidad, como auguras, camine en ese sentido que apuntas a José (sin olvidarse, añado, de cuidar el planeta).
      Y respondiendo a José: la advertencia de Martín acerca de la creencia en la posteridad está muy bien, pero me parece susceptible de apostillas varias. Cualquier escritor mediano, digamos correcto, puede recibir mucha atención en vida si es eso lo que quiere. Más aún hoy en día, pese a la gran cantidad de escritores que hay: le basta crearse una página web, estar en las redes sociales, relacionarse bien, hacer y recibir favores, etc, etc,etc. Pero, como no ha escrito un nuevo don quijote, en la posteridad no será tan atendido como acaso se piense ingenuamente. Entre los que prefieren estar más al margen, seguro que más de uno aspira a pasar medio desapercibido en vida y a ser, sin embargo, muy famoso después. Entiendo que la advertencia de Martín es sobre todo para estos. Pero hay alguno que lo consigue (se me ocurren cavafis o pessoa) y es muy respetable soñar con ello, porque al artista le gusta tanto la vida que quiere eternizarse en ella. Es nnaturalque sueñe con la posteridad, aunque en vista de que a cada nueva generación le interesa, más que ninguna otra, la inmediatamente anterior, lo natural es que la mayor parte de poetas vayan cayendo en el olvido, y lo más razonable por tanto parece ser apostar por un sueño modesto: si de un poeta contemporáneo, en cuatro o cinco siglos, se recuerda uno solo de sus poemas, como hoy recordamos nosotros "la cena", de baltasar de alcázar, bastante habrá triunfado, ¿no?

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    7. Efectivamente, Amnistía Internacional ha dicho que:
      1) "pudo documentar que tanto miembros de la Policía Nacional (Unidad de Intervención Policial) como agentes de la Guardia Civil emplearon un uso excesivo de la fuerza contra manifestantes pacíficos, e hicieron uso inadecuado de material antidisturbios como pelotas de goma o sustancias químicas irritantes contra personas que hacían resistencia pacífica".
      Pero añade luego que "todo ello en el contexto de una operación LEGÍTIMA [subrayado mío] para cumplir la orden del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña cuyo objetivo era impedir la celebración del referéndum del 1 de octubre en Cataluña (1-O).
      Y sigue diciendo: "Por otra parte, la actuación de las fuerzas de seguridad fue en ocasiones claramente obstaculizada. Según datos del Ministerio de Interior, a 9 de marzo de 2018, 58 agentes de la Policía Nacional y 37 agentes de la Guardia Civil habrían resultado heridos como consecuencia de esos impedimentos, y la organización ha podido visionar imágenes que muestran actitudes violentas por parte de manifestantes contra agentes".
      Por supuesto, los medios independentistas destacan lo que dice mi primer párrafo; de lo restante, prefieren olvidarse. Memoria selectiva, que se llama.
      2) Dice también, respeto a "los Jordis", que "En caso de demostrarse que convocaron a manifestantes con el fin de impedir una operación policial lícita, esto podría ser objeto de sanción penal. No obstante, la presentación de cargos contra Jordi Sànchez y Jordi Cuixart por delitos graves como la rebelión o sedición, y su prisión provisional, constituyen restricciones excesivas de su derecho a la libertad de expresión y de reunión pacífica. Por esta razón Amnistía Internacional pide que Jordi Sànchez y Jordi Cuixart sean puestos en libertad y que se retiren los cargos de rebelión o sedición".
      Pero sigue luego: "Ante la posible comisión de un delito de orden público, Amnistía Internacional no les ha identificado como presos de conciencia*. La organización seguirá observando las actuaciones penales y estudiará las pruebas presentadas contra ellos".
      Vale el comentario para el primer párrafo.
      (sigue)

