domingo, 19 de abril de 2015

Nadie lo diría: Historias de palacio


Domingo, 12 de abril
CUESTIONARIO DE URGENCIA

––Un libro famoso que no ha leído ni tiene intención de leer.
            ––El Ulises de Joyce, como la mayoría de la gente.
            ––El autor que más le irrita.
            ––Dios mismo en algunos pasajes de la Biblia
            ––¿Qué frase se tatuaría si le obligaran?
            ––La más breve.
            ––Un ejemplo de belleza.
            ––Cualquier amanecer.
            ––Un ejemplo de elegancia.
            ––Cualquier gato.
            ––Un ejemplo de fealdad.
            ––Hay tantos que no se me ocurre ninguno en especial.
            ––¿En qué país le gustaría haber nacido?
            ––En España, Portugal, Italia. Por este orden.
            ––¿En qué país le gustaría morir?
            ––Prefiero no pensar en eso
            ––¿A qué político no daría nunca su voto?
            ––Hay tantos que se ofenderían los demás si solo nombro, por ejemplo, a Rosa Díez o Mariano Rajoy.
            ––¿De que tiene envidia?
            ––De la inteligencia. Y de la paciencia de mis amigos.
            ––¿Un paseo en el parque o una noche en la ópera?
            ––En caso de coincidencia trasladaría el paseo para el día siguiente, siempre que la ópera fuera de mi gusto y no interviniera en ella Mariame Clément.
            ––¿Cerveza, vino o whisky?
            ––Agua del tiempo.
            ––La música que prefiere.
            ––El silencio.
            ––Una palabra malsonante que use a veces.
            ––Político.
            ––Un fin de semana ideal
            ––Cualquiera que discurra con el plan previsto, no me gustan las sorpresas ni siquiera si son para bien.
            ––Un lugar para pasar las vacaciones.
            ––Detesto las vacaciones. Es un trauma de infancia.
            ––La mejor época de su vida.
            ––La que estoy viviendo.
            ––Un jugador de fútbol.
            ––No uso.
            ––Lo que escogería para la última cena.
            ––No saber que era la última. Si lo supiera, cualquier cosa se me atragantaría.
            ––¿Qué libros le han impresionado más recientemente?
            ––Memoria por correspondencia de Emma Reyes, este misma tarde. Y siempre que vuelvo a ella, la poesía de Álvaro de Campos.
            ––Un cuadro que tendría en casa para verlo todos los días.
            ––Los únicos cuadros de los que no me canso nunca son las ventanas.
            ––Una película que le gustaría ver una y otra vez.
            ––Ninguna. Sería como estar casado con ella, la mejor manera de detestarla.
            ––Un epitafio.
            ––Solo las dos abstractas fechas (1950-2050) y el olvido, como en el poema de Borges


Lunes, 14 de abril
UNA REVOLUCIÓN TRANQUILA

Algunos amigos de cierta edad se muestran inquietos con lo que está pasando, con lo que va a pasar en las próximas elecciones y se extrañan de verme a mí menos preocupado que ilusionado. Pero no pasa nada que no haya ocurrido otras veces: un desajuste entre el país oficial y el país real. El parlamento, que sigue teniendo toda la legalidad del mundo, ha perdido su legitimidad. Como en la época de Carlos Arias, el Jefe del Estado está más cerca del sentir de la calle que del gobierno. El PP y el PSOE, tal como los hemos conocido hasta ahora, ya son historia. El cuento de la transición se ha acabado. Ya solo falta el epílogo: mandar a los últimos figurones de entonces a casa o a la cárcel. Y todo, al contrario de lo que ha ocurrido siempre en la historia de España, conseguido solo con la fuerza de los votos. ¿Cómo quieren que no esté ilusionado?