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    8. Por otra parte, sigue diciendo que:
      3) "Los actos cometidos por los altos cargos catalanes en el ejercicio de sus funciones oficiales para celebrar un referéndum ilegal no estaban protegidos ni por el derecho a la libertad de expresión ni por ningún otro derecho humano establecido en el derecho internacional".
      Y añade aún: "Si bien Amnistía Internacional reconoce que los consejeros y parlamentarios catalanes podrían haber cometido un delito legítimamente enjuiciable, la organización recuerda que los tribunales deben garantizar que las facultades discrecionales de enjuiciamiento no se ejercen de forma arbitraria o injustificada, y seguirá haciendo seguimiento del proceso para evaluar si hay juicio justo, y se cumplen las garantías del debido proceso.
      Amnistía Internacional no ha calificado a los altos cargos catalanes en prisión de presos o presas de conciencia*, pues la organización utiliza tal expresión únicamente para las personas que no deberían ser castigadas en modo alguno pero están privadas de libertad sólo por el ejercicio de sus derechos humanos (o por ciertos elementos de su identidad) y, por tanto, no han hecho nada que pueda interpretarse legítimamente como delito.
      Amnistía Internacional no se pronuncia sobre la actual situación de prisión provisional de los seis exconsejeros del gobierno catalán y de la expresidenta de la Mesa del Parlamento", si bien AI "observará atentamente todas las actuaciones penales sobre este caso para evaluar si se respetan plenamente el derecho a un juicio con las debidas garantías y el derecho a la libertad".
      En resumen: 1) Los presos en cudestión NO SON PRESOS POLÍTICOS, según AI. 2) Si bien hubo violencia excesiva el 1-O contra quienes pretendían votar, también la hubo contra la policía. 3) "Los Jordis" llevan demasiado tiempo en prisión, a tenor de aquello de lo que les acusa (no así los demás), por lo que se pide su inmediata puesta en libertad.
      Yo más bien veo todo esto como un nuevo palo a las afirmaciones independentistas. (Sus tesis principales son ahí claramente desmentidas). Pero allá cada cual con sus ideas (o sus prejuicios).
      El comunicado de AI: https://www.es.amnesty.org/en-que-estamos/noticias/noticia/articulo/actualizacion-de-la-situacion-en-cataluna/

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    9. Por si alguien no quiere tomarse el trabajo de leer mis dos notas anteriores, ya que son largas, resumo aquí lo que realmente ha dicho Amnistía Internacional (y cualquiera puede comprobar, en dichas notas o en el enlace, si mi resumen es fiel):
      1) La actuación policial el 1-O fue LEGÍTIMA en sí misma, aunque
      2) hubo excesos en dicha actuación, como también hubo obstaculización de ella (recuerdo: LEGÍTIMA en sí misma), y violencia, por la otra parte.
      3) Los políticos catalanes en prisión NO SON PRESOS POLÍTICOS, ya que están en prisión no por sus ideas, sino por sus actos; actos que, según la propia AI, fueron "ultra vires", es decir, desbordando claramente sus "fuerzas, competencia o autoridad", y en consecuencia, ILEGÍTIMOS, y "posiblemente [quien ha de decidir sobre ello son los tribunales] constituyeron delito.
      4) Debido a ello, dichos actos de "los altos cargos catalanes que participaron en la organización del referéndum del 1-O y en la posterior declaración de independencia el 27 de octubre" (referéndum que la propia AI califica de "ilegal") "no estaban protegidos ni por el derecho a la libertad de expresión ni por ningún otro derecho humano establecido en el derecho internacional".
      Y, por todo ello, AI 5) nada tiene que decir "sobre la actual situación de prisión provisional de los seis exconsejeros del gobierno catalán y de la expresidenta de la Mesa del Parlamento", que es competencia de los jueces espaoles y en nada contraviene ningún "derecho humano establecido en el derecho internacional".
      AI sí censura la prolongación de la prisión provisional ÚNICAMENTE en el caso de "los Jordis", esto es, Jordi Sánchez y Jordi Cuixart, presidentes respectivamente de la Asamblea Nacional Catalana (ANC) y Òmnium Cultural, por entender que los delitos de que están acusados no basta para justificarla. En consecuencia, pide que ambos (y sólo ellos) "sean puestos en libertad y que se retiren los cargos de rebelión o sedición".
      Y una última observación, ésta mía. La razón de la larga permanencia de todos ellos en prisión provisional tiene que ver fundamentalmente con las sucesivas recusaciones presentadas contra quienes han de juzgarles por las defensas de los procesados, y el tiempo necesario para investigarlas y resolverlas. Sin eso, el juicio habría podido celebrarse hace ya tiempo.

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    10. Sobran tantas precisiones. Dos personas al menos están en la cárcel y no deberían estar en ella. Esa es la opinión de Amnistía internacional. El que los llame de una manera o de otra es una tontería que no viene a cuento. En España hay presos injustamente encarcelados por razones políticas y sin ninguna condena en firme. Dice Jose que el juicio se retrasa por culpa de la defensa de los acusados. Pudiera ser. Pero ese juicio los acusados deberían esperarlo en su casa, no en la cárcel. A Jose no se le cae la cara de vergüenza al defender que estén encarceladas personas que, según Amnistía Internacional, deberían estar en la calle, y eso no en Turquía ni en Arabia Saudí (ni por supuesto en Venezuela) sino en la "democrática" España. A mí, sí. Y le recuerdo que Amnistía Internacional, si no quiere tener problemas, debe andar con muchas cautelas al enjuiciar la actuación de un país en relación con los derechos humanos. Aquí no se trata de distintas opiniones políticas, sino de diferente sentido de la justicia. Yo soy de los que prefieren a un culpable en la calle antes que a un inocente preso. "In dubio, pro reo" se decía antes, ahora se ha convertido en un "In dubio, pro patria". Yo no polemizo con Jose. Le dejo dar razones para justificar lo injustificable: que haya políticos españoles en la cárcel por hacer política (y sin que ningún tribunal les haya probado todavía ningún delito o infracción administrativa que conlleve cárcel).

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    11. Ya digo: es inútil.
      Señalar sólo que, según AI, "los Jordis", como ya lo expliqué, NO están en la cárcel por "hacer política", como afirma JLGM que dicen, sino por la "posible comisión de un delito", como cualquier delincuente.
      Y que, de nuevo según AI, ES FALSO no sólo que ellos, sino que todos los demás, sean "presos políticos".
      Y que, también según ellos, la actuación policial el 1-O fue LEGÍTIMA.
      Pero todo eso son "tonterías que no vienen a cuento". Qué le vamos a hacer.
      Y, si AI las dice, es sólo por miedo. Que en los regímemens dictatoriales más represivos, o en el franquismo, AI denunciaba abiertamente lo que le parecía que debía ser denunciado; pero ahora la situación de España es tal, que lo que resulta posible con respecto a China o Corea del Norte (o a Venezuela, sistemáticamente denunciada por ellos por violaciones infinitamente más graves de los DDHH, incluyendo torturas y asesinatos), no lo es en España, donde AI no puede decir la verdad por miedo a represalias.
      Y, si uno no acepta todo eso, debería "caérsele la cara de vergüenza".
      Pues vaya. Lo dicho: dejémoslo. Es manifiestamente inútil.

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    12. Ningún delincuente está en la cárcel "por la posible comisión de un delito", sino por la comisión de un delito después de haber sido adecuadamente juzgado con todas las garantías y sin que quepan dudas razonables (incluso puede apelar y hasta que no haya sentencia firme no entra en la cárcel).
      ¿Cómo razonar con quién no entiende esto? Los presos catalanes pudieran haber cometido algún delito de desórdenes públicos, según Amnistía, pero son delitos que raramente conllevan cárcel. En fin, que quien busca excusas para justificar la no muy justificada privación de libertad de una persona (la más grave condena que se le pueda hacer a alguien) tiene un problema a mi entender de sensibilidad moral, más grave que los que afectan a la manera de razonar. Y aquí yo sí que termino. Dejo a quien quiera la última palabra, que puede ser la última pero no por eso es siempre la más razonada.