Miércoles, 15 de abril
JUEGO DE TRONOS

Charlamos un rato, después de la presentación de la revista Anáfora, en el café-librería La Revoltosa, junto a la playa de Gijón. Inés Illán, que ya estaba a la izquierda de la izquierda cuando era mi profesora de latín en la Facultad, pierde los papeles cada vez que me le mencionan a Podemos; Ángel Alonso dice que han mostrado lo que de verdad son, unos oportunistas, al saludar al rey en Bruselas y hacerle un regalo; Carlos González Espina, el veterano editor de las publicaciones de la tertulia, tampoco les tiene mucha simpatía. Yo acabo de exasperarlos al contarles que me han invitado a la comida del 22 de abril en el Palacio Real y que no solo pienso asistir, sino que estoy tan contento como un adulto al que le hubieran regalado el tren eléctrico con el que soñó de niño. Y no por el hecho de comer con los reyes, un incómodo honor, sino por el lugar, lleno de historias y centro de la historia de España durante los últimos tres siglos.
            El comedor donde se celebrará el almuerzo en homenaje a Goytisolo, premio Cervantes, tiene una curiosa historia. Ocupa lo que fueron las habitaciones de la reina Mercedes. Cuando ella muríó, a los diecinueve años y a los cinco meses de casarse, Alfonso XII mandó cerrarlas y conservar allí todas sus cosas como un homenaje perpetuo a su memoria. Pero ya se sabe que la perpetuidad, en cuestiones de amor, dura poco. Razones de Estado obligaron al rey al matrimonio con María Cristina. Lo primero que hizo la nueva reina fue abrir las habitaciones precintadas, sacar fuera las cosas de la anterior reina, tirar tabiques y crear una amplia estancia que serviría como salón de baile o comedor de gala. El suelo, antes de frío mármol, lo cubrió de parquet, el primer parquet que hubo en Madrid. Al rey aquel hacer tabla rasa con sus recuerdos de amor, no le importó demasiado: ya se había consolado del loco amor por su prima en los brazos de la cantante Elena Sanz.
            Conservo una fascinación infantil por castillos, palacios, caserones llenos de fantasmas. Podría escribir un grueso libro con todas las historias que he leído o me han contado sobre el Palacio de Oriente. En su planta superior comienza una de mis novelas favoritas de Galdós, La de Bringas. Ese piso es un laberinto con pasillos que parecen calles y se cruzan y se entrecruzan formando plazuelas; ahí habitada la servidumbre y había peleas y rencillas y cantes y bailes y podía considerarse como un barrio más de Madrid. “una real república que los monarcas se han puesto por corona”.
            Otra de mis historias favoritas del Palacio es la de la noche del 14 de abril, cuando en el inmenso caserón, abandonados de todos, duermen, o tratan de dormir, la reina Victoria Eugenia, el príncipe de Asturias, que se encuentra enfermo, y los infantes. El rey ha escapado por el Campo del Moro y entre la muchedumbre jubilosa que celebra la llegada de la República hay exaltados que pretenden dar un escarmiento a la real familia. La reina, abrazada a sus hijos, ha oído los golpes con que trataban de derribar uno de los grandes portones de palacio. Los cortesanos han huido, la guardia real ha quedado reducida a la mínima expresión. Y es entonces cuando las juventudes socialistas, con brazalete rojo, rodean el palacio y lo protegen hasta que al día siguiente María Victoria y sus hijos suben a los coches que los llevarán hasta la estación de El Escorial. Cuando el tren llega a París, allí está esperándoles el rey. Y es fama que la reina, harta de aguantar sus calaveradas, tras el protocolario saludo ante los fotógrafos, le dice: “No quiero volver a ver tu fea geta en la vida”. Y cumplirá su palabra.
            Pero el último jefe de Estado que vivió en este palacio, parece que no demasiado confortable, no fue un rey, sino un presidente de la República. Alcalá Zamora prefirió seguir en su casa particular y aquí solo tenía lo que él llamaba “la oficina”, en las habitaciones del duque de Génova. Pero Manuel Azaña, que quería darle toda su dignidad protocolaria al cargo de Presidente, trasladó al palacio su residencia, alternándola con la Quinta del Pardo. A su cuñado Rivas Cherif, tras el estallido de la sublevación militar, lo recibió “en una de aquellas lóbregas habitaciones del Príncipe, tapizadas de rojo oscuro, con una luz alta y triste”. Hubo quien atribuyó el pesimismo del Presidente desde aquellos primeros días del inicio de la guerra “a la abrumadora tristeza que caía de aquella luz angustiosa”. Acompañó luego Azaña a Rivas Cherif a uno de los balcones que daban sobre el Campo del Moro. Le señaló la línea azul de la sierra, hacia el Alto del León: “¿Ves aquel humo? Ahí están ellos. No tardaremos en encontrárnoslos en la Plaza de Oriente”.
            Y toda la tragedia de la República, de aquella ilusionada República de abril, “antes de tiempo y casi en flor cortada”, se resume en una escena que tuvo lugar en este mismo palacio. Tras un  intento de fuga en la Cárcel Modelo, la multitud asalta la prisión, matando a todos lo que allí se encuentran. Rivas Cherif se entera al día siguiente, al ir a visitar al Presidente. Lo encuentra en las habitaciones del Duque de Génova, tapizadas de amarillo y con cuadros de Tiépolo, sentado junto a una mesa de mármol de colores, la cabeza apretada entre las manos. Al saludo de su cuñado, también su mejor amigo (“¿Cómo está, Presidente?”), levantó el rostro desencajado: “¡Cómo quiere que esté! ¡Han asesinado a Melquíades!”
            A Melquíades Álvarez, su mentor político, y a tantos otros, los asesinaron aquel día sin que ni siquiera el Presidente pudiera hacer nada por impedirlo.


Viernes, 17 de abril
MI PAPEL PREFERIDO

En el gran teatro del mundo, mi papel preferido es el de espectador. Verlo todo y vivir al margen de todo, sin ambición ninguna.


44 comentarios:

  1. No sabía que las juventudes socialistas habían evitado el asalto al palacio real. Menos mal. Era lo que faltaba a nuestra negra historia: un asalto a Versalles o al Palacio de Invierno, con asesinato de niños incluido. Menos mal que no pasó.

    Luego, durante la II República, las cosas se hicieron muy mal. En lugar de anticlericalismo barato y nacionalismo ramplón, la República debió acometer reformas, empezando por evitar el hambre física de los jornaleros andaluces y extremeños. Pero la energía se derrochó en demagogias y politiquerías de salón.

    Y después la historia siguió siendo escrita en clave tremendista. Pienso en Miguel Hernández, asesinado de frío y hambre (o sea, tuberculosis) por los franquistas en la cárcel de Alicante, y en su mujer (Josefina Manresa, la "mujer morena resuelta en luna"), y recuerdo también que al padre de Josefina lo asesinaron en zona republicana por el mero hecho de ser guardia civil. ¡Pobre Josefina!, víctima inocente de las dos españas, a cuál más asquerosa!

    Y es cierto que (¡hola, esperanza!) vienen nuevos tiempos. Casi nadie se da cuenta de que todos los cambios que están anunciándose vienen propiciados por Internet. Ha sido la Red la que ha acabado con los asesinatos de Eta (y con la terrible "omertá" a que dicha cuadrilla tenía sometida a la sociedad vasca), y será gracias a Internet como se pondrá fin al bipartidismo y a la corrupción generalizada en España (decid siempre España, nunca esa majadería de "Estado Español"): un país en el que, durante décadas, ninguna adjudicación de contrata pública se ha hecho limpiamente a la mejor oferta, sino a la que dejaba la oportuna "mordida" en las arcas del partido (y, de paso, en el bolsillo del tesorero/intermediario).

    Dicen que, al igual que la historia se dividió en antes y después de J. C., pronto habrá que distinguir dos períodos: antes y después de Internet. Yo también creo que será así.

    Pero, volviendo a los cambios que se avecinan, el pacto PP-PSOE toca a su fin. La sociedad ha dicho basta y por tanto "Bye, bye, vieja guardia". El estercolero de la historia os está esperando.

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    1. Un poco ingenuo eso de que todos los cambios vienen propiciados por Internet. Y una simple falsedad lo de que Internet acabó con Eta.

      JLGM

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    2. Braulio Redondo Cabezón19 de abril de 2015, 23:15

      Oiga, don Zumo, no es de recibo que usted deje en el aire que, de no haber sido por las Juventudes Socialistas, se hubiese corrido el riesgo de que el noble pueblo de Madrid hubiese pasado a cuchillo a los vástagos de la familia real. Tal como lo escribe usted, pudiera deducirse semejante detalle no menor.
      Y el fino análisis que hace de los gobiernos de la República (cómo iban a ocuparse de la gente, si no hacían más que correr a los curas de arremangada sotana por calles, glorietas y campos del Estado Español..., y además que Lorca se había llevado la camioneta del reparto del pan de la beneficencia republicana) es par tesis doctoral.
      En cuanto a que los dos Estados Españoles sean igualmente asquerosos..., pues que me parece que me está faltando usted al respeto, don Zumo, que mi media parte del Estado Español es pobre pero muy honrada.

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  2. ¿Pero es que no se da cuenta? Fueron los foros, chats, redes sociales, blogs, webs..., la sociedad en efervescencia hablando (por fin) sin miedo a las represalias.Eso fue lo que acabó con esa repugnante ralea de asesinos. La libertad.

    En el colmo de la demencia, he oído a personas decir que con Eta acabó... Osama Bin Laden. De verdad, no me lo he inventado. Pero obviamente es absurdo. Antes del atentado del 11 marzo 2004 Eta había perpetrado masacres terroristas terribles, aunque es verdad que ninguna tan mortífera como aquel atentado del terrorismo islámico. Recordemos que Eta incluso había colocado una bomba en la estación de Chamartín de Madrid, aunque no llegó a estallar.