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    13. Copio aquí lo que en nuestro ordenamiento jurídico se dispone acerca de la prisión provisional:
      “El ingreso de una persona en prisión, en calidad de detenida, presa o penada, se puede efectuar mediante orden judicial de detención; mandamiento de prisión; sentencia firme de la autoridad judicial competente; detención por orden de la policía judicial, detención acordada por el Ministerio Fiscal o por presentación voluntaria”.
      En consecuencia, lo que dice JLGM NO ES CIERTO. Para ingresar en prisión NO SE REQUIERE IMPRESCINDIBLEMENTE JUICIO PREVIO, que muchas veces no sería posible por distintas causas. De hecho, no es infrecuente que un preso lo esté a la espera de juicio.
      Es lo que se llama “prisión provisional”, regulada en todos los ordenamientos democráticos. En la UE, en particular, existen regulaciones generales que marcan límites y condiciones para la prisión provisional, a los que deben acomodarse los ordenamientos jurídicos nacionales.
      Por eso, porque la prisión provisional NO ES EN SÍ MISMA ALGO ILEGAL, en contra de lo que afirma JLGM, Amnistía Internacional no denuncia dicha situación en el caso de los políticos catalanes presos (sólo la que entiende no justificada en el caso concreto de “los Jordis”), y por eso AI, no yo, dice (copio literalmente lo que ya citaba en el punto 5 de mi nota de 17 de octubre, a las 20.28) que ‘nada tiene que decir "sobre la actual situación de prisión provisional de los seis exconsejeros del gobierno catalán y de la expresidenta de la Mesa del Parlamento", que es competencia de los jueces españoles y en nada contraviene ningún "derecho humano establecido en el derecho internacional".
      El presunto problema de “sensibilidad moral” de que habla JLGM (como suele y como ya se ve, respetuosísimo con quien le contradiga) afectaría por tanto a la propia Amnistía Internacional, que acepta sin protesta dicha situación “de los seis exconsejeros del gobierno catalán y de la expresidenta de la Mesa del Parlamento", tal como se ve en su escrito, además de a la Comisión Europea (“En el caso de España, la Comisión Europea no tiene críticas sobre el funcionamiento del Estado de derecho, la democracia, ni la aplicación de los derechos humanos”, palabras que ya he citado varias veces y dichas en febrero de este año, cuando los detenidos lo estaban en su mayoría desde noviembre del anterior) o al Consejo de Europa (“El Consejo de Europa ha apoyado plenamente el enfoque del Gobierno español en lo que se refiere a la cuestión catalana. Somos defensores del orden constitucional en nuestros países miembros”, palabras de su Secretario General el mes pasado, reforzadas con estas otras: "No tengo ninguna duda de que los tribunales españoles están tratando este asunto de acuerdo a la ley y al Convenio Europeo de Derechos Humanos").
      Pero nada de eso importa. JLGM piensa de otra manera, y por tanto quienes no estén de acuerdo con él (ya sé que me repito; qué le voy a hacer yo) no es que discrepen legítimamente de él (tal cosa no es posible), sino que tienen un grave problema de “sensibilidad moral”, y debería caérsenos “la cara de vergüenza”.
      Como, a pesar de ello y por lo que yo sé, las caras de los miembros de AI o los organismos europeos, lo mismo que la mía, siguen en su sitio, es indudable que carecemos de sensibilidad moral, lo mismo que de vergüenza. Que de eso, sólo los que piensen como él, esto es, de la Única Manera en que se puede pensar (¿de qué me suena a mí eso del “pensamiento único”?).
      Pues eso: dejémoslo.

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    14. Creo que esta vez te han pillado. El informe de AI, órgano de referencia en lo que se refiere a derechos humanos, es demoledor. Pero tú sigues y sigues, y vuelves a recurrir a las descalificaciones personales cuando no tienes otra salida. Y además ignoras cosas básicas: sí, hay delincuentes que están en la cárcel "por la posible comisión de un delito". Entérate del código penal de tu país. Se llama prisión preventiva, independientemente del caso catalán. La decide el juez. ¿Pero cómo razonar con quien no entiende cosas básicas? Y otra mentira que no debes decir: eso de que dejarás que otro diga la última palabra. Jamás lo has hecho y no lo harás ahora.

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    15. Vaya, señor Jose, ahora resulta que me explica lo que es la prisión preventiva. ¿Realmente creía que yo ignoro que existe la prisión preventiva? Pero debe estar muy tasada, muy limitada: solo en ciertos casos y debe ser sustituida por la libertad condicional, con o sin fianza, en cuanto no hay riesgo de fuga o de destrucción de pruebas o posibilidad de reiteración delictiva. No debe mantenerse más de lo imprescindible, la persona encarcelada puede ser inocente y no hay manera de devolverle esos días que pasó en prisión. En este caso, un año ya. No hay razón para que los presos políticos catalanes, o los españoles presos por motivos políticos (llámalos como quieras) sigan en prisión. Basta que el juez lo decida para que estén en la calle esperando juicio. ¿No entiendes que esta segunda opción es la que exige la recta interpretación de la ley, que lo contrario es un acto de venganza --aunque con cobertura "legal", por supuesto-- y no de justicia? Pues no entiendes nada de lo que aquí se trata, hijo mío.