    Tampoco creo que con Eta acabase la policía. De hecho, la cúpula de Eta hubo sido desmantelada en diversas ocasiones, y siempre renacía y se reorganizaba.

    Es cierto que en los últimos tiempos aumentó la presión ciudadana, tras el terrible secuestro de Ortega Lara (casi dos años en un agujero en Mondragón) y el asesinato de Miguel Ángel Blanco. Pero incluso después de eso (y de la marea humana de Ermua, etc) los asesinos siguieron matando personas.

    Así que, ¿qué fue según García Martín lo que acabó con Eta? No sabe, no contesta.

    Pues yo se lo digo: con Eta acabó la sociedad, el pueblo vasco, la gente, que por fin se desprendió del miedo (de la terrible "omertá" propia de todo grupo mafioso), y ello gracias a Internet y al anonimato que éste permite, tan necesario para hacer frente a la escoria humana que tenía amedrentado y sometido al pueblo vasco.

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    1. Eta sigue existiendo, no se ha disuelto ni ha entregado las armas, y sigue habiendo detenciones de etarras. Si ha declarado una tregua indefinida ha sido principalmente por la presión de la izquierda abertxale, que pretende emplear medios democráticos para conseguir los mismos objetivos.
      Lo de que los asesinos dejen de matar porque la gente proteste anónimamente en Internet es la cosa más peregrina que he oído nunca.

      JLGM

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    2. No han entregado las armas (ni las entregarán nunca). Simplemente están oxidándoseles.

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    3. Vino un "gudari",
      mató a un humano, fuese
      y no hubo nada.

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  3. Ay qué risa, Basilisa. Ay qué guasa, Nicolasa. ¿Presión de la izquierda abertzale? ¿De los mismos que siempre han sido comparsas de los asesinos? No se me olvida a Jon Idígoras y otros defendiendo a esa gentuza. Ni tampoco podemos olvidar a otros de su cuerda, insensibles ante tanto dolor, siempre con su perfidia, con su calculada doblez, con su maldad.

    ¿Presionaron algo para que liberasen a Ortega Lara (casi dos años encerrado en un zulo)? Pienso muchas veces que ese agujero de Mondragón debería ser visitable, como un monumento a la crueldad humana, al igual que puede visitarse el campo de concentración de Auschwitz.

    Y por cierto "izquierda abertzale", ¿no es un perfecto oxímoron?

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    1. No sé quién se esconde detrás de zUmO, etc, pero sus respuestas podrían estudiarse como un perfecto ejemplo de incapacidad para el uso del razonamiento. Dos cosas, solo para el hipotético lector..
      1. La realidad es cambiante y lo que en un momento apoyaron lo que ellos llamaban "lucha armada" pueden llegar a la conclusión de que resulta contraproducente para lograr sus objetivos.
      2.. La opinión, para ser tomada en serio, requiere previa información y no confundir la calificación moral de unos hechos con la descripción y el análisis de los mismos.

      JLGM

      "Izquierda abertzale" no es ningún oxímoron. La izquierda puede ser nacionalista o no. Nacionalistas, y muy nacionalistas, eran los liberales españoles que se alzaron contra Napoleón y redactaron la constitución de 1812. Menos nacionalista era el rey Fernando VII que entregó la corona a Napoleón y luego propició que un ejército francés entrara en España para derribar al gobierno constitucional.

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    2. Napoleón invadió España en 1808 como Hitler invadió Francia en 1939. El País Vasco nunca ha sido invadido por España (ni por Castilla), salvo que se quiera adulterar la historia (a lo que tan aficionados son los nacionalistas). Como de ordinario, la comparación que García Martín hace es de peón caminero.

      "Nacionalismo de izquierdas" es una contradicción o antítesis terminológica porque las personas de izquierdas pretenden la igualdad social, sin diferencias por razón de nacimiento o de circunstancias económicas, familiares o sociales; y entre esas posibles circunstancias que impiden la igualdad está la pertenencia a una raza o a un territorio.

      Lo que el nacionalismo de izquierdas parece defender es "igualdad, sí, pero sólo dentro de mi tribu o clan". No igualdad respecto de murcianos, cántabros o extremeños. O sea, según eso el elemento territorial sí es admisible como factor de desigualdad (¿por qué sí?, y entonces ¿por qué no los otros?). Evidentemente es una incoherencia.

      Que la derecha sea nacionalista puede entenderse, pero que la izquierda lo sea resulta incomprensible.

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    3. Como presidente del Ilustre Colegio de Peones Camineros, exijo una rectificación.

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  4. Patxi Aguirregomuzcorta.20 de abril de 2015, 9:22

    Pues a Lasa y a Zabala les sirvió de poco la dichosa Internet. ¿O esa chusma no cuenta?

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    1. Lo de Lasa y Zabala ocurrió en 1983 (véase http://es.wikipedia.org/wiki/Caso_Lasa_y_Zabala). Entonces Internet no existía ni por el forro. Por otro lado, el Estado de Derecho investigó, juzgó y condenó a los autores de esos asesinatos. No se les ha erigido estatuas, no se les enalteció, no se les nombró hijos predilectos de su pueblo natal (a diferencia de otros asesinos, ya se sabe a quiénes me refiero).

      Internet apareció en torno al año 2000, pero su eclosión y generalización tardó aún varios años.

      Los últimos asesinatos de Eta fueron (creo recordar) hace unos cinco años: dos trabajadores ecuatorianos que dormían en un coche en un aparcamiento de la T4-Barajas. Cuando aquello ocurrió Internet echó humo, la sociedad (también la vasca) clamó en la Red. Hubo iniciativas y convocatorias para concentrarse ante las sedes del brazo político de esa gente.

      Vieron la que se les venía encima.

      ¿Alguien se imagina qué ocurriría ahora en la Red, qué iniciativas sociales surgirían espontáneamente en la sociedad (algunos dicen, redundantemente, "sociedad civil") gracias a Internet, si esa gente volviera a secuestrar o a asesinar?

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    2. En Internet, en todas las redes sociales, en todos los medios (unos tratándolos de una manera, otros de otra), en todos los foros, en todas las conversaciones..., están presentes las rapiñas, las prevaricaciones, las estafas de este gobierno corrupto. Si embargo, recientísimas encuestas dan al PPcomo ganador en muchas partes en los próximos comicios. ¿Que no van a sacar más del 30% de los votos? ¿Parece poco? ¿Será gente que no tiene en casa conexión con Internet?
      Digo que existen factores ideológicos, cerrilidades incorregibles, sectarismos fosilizados, estulticias enajenantes, intereses creados que resisten numantinamente a lo que les venga por Internet o por vía parenteral.

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  5. Sinceramente, no entiendo que hace la gente de Zumo leyendo y comentando estas mediocridades, que claramente no están a su altura estética ni, sobre todo, ética. Que yo lea esto vale, pero ustedes no debieran lidiar en esta arena.

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  6. Asturiano en el exilio20 de abril de 2015, 12:22

    DESDE LA CALLE GÉNOVA... bluf!
    El pasado viernes 17, el número 1 de los trending topics de Twitter fue #19HGenova. Se trataba de una convocatoria para manifestarse ante la sede del PP, en la calle Génova, en Madrid, a las 7 de la tarde, con motivo de los acontecimientos protagonizados por Rodrigo Rato. Vista la efervescencia que la cita había despertado en Internet (lo escribo con mayúscula, al igual que Twitter, porque así parece tener más trascendecia), me dije: esto no te lo puedes perder, allí se van a juntar todos los tumba-gobiernos habidos y por haber, todos los agitadores de Twitter, todos los indignados. Pensé que habría una correlación directa entre los más de 50.000 tuits comentando la convocatoria y el número de personas que asistirían con intención de afearles la conducta a los dirigentes del partido popular. Llegué a las siete menos diez. Había policía (bastante, mucha, muchísima) y periodistas (algunos, todos con contratos precarios), pero ni rastro de manifestantes. Bueno, por resumir: creo que en ningún momento de la velada el número de manifestantes llegó a superar los 300 (a Jerjes no lo vi). Durante las dos horas que duró la manifestación en la acera (si pisas la calle se te cae el pelo y pierdes 600€), me dio tiempo de hablar con unos profesores jubilados (eran mayoría las personas de edad avanzada con +60 years old), merendar hacia las ocho en la cafetería Mallorca para recuperar fuerzas revolucionarias (qué buenas estaban las torrijas) y, cuando la cosa manifestatoria ya languidecía y entraba en parada cardiorespiratoria, pasarme por la librería Internacional, donde disfruté mucho con las novedades editoriales alemanas, francesas e inglesas. (Qué bonito es el extranjerismo, y está todo tan limpio...) Todas estas pequeñas cosas sin importancia sucedieron al lado de la sede ppera. En la calle Génova. Tramo superior. Al fondo, a la derecha. Como la localización más habitual de los los W.C. en los entrañables bares españoles de pie de barra salpimentada de servilletas arrugás, cabezas de gamba difuntas y algún que otro resto de león come-gamba.
    Conclusiones: hay muchas, pero una evidente es que la importacia REAL de internet está sobrevalorada, y la de twitter, ni te cuento. O al menos, en entredicho. Los desahogos virtuales pueden consiguir muchos trendings topics, pero si la praxis revolucionaria del siglo XXI se limita al ámbito virtual, estamos aviados. Con salud.