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    16. No, no lo haré ahora. Pero solo para aclarar, también a don José Luis Piquero, que yo no ignoro que exista la prisión preventiva. ¿Alguien ha podido pensar otra cosa? Y según mis noticias Amnistía Internacional ha declarado que los Jordis no deberían estar en prisión. A lo mejor hemos leído un informe diferente. Pero este que yo digo es el último. Todos los demás tiquismiquis sobran. Lo suyo ha dejado de ser preisión preventiva para convertirse en prisión vengativa. El juicio, hasta la condena en firme (véase Iñaki, véase Rato) hay que esperarlo en libertad, con o sin fianza. Esa es la justa aplicación de la justicia, garantista. Esa es la justicia española en general. Pero con los independentista, para vergüenza de todos los españoles de bien (entre los que me incluyo) parece haberse vuelto retorcidamente vengativa, según demostrarán instancias superiores, Estrabusgo o La Haya. Pero eso lleva su tiempo. Y esta si es mi última palabra, que quiero que quede aquí para la historia: ¡Libertad para los presos políticos, sean venezolanos, turcos o españoles!

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    17. Voy a escribir una última respuesta, aunque sólo sea para comprobar que no dices la última palabra, que los milagros existen. Y para matizar que, efectivamente, AI cree que los Jordis (sólo ellos dos) deberían estar libres. Mucha gente lo pensamos, incluso algunos ministros. Pero es una decisión judicial que, compartible o no, se ajusta a derecho. Como sabes, uno de los motivos para aplicar la prisión preventiva es el riesgo de fuga. En el caso catalán me parece que es un riesgo muy evidente. En todo lo demás, AI no te da la razón y es muy clara. Y en fin, ese alarido final sobraba. Esta muy bien para acabar un acto y que la gente aplauda a rabiar, pero gritar eslóganes no da más razón. Ni se pasa a la historia, como pretendes, por grito más grito menos. Un abrazo, señor Última Palabra.

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    18. Basta que una persona (piensa en Dreyfus, que conmocionó a Europa) que debe estar libre esté en la cárcel para que toda persona de bien haga todo lo posible por conseguir su liberación.
      Te recuerdo que los independentistas catalanes (como los nacionalistas españoles) son de muy diversa clase (en el caso de los nacionalistas españoles unos votan a Vox, otros al PP, otros a Ciudadanos, otros a IU --al menos uno--, otros al PSOE) y no se les puede juzgar a todos de un plumazo. Unos independentistas se fueron a Bélgica (la capital de la Unión Europea, con tratado de extradicción con España, meduda huida: están a disposición de la justicia) y otros se presentaron ante el juez, confiando ilusos en la justicia española. Culpar a los segundos de las decisiones de los primeros, cuando en algún caso son de partidos opuestos --derechas, izquierda-- me parece un inadecuado razonamiento lógico o un simple acto de mala fe.
      En España, hay presos que deberían estar en la calle. En Turquía también (y en otros países). En un caso y otro lo están por decisión de un juez.
      Por cierto, lo que está haciendo Turquía para esclarecer el asesinato de un periodista no sé si podría hacer en España sin que los trabajadores andaluces de no sé qué astillero se pusieran en huelga por miedo a perder su trabajo al molestar a Arabia Saudí (es lo que hicieron, o amenazaron hacer, cuando las bombas contra yemeníes).

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    19. Por alusiones:
      Dice textualmente JLGM, como puede verse más arriba (nota del 18-10, a las 12.35):
      "Ningún delincuente está en la cárcel "por la posible comisión de un delito", sino por la comisión de un delito después de haber sido adecuadamente juzgado con todas las garantías y sin que quepan dudas razonables (incluso puede apelar y hasta que no haya sentencia firme no entra en la cárcel).
      ¿Cómo razonar con quién no entiende esto?".
      Yo le demuestro que eso NO ES CIERTO. Hay, en España como en cualquier país democrático, personas que están en la cárcel sin haber sido previamente juzgadas y condenadas: es lo que se llama prisión preventiva.
      Y él, que repite tantas veces que está sumamente dispuesto a rectificar si se le muestra que está equivocado (es más, lo agradece), no sólo no lo hace, sino que prefiere ironizar sobre lo extraño que le resulta el que uno pueda creer que piensa lo que dice, o quizá que dice lo que piensa.
      Por mi parte, ni una palabra más.