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    1. No creo que concentrarse ante la sede de un partido sirva de mucho. Más operativo es participar en foros de opinión, crear movimientos o partidos (caso de Podemos) o incluso sitios de encuentro virtual, y con todo ello concurrir después a las elecciones.

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  7. No entiendo tantas críticas a los Zumados. Sancta simplicitas! Algún día se reirán de su propia ingenuidad; mientras ese día no llega, uno se la envidia. Qué lejos le queda, y cómo la echa a veces uno de menos. Quién pudiera.

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  8. Zumo de Poesía es un blog que hace una labor encomiable y desinteresada: publicar cada día un poema de calidad; se lo recomiendo a quienes no lo sepan. Pero hace algo que no acabo de entender: ¿cómo es que participa en algunos blogs dando opiniones (muchas veces de contenido político) como colectivo (Z.de P.)? No creo yo que todos los componentes del grupo piensen igual o que sostengan las mismas posturas en temas tan personales como los que parecen suscribir colectivamente en estos comentarios de aquí y ahora. Sandra Suárez (saludos, Aldonza) tiene la buena costumbre de signar con su nombre los escritos propios que remite... Pero en estos de "aquí arriba" no existen matices, se debiera entender que lo que se opina es en nombre de todos los zumistas numerarios.
    A los que les mando un saludo cordial.

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  9. La opiniones, y más en política, son de lo más variadas y es difícil ponerse de acuerdo. Pero lo de Zumo e Internet me parece (voy a ser descortés) una simpleza difícilmente superable. ¿Alguien puede decir en estos tiempos en que hay tantos atentados, asesinatos, secuestros, crímenes de los fanáticos de uno y otro signo, muchos de ellos difundidos en Internet (como los degollamientos del Estado Islámico), que hoy no serían posibles los crímenes de Eta porque existe Internet? La verdad es que la manera de razonar de algunas personas escapa a cualquier atisbo de racionalidad.

    JLGM

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    1. ¿No existirá a veces la tentación megalo-mitómana de "incendiar la red" con una trastada que saque a uno del agujero del anonimato (no estoy pensando ahora en A2, a quien supongo una persona de orden)? En ese caso, la notoriedad inmediata que da Internet obraría como acicate.

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  10. Sin internet no habria surgido Podemos, seguirian dándose indultos a tutiplén a los corruptos, los periódicos continuarían siendo sectarios... En el manual del buen dictador (Corea del N, Cuba, China...) el capítulo 1 dice "poner trabas a internet". No hay más ciego que el que no quiere ver.

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    1. El pensamiento saltimbanqui sigue haciendo de las suyas en estos comentarios. De afirmar que gracias a Internet desaparecieron los crímenes de Eta a decir que las dictaduras ponen trabas a Internet (y a cualquier medio de difusión, pero no solo las dictaduras) hay un cierto trecho que mi mente, educada en la lógica, se niega a pasar por alto. Una cosa no deja de ser falsa porque sea cierta otra que, vista desde lejos, se le parece.

      JLGM

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  11. La diferencia es que antes solo tenian medio de comunicaxión Cebrián, Pedrojota y Godó, y ahora cualquier ciudadano tiene (o puede tener) gratis un medio de comunicación. A algunas simple minds les parece irrelevante.

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  12. Medios de comunicación. Sorry.

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  13. Que la diferencia no sea irrelevante (que, en efecto, no lo es) no significa que los Zúmidos, con su ingenuísima teoría de que internet acabó con ETA, tengan razón. Y, airado amigo, el que alguien no esté de acuerdo con uno no significa que posea necesariamente una "simple mind". Creerlo, en cambio (eso de que desacuerdo con uno es igual a simpleza) sí parece un indicio de eso, de simpleza.

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  14. He leído todas las intervenciones y doy un 70% a Zumo y un 30% a García Martín. Internet no será la panacea pero va a hacer, ya está haciendo, que las cosas cambien mucho (yo creo que para bien). Lo que queda bastante claro, en esta dialéctica de besugos (con perdón), es que raramente en un debate prevalece la honesta búsqueda de la verdad, pues generalmente la ahoga el torpe prurito de querer tener razón.

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    1. Diga usté que sí, don Pablo, que lo de calificar de "simple minds" a quienes tengan la osadía de no estar de acuerdo con uno es un ejemplísimo de "honesta (aunque puede que también un poquitín engreída e impertinente) búsqueda de la verdad". Y yo que lo vea (con mis ojos de besugo, naturalmente). Ay, Señor.