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  12. Se habla aqui de críticos, de literatura y de premios, mientras todavía nos rascan la memoria las vergüenzas de los másteres y las tesis. Qué decir entoces de que la hija de Sánchez Dragó haya sido finalista en el Planeta con su primera novela? Será él uno de los muchos a los que se les llena la boca hablando de Hetica? No os perdáis el próximo episodio titulado "Nada tiene que ver una cosa con otra".

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  13. En una comida del jurado de los premios Príncipe de Asturias, se habló de que había que premiar a Marsé, el mejor novelista español, que sin embargo no tenía ningún premio.
    --Tiene el Planeta, dijo uno de los comensales.
    --Pero eso, más que un galardón, es un baldón, respondí yo de inmediato.
    Las miradas asesinas de los que se sentaban a mi lado me hicieron comprender de inmediato que mi gracia no les había hecho ninguna gracia. Y es que estaba sentado entre Fernando Sánchez Dragó y Fernando Delgado, ambos premio Planeta.
    Pero sigo pensando lo mismo: ese supuesto premio no significa más que el que los ejecutivos de la editorial creen que el "producto" galardonado se va a vender bien.

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    1. Naturalmente, Martín, pero lo grave es el fraude que han sufrido los más de seiscientos participantes por no tener apoyos. Hay que considerar que han sido utilizados como pobres comparsas haciéndoles soñar con la falacia.
      Gracias por su respuesta.

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    2. Los concursantes del Planeta hacen el ridículo y, si no lo saben, no es por culpa nuestra. Una y otra vez se ha dicho que se trata de una estrategia comercial, que la editorial selecciona las novelas que mejor pueden vender en cada temporada, que no se deja nada al hacer, que se piden a los autores correspondientes, etc, etc. A mí esos ingenuos concursantes no me merecen ningún respeto desde el punto de vista intelectual. Deberían leer un poco y saber a qué concurso presentarse y a cuál no. Editorial Planeta merecería que a su concurso no se presentaran más que los autores de la casa, obligados, para cubrir el expediente, aunque supieran que el ganador iba a ser otro. Pero siempre habrá ingenuos que permiten las trampas de los listos.

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    3. Hay que aceptar que muchos de los participantes, al ser extranjeros, desconocen los tejemanejes de los Lara.
      Y ahora le pregunto, sin la menor ironía, si hay en España un solo concurso literario limpio o esta vergüenza es común a muchos países. Son, entonces, tontos ingenuos, los cientos de aspirantes al Nadal, al Café Gijón y resto de atractivas golosinas?

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    4. El Planeta es el Planeta y Planeta no hay más que uno, aunque muchos intenten imitarle.
      Hay premios y hay promociones publicitarias que se hacen pasar por premios.

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  14. Miguel el Entrerriano16 de octubre de 2018, 10:26

    Pues yo más bien creo que ese menosprecio comparativo de las actividades crematísticas, comerciales, mercantiles, es una pervivencia del platonismo de la antigüedad clásica que impregna desde hace mucho la cultura occidental, tanto católica como protestante, y que puede rastrearse incluso en la vieja "hidalguía", pobre pero noble. La poesía, la literatura, la Iliada, el razonamiento, la Geometría de Euclides, son actividades "nobles" radicadas en la cabeza. Otras actividades relacionadas con el ardor guerrero y la valentía surgen del pecho, mientras que las funciones "bajas", las relacionadas con la manutención y el sustento, digamos con el morfar diario, se asientan en el vientre. Algo de esto pervive sutilmente en un subconsciente cultural bastante compartido, y convierte todavía en "un poco feo" que el creador literario tenga que descender a la condición de mercader o mercachifle. Entregarse al cambalache, ser pregonero o charlatán que intenta "colocar su producto". Y ya sabemos que no se puede esperar que el charlatán sea demasiado objetivo a la hora de evaluarlo. Ensalzará cualidades, será tolerante con los defectos; ya no es un creador, un escritor, es tan mercader como el vendedor de crecepelos. Incluso la sociedad actual, tan centrada en la economía, y en donde el más humilde peón, si juntó un poco de plata, aspira a comprar acciones, incluso nuestros ámbitos informados al minuto de la condición de los mercados, no fueron capaces de sacudirse aquel poso platónico.