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  15. En general todos deberíamos ser más respetuosos y menos descalificatorios al sostener nuestras opiniones y refutar las adversas, pero el primero que no puede tirar piedra alguna es el autor de este blog, quien en sus intervenciones utiliza expresiones descalificatorias (e incluso atentatorias contra el respeto), como decir que quien no comparte sus opiniones no conoce los criterios del razonamiento humano. "Sus respuestas podrían estudiarse como un perfecto ejemplo de incapacidad para el uso del razonamiento", García Martín dixit. ¿Es esto un ejemplo de tolerancia en la conversación? Dejo espacio para contestar: ..............

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    1. Yo no he reprochado a nadie,estimado Rafael Baldaya, el lenguaje más o menos directo. Calificar una tontería de tontería, y demostrar por qué es una tontería, me parece una obligación para con los lectores. Y decir que Eta dejó de asesinar gracias a Internet es una tontería (y me contendré para no calificarla de "solemne"). Y lo de que ahora, gracias a Internet, todos somos Prisa y Pedrojota, pues en fin, cuando menos es una inexactitud. Con Internet o sin ella, siguen teniendo su importancia los grandes medios de comunicación. No es lo mismo que yo dé una noticia en mi blog o en mi Facebook a que aparezca en la portada de El País.
      En fin, que habría que descalificar más algunos razonamientos que poco tienen que ver con la lógica y que carecen de la adecuada información. Los míos los primeros, siempre que se den los datos o los argumentos adecuados.

      JLGM

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    2. Con los periódicos de siempre el gobierno daba indultos a troche y moche para todos los corruptos. Tanto los gobiernos del PSOE como del PP. Solo con Internet han dejado de darse, por la presión social. Gallardón tuvo que dar marcha atrás en el indulto del kamikaze ( tramitado por su ddspacho ) y fue el punto de inflexión. No por la prensa tradicional, sino por la Red. Ajeno a toda sutileza, hay quien no se entera de que el mundo ha cambiado.

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    3. Los periódicos de siempre se difunden en papel y en Internet, no hay contraposición. Pero no todo lo que aparece en Internet tiene la misma influencia: no da igual que aparezca en la página Web del New York Times que en la Gaceta de Astorga o en un blog personal de un don nadie (yo, por ejemplo).

      JLGM

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    4. Vale, pero lo de los indultos es verdad. Por cierto, el indulto del "kamikaze" no fue en un asunto de corrupción, sino de homicidio por un conductor que iba deliberadamente en dirección contraria. La defensa del homicida se llevó en un bufete ligado a Gallardón, quien concedió el indulto. El clamor social EN LA RED (EN INTERNET) -¿SE ENTIENDE ESTO?- fue mayúsculo. Finalmente dicho indulto fue dejado sin efecto. E inauguró un nuevo panorama en que han desaparecido los indultos a políticos corruptos (que antes era la regla general). ¿Fue gracias a la prensa tradicional? ¿Se debió a alguna genialidad de García Martín? No: fue por la presión de la sociedad (algunos redundantemente dicen "sociedad civil") a través de Internet y de sus redes sociales. Entérese ya, releches.

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  16. Calificar un argumento del que se discrepa de "tontería" es impropio de un debate constructivo y tolerante. Tengo la impresión de que García Martín confunde su verdad con la verdad, y no va con nadie a buscarla, etc. Pero en fin, a no todo el mundo puede aplicársele el machadiano consejo. Sobre que calificar algo de "tontería" sea una obligación hacia los lectores, de eso nada monada. Es simplemente una falta de respeto. Los lectores no precisan de tutelas (y menos de ese jaez), pues son (somos) lo suficientemente inteligentes como para, después de leer un intercambio o contraste de pareceres, extraer nuestras propias conclusiones.

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    1. No todos los pareceres son iguales. Puedo discrepar sobre si Rajoy es un mal político, no de que es gallego. Si afirmo que nació en Sevilla, cometo un error. Y debo rectificarlo. Si me empecino en no hacerlo, merezco los adecuados calificativos. Y no sé yo cuál es la manera más precisa de denominar una tontería (todos hemos dicho alguna, y yo el primero, alguna vez) que con la palabra tontería. Las personas merecen respeto, las insensateces que a veces decimos sin pensar no merecen ninguno.

      JLGM

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  17. Debiera el autor del blog conducirse con mayor modestia o tolerancia, como es propio de las personas intelectualmente solventes. El hecho de ser autor del blog no le otorga funciones descalificadoras sobre opiniones; sí para discrepar de ellas pero no para motejarlas de tonterías. (Por cierto: que Rajoy es gallego no es una opinión, sino un hecho o dato objetivo.¿Es Vd capaz de captar la diferencia?)