    Naturalmente, Platón vive en una sociedad esclavista y habla como hombre libre allá donde los trabajos mecánicos y manuales son realizados por esclavos y rechazados por el ciudadano libre entregado, idealmente, al pensamiento y la creación, aparte de al ágora y a la participación en la "res publica", cuando no es soldado.

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    1. Bueno, no es mi caso. Mis actividades no mercantiles (como escribir poesía) me las financio yo mismo con otras actividades. No me pongo como ejemplo, hablo de que a mí me parece un poco ridículo que un poeta se pretenda ganar la vida con sus poemas, algo que por lo general nadie le ha pedido y de lo que hay exceso de oferta.

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  15. Miguel el Entrerriano18 de octubre de 2018, 10:35

    Parece mentira, Martín que, a pesar de las copiosas y prolijas murgas diarias que usted encaja, todavía no haya aprendido que no hay motivos para que a nadie se le caiga la cara de vergüenza por promover que se mantenga en la cárcel a independentistas acusados por delitos dudosos o inexistentes. ¿Acaso no sabe Martín que ya no hay desaprensivos, ni desalmados, ni filofascistas, sino sólo gente variada que profesa un amplio abanico de opiniones?

    Traía yo a Platón hace unos días, y viene a cuento ahora que vemos en este foro reiteradas pretensiones, (o parafraseando al vasco Aurelio Arteta: tantos tontos intentos) de disolver los conceptos morales en meras diferencias de opinión. Grandioso hallazgo, ya no habría malvados ni gente sin escrúpulos, sino que se trataría de disensiones entre honestos ciudadanos con pensamientos diferentes, todos respetables; en la misma tónica, el robo sería una disensión sobre el concepto de propiedad; ¿la pederastia?, zonceras!, mera diferencia de opiniones sobre la edad del consentimiento; la calumnia tan solo una discrepancia sobre los modos válidos de competir con el contrincante (tal como se ha visto a propósito de la tesis de Pedro Sánchez); la tortura de disidentes, el apaleamiento de multitudes, solo procedimientos extremos, pero defendibles, para que el Estado logre sus metas "democráticas", como en Guantánamo o en la Escuela Superior de Mecánica de la Armada, B.A.

    Hay que rehuir la terminología moral, Martín, no hay que menospreciar al menospreciable con duras descalificaciones. Es mucho más conveniente dejar la ética y centrarse sólo en la ley, y dentro de la miscelánea de las leyes, elegir aquellas que más convengan a los intereses del dios-Estado.

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  16. Pues, Miguel Entrerriano, sucede que quienes se alegran de que los presos políticos catalanes estén entre rejas desde hace un año, sin haber sido juzgados siquiera, no son demócratas en sentido estricto. Como lo oyes: no son demócratas que superen un test al respecto, según los parámetros vigentes en el mundo civilizado (España no acaba de caer de esa banda). Ni los Josés ni los Adolfos ni los Piqueros se puede decir de ellos que lo sean: flojean en conceptos que un demócrata genuino debiera tener claros y osan enredarse en una broza de posverdades y resabios propios del posfranquismo. Hay bastante de franquismo encriptado en su manera de razonar (ellos lo van a negar con vehemencia) y están literalmente incapacitados para discurrir como demócratas auténticos. Lo exasperante es la saña y el ahínco con que defienden sus jirones de verdad, sus trapos posverdaderos... Los lees y te pasma tanta osadía, tanta insensibilidad, tanta ignorancia. Y se da el caso de que algunos de ellos cuentan algo entre la nómina de los poetas. Y uno que yo me sé -púgil malcarado de las letras asturianas- hasta aparentaba afinidad con un partido de una izquierda que, seguramente, se cuidaría muy mucho de compartir en público la miseria ideológica de ese señor.
    Esto es España, Entrerriano; abandone la juez María Servini cualquier esperanza de hacerse con el pellejo de Martín Villa: esto es España.

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    1. Esto es España: cobardes que hablan sin dar la cara. Así siempre podrán cambiar de bando cuando les convenga. Mi desprecio.

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    2. F ( valentón sin mamandurria).20 de octubre de 2018, 9:25

      Pues, Piquero, has cambiado de bando y das la cara..., pero poco te ha cundido: sigues siendo feo (del cuore). Además, ponerte del lado de los de la porra y el escudo layetanos exige poca valentía. Para eso la mía, que llevó lazo amarillo
      viviendo (mal) entre patriotas como tú.
      Me cisco en ese modelo tuyo de valentía.

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  17. Cítanse aquí de todos los pelajes para tratar del Arte Literario, más por un extravío inexplicable terminan enredándose en política. Abusivo es el término, señores, pues a decir verdad la independencia viene a ser el tema insoslayable. Es para mí, por encima de todo, una sección de humor, por los engendros que prodigan algunos concursantes. Entre las muchas chispas y donaires, hay una, lo juro, que me priva, y que puede expresarse de este modo: "¿Y qué pasa, amigos libertarios, si un mal día elige independencia el remoto poblacho de Villalta de la Burra, perdido entre barbechos? Orgullosos, creen que han encontrado la nueva paradoja de Zenón, cuando es sólo su propia insensatez. A juego con la pérfida Tabarnia, lo he leído muchas veces y hoy lo agita un firmante que firma don Adolfo, un nombre sin duda promisorio.

    Tan sumisos estamos, españoles, amaestrados y más bien genuflexos a la idea del cacique y el caudillo que toma decisiones, no las masas, que pensar en Villalta decidiendo pasma al que lo ideó, lo deja atónito. ¿Qué les pasa, demócratas conversos? ¿No se fían, por ventura, de Villalta? Un respeto a los dignos villaltinos, y una dosis, también, de sensatez. Si un día deciden, en clara mayoría, plantar a aquel que fue hasta ayer su Estado, con las perturbaciones que acarrea, no será por capricho irresponsable, tal como presupone la desidia de algunos que se niegan a pensar. Sus motivos tendrán allá en Villalta; si ustedes no los saben entender, repitan curso, europeos frustrados, no busquen las razones en Villalta: busquen en sus cabezas averiadas.

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  18. Anónimo (Veneciano)19 de octubre de 2018, 10:30

    En el tema de las Naciones sin estado, ver como se dan la mano el neofranquismo de Jose y el postestalinismo de Piquero vale por toda una lección de Historia. Son cosas que no hay olvidar, pensando en el pasado y pensando en el futuro.

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  19. Solo si se diera la circunstancia de que los villaltinoburreños -proclamándose nación independiente- embalsaran las escuetas aguas del Arroyoverdillo -que brotan en un desmonte debajo de la ermita de san Acisclo, en la cereal Villalta de la Burra- y ello conllevara que los vecinos de Sajal de Moros y Escorial del Herejillo- malquistos de los naturales de este pueblo famoso por su esparto y sus pizarras- sufrieran consecuencias irreparables en sus campos ya de por sí resecos; solo en ese caso -digo- los villaltinoburreños habrían de renunciar a la ansiada autodeterminación, pues el daño infligido a sus vecinos pudiera ser irreparable. Aunque pudiera ser que existiesen recursos inexplorados, como las ayudas FEDER y demás organismos de la UE, que favorecieran los sondeos de improbables veneros de aguas subterráneas, y con ello la obtención de recursos hídricos que paliasen la dependencia de los de la hirsuta y sediciosa Villalta de la Burra. Pues, dado el caso de que se realizara esta última hipótesis y que de ella se derivara el hallazgo de agua suficiente, Villalta de la Burra contaría con legitimidad precisa para constituirse en nación soberana, con fronteras y moneda propias. El peaje que habrían de pagar a la nación circundante, por dejar pasar los furgones con pizarras y alpargatas, sería cosa de negociaciones que aventuro bastante encarnizadas. Pero eso es otro asunto que no toca el derecho de los pueblos a optar por la autodeterminación.

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  20. Me sobran un "pudiera" y un " irreparable". Me a anticipo al fuego enemigo, y así dolerá menos cuando caiga.

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  21. Respecto a esa Amistad Recobrada, con todos mis respetos por usted y la Amistad Recobrada, ándese con ojo, el personaje, la persona en cuestión, es, a mi manera de ver, muy voluble en casi todo, y mas si no se le es adulador en aquello que lo considera, especialmente en sus comportamientos digamos sociales/políticos y en sus quehaceres en su blog, en donde no permite comentarios que no ensalcen su persona y sus hechos. Y lo digo por experiencia. No es su caso, pues he leído por aquí comentarios no muy favorables a sus escritos. Un saludo.

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