    De todos modos, lo que una persona dice sobre algo o alguien a menudo revela más sobre quien habla que sobre aquello de lo que habla. Es lo que quiere decir esa frase de "Cuando Juan habla de Pedro, dice más de Juan que de Pedro". En este sentido las mencionadas aseveraciones sí son muy ilustrativas.

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    1. Pero ¿tú no conoces a JLGM? Lo suyo es patológico: cuanta menos razón tiene, más ganas de discutir experimenta.

      Es como el Caballero Negro de la película de los Monty Python (a partir del minuto 2):

      https://www.youtube.com/watch?v=g88cPMDAiEQ

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    2. ¿No tengo razón al decir que si Eta dejó de matar no se debió al miedo de que criticaran sus crímenes en Internet? Afortunadamente, no solo leen este blog sus comentaristas. Y esa es la tontería a la que yo me refería. Todo lo demás es andarse por las ramas.

      JLGM

      Sin que ello suponga que yo no crea en la importancia de Internet y en los cambios que ha traído al mundo (aunque no parece que la disminución de los delitos sea uno de ellos).

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  18. La "omertá" era parte indisociable de Eta. Sin "omertá" no hay mafia que valga. Sin oscuridad no hay ratas ni cucarachas. Vino la libertad de expresión y se hizo la luz.

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    1. Qué cosas. La "omertá" no era más que sintonía o simpatía de una parte del pueblo vasco con Eta. Quien se pasee por allí comprobará que no ha desaparecido del todo en ciertos sectores, pero ya se han convencido (los ha convencido Bildu) de que sus objetivos pueden alcanzarse más fácilmente por medios democráticos. Libertad de expresión para criticar a Eta siempre hubo: yo no he leído un solo artículo a su favor y creo que solo un diario vasco los defendía y recibió el adecuado castigo policial (fue cerrado).
      El terrorismo en el mundo, ahora que hay Internet, no es menor. Las razones de la inactividad de Eta son otras. Pero quien quiera confundir Internet con una varita mágica para acabar con la "omertá" que vaya a predicar esa buena nueva a Nápoles o Sicilia (y a tantos otros lugares de Italia con su mafia o su camorra) donde sigue existiendo, a pesar de que, puedo asegurarlo, napolitanos y sicilianos manejan Internet tan bien como cualquier vasco.

      JLGM

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  19. Todo se irá haciendo. No quizá de un día para otro. Tal vez sin prisa pero sin pausa. Dentro de unos años hablaremos. Esto no ha hecho más que empezar.

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  20. Los comentarios han derivado hacia lugares insospechados. La Segunda República trató de comprar el palacete de La Huerta (en realidad, se parecía más a una quinta o una finca rural, ya que entonces estaba a las afueras de la ciudad, entre el paseo de la Catellana y la calle Serrano que se llamaba boulevard Narváez). Había vivido en él el líder conservador durante la Restauración Antonio Cánovas del Castillo, aunque la propietaria fue su mujer que lo heredó de su familia. A Manuel Azaña le preocupaba que don Niceto Alcalá-Zamora viviera en su casa particular, por cuestiones de seguridad y de protocolo. Pero no llegaron a un acuerdo y el Tesoro Nacional nunca compró la finca. Por eso Azaña se traslada cuando lo nombran presidente al Palacio Real. En el solar de lo que fue la casa de Cánovas se encuentra hoy la embajada de Estados Unidos en Madrid.

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  21. En visita a la colmena palaciega, don Manuel de Pez, “Director en Hacienda”, charla con su amigo don Francisco Bringas, enfermo de los ojos.

    «Está ya en nuestras costumbres y parece una quijotería el mirar por la Renta. Es genuinamente español esto de ver en el Estado el ladrón legal, el ladrón permanente, el ladrón histórico... Entre otros adagios de inmoral filosofía, hay aquel de “tiene cien años de perdón, etcétera”... Es mi tema; esto es un país perdido... Y vaya usted a echársela de moralista. El año pasado, una marquesa bastante acomodada, a quien no quise facilitar el paso de un cargamento de vestidos, por poco me saca los ojos. Se puso hecha una leona y clamaba por la revolución y los demagogos. Una duquesa, demasiado lista, se dio el gusto de pasar, en mis barbas y en las barbas del primo de Irún... ¡pásmese usted!... ¡cincuenta y cuatro baúles llenos de novedades!».

    (Digitalmente leída “La de Bringas”, don Benito. Entera, reconózcame cierto mérito.)

